Casa de Gonzalo Montoya.

- Porque es hija...o hija/sobrina...algo raro, se supone que es la sobrina de un amigo de mi hermano, pero como es como si fuera la hija del hombre pues...- me alcé de hombros-. Hay bodas en las que solo van los adultos, otras en las que también van los hijos...pues Brooke es muy social y no ha invitado al panadero del barrio porque Gonzalo se lo ha prohibido totalmente- le expliqué riéndome, era un ejemplo-. Creo que quería invitar a tu abuelo a la boda- le dije a Hannah riéndome un poco- en realidad a todo el asilo- bromeé-. No me estoy durmiendo, pero me gusta eso- señalé su mano.

-¿Entonces es que vas a correrte?- pregunte riéndome- Lo haces fuera de mi alfombra, eh? Por favor te lo pido- le dije girando la cabeza para mirarle, porque estaba de espaldas a mi.- Pues con mi abuelo se lo pasaría pipa en la boda, sabe cantar rancheras, es un cachondo- el ya lo conocía, mi abuelo era el mejor abuelo del mundo.- ¿Y no ha invitado al panadero? A mi me cae muy bien, que lastima..- yo lo habría invitado, era un buen hombre.

- ¿Correrme?, joder Hannah- me reí un poco mirándola de reojo- que no, ¿cómo me voy a correr solo porque me hagas cosas ahí?- puse una mueca-. ¿Tu has visto a algún tío hacer eso?, que triste...- negué con la cabeza-. Ya, ya lo se- reí- yo le dije que lo invitara pero Gonzalo es...Gonzalo- no había más que decir-. Ya, tu eres una versión loca de Brooke- reí un poco- creo que por eso le gustas- aunque a Brooke le gustaba todo el mundo, pero seguro que pensaba que éramos novios o algo así, porque estaba todo el rato diciéndome lo guapa que era, queriendo que la invitara a casa y esas cosas.

-Una vez conocí un chico que se corría solo con que le dejaras tocarte las piernas- le dije riéndome- Tu es que tienes poco mundo, pero por aquí hay gente muy rara- explique mientras seguía masajeando su nuca con mis dedos, pasando por su pelo y un poco por el comienzo de su espalda para despues subir.

- Pues ese tío no habría echado un polvo en su vida entonces- reí al imaginármelo y al momento decidí dejar de hacerlo porque era bastante asqueroso, por suerte mi imaginación no llegaba a muchos detalles-. Ya, ya se que hay gente muy rara, no hay que tener mucho mundo, pero nunca había oído eso- me reí-. No me digas que le dejaste tocarte las piernas- comenté mirándola de reojo.

-Solo un poco- le explique sobre el chico- Es que me daba pena, no iba a follar y total, a cualquiera le dejo que me toque las piernas. ¿quieres probar?- pregunte levantando las piernas por los costados de su cuerpo- Me echo crema hidratante, están muy suaves, es normal que se corriera- vacile contenta

- Pues no deberías dejarle a nadie que te las toque- comenté mirándola, bajé la pierna de mi lado-. No te la voy a tocar porque si- dije mirándola-. No dudo que las tengas suaves, de cualquier forma las piernas de una chica son suaves por naturaleza y si encima se echa crema...- reí-. Imaginate el culito de un bebé.

-¿Estas rechazando mis piernas?- pregunte abriendo mucho los ojos- Pues ya no te toco mas el cuello.- dije parando de hacerle aquello, con tono cantarin- No todas las mujeres las tienen suaves, hay algunas que no se depilan y tienen pelos o que se depilan pero pinchan... tu has tocado pocas piernas- dije riéndome.

- A lo mejor todas las que he tocado estaban bien depiladas y no pinchaban...puede que haga selección de piernas- comenté riéndome un poco-. Se reconocer una buena pierna solo con mirarla...- cogí su mano y la llevé a mi nuca de nuevo-. Hazme cosas anda..- le pedí poniendo una mueca-. Mira, va a dejar de llover dentro de nada y me voy a ir, se buena amiga, que no te toco la pierna porque no me hace falta, se que es suave.

-Eres un aprovechado, seguro que solo has venido para que te toque el cuello...- me queje mirandole y apartando la mano de su nuca.- Por eso y por mi famoso pastel de carne.- sonreí.
-Hannah, corre, baja... mira que maravilla- se escucho que decia mi padre, rode los ojos y pase de ellos.
-¿Te hace un porro?- pregunte buscando en el cajon, yo queria fumar, me apetecia.

- Pues sí, para que te voy a mentir...bueno, y también para mangaarte la cama- dije riéndome a carcajadas y girándome a mirarla-. No, no me apetece- comenté sobre el porro mirándola. Era normal que ella pasara de sus padres cuando ellos siempre pasaban de ella- imagina que me coloco y ahora salgo a la calle y por ir colocado me atropella un coche...no puedo dejar que te sientas culpable- dije riéndome.

-Oh, si lo que te preocupa es eso puedes fumar tranquilo, no me sentiría culpable.- dije negando con la cabeza- Todo el mundo sabe que hay que mirar a los lados cuando se cruza, esa es una lección de primero de parbulitos- saque el papel y la hierba y me senté de nuevo en la cama para empezar a liarme el porro.

- Aaalaa, que malvada eres, no me esperaba eso de tí, con lo que yo te cuido, te mimo y te quiero, y tu que no te importa lo que me pase- dije haciéndome el ofendido-. Vale eh, lo tendré en cuenta- la avisé- lo tendré en cuenta, yo no olvido estas cosas- comenté haciéndome el mosqueado- que aproveche- dije sobre el porro. Me levanté y miré por la ventana-. Creo que está descampando un poco...- comenté.

-Es que si te atropellan por no mirar es tu culpa, tienes que mirar, todo el mundo lo sabe...- comente seriamente- Si te pasa otra cosa mala que no sea por tu culpa, pues te querre, te mimare y te cuidare, no sufras- comente sonriendo y me levante con el porro en lso labios para mirar como hacia el- Si te caes con un charco, entonces pues si que te mimare... bueno, primero me reire- le aclare

- Ya, claro...pues yo si me sentiría culpable aunque no miraras, y te cuidaría y mimaría...pero todos no somos iguales- me quejé-. ¿Ves? eres mala conmigo- puse una mueca y cogí mi chaqueta de una de las sillas-. Creo que me voy a ir ya...la boda es en junio, así que tienes tiempo para comprarte el vestido...avisame cuando quieras que vayamos y listo - comenté sonriendo un poco-. Bueno ratona, me voy- me acerqué a ella y le di un beso en la cara.

-Deberías dejar de llamarme ratona si quieres que vaya contigo a esa boda- le avise señalandole y puse cara como si fuera una rata- Bueno, pues entonces nos veremos mañana, no te portes mal con tu hermano cuando te regañe porque la casa esta hecha un desastre y huele a porro por todas partes.- me reí

- Es cariñoso- dije poniendo una mueca- además, tienes cara de ratona- la señalé y me aparté riéndome por si me pegaba-. ¿Qué dices?, si yo soy siempre bueno, es él- me quejé. Tampoco es que yo fuera muy bueno, pero Brooke siempre me daba la razón y yo lo aprovechaba, con eso de que era más pequeño que él y que le gustaba cuidarme...no estaba mal aprovecharlo de vez en cuando-. Adiós...RATONA- dije resaltando la palabra y corriendo por las escaleras para irme. Miré a los padres de Hannah cuando pasé por su lado pero como ellos no miraron no dije nada y simplemente salí.