Casa de Brooke y Gonzalo.

- Ya te veo- comenté mirándola cuando habló con los carrillos llenos aún por la pizza. Sonreí un poco y después de que se metiera el segundo trozo en la boca me acerqué para quitarle un poco de tomate con el dedo, sonriendo aún. Al menos hasta que escuché la puerta. Me giré en la silla y fruncí el ceño al ver entrar a Brooke y Gonzalo, ¿qué les habría pasado por el camino?, ¿Sería por lo de antes?- Gracias- respondí a Brooke. Gonzalo no dijo nada, simplemente subió a su habitación.

Gonzalo

Si creía que iba a arrastrarme y pedirle perdón la llevaba clara, yo no había hecho nada, era ella la que se empeñaba en convertirme en lo que no era, no sabía por qué se empeñaba tanto. Cuando llegamos a casa, nada más entrar, subí a mi habitación y empecé a desvestirme para ponerme el pijama y dormir, era lo mejor que podía hacer hoy.

Me pasé el dorso de la mano por la boca y miré a su hermano de reojo que subió directamente las escaleras, Brooke había ido a la cocina.
- Pues sí que están mal ¿no? - le dije a Yon en voz baja - qué mal rollo - comenté cogiendo otro trozo de pizza, ya me había terminado el primero.

- Sí- comenté mirando aún hacia la cocina- lo peor es que están a días de casarse- suspiré un poco. Normalmente solían discutir pero no se ponían de esa manera a no ser que lo consideraran grave, a Brooke solía pasársele en un momento, pero llevaba toda la tarde-. Creo que es culpa mía- comenté cogiendo mi trozo de pizza para darle un trago- Brooke se esfuerza demasiado- y Gonzalo pasaba de mi culo, eran dos extremos...sobreprotección y evasión total...¿no podían tener un término medio?, las dos cosas me resultaban igual de agobiantes.

- Por eso lo digo - dije poniendo una mueca, se casaban en pocos días, era un mal rollo - ¿culpa tuya? seguro que no - Yon nunca hacía nada malo - serán problemas suyos, Yon - comenté mirándole - de todas maneras no te preocupes, si van a casarse es porque se quieren, seguro que lo arreglan enseguida - le dije sonriendo un poco, cogiendo el vaso para dar un trago después.

- Pues yo creo que sí- comenté dándole un mordisco a mi pizza y masticando mientras la miraba. Me gustaba verla comer pizza, ponía cara de placer cada vez que la mordía...siempre me había gustado mirarla mientras comía. Tragué y me terminé el trozo que me quedaba, estirando después la mano para coger otro-. Yo se que se quieren y lo arreglarán, pero sigue siendo una discusión- puse una mueca- bueno, ya veremos cuando lo arreglan...- como se pusieran los dos cabezones eran capaces de ir a la boda sin siquiera hablarse. Estiré la mano hacia el vaso, pero no llegaba, lo había puesto bastante lejos. Moví la silla y estiré un poco más la mano hasta que me cansé-. ¿Me lo puedes dar?- pregunté sin muchas ganas.

- Claro - dije estirándome un poco para alcanzar su vaso y pasárselo - pero solo es una discusión, es lo que hacen las parejas, estás unos días bien, discutes, lo arreglas, vuelves a discutir.. es normal - hasta los amigos discutían - yo sigo sin creer que hayan discutido por ti - dije mirándole - tienes que dejar de echarte las culpas de todo lo que pasa - comenté dejando mi vaso sobre la mesa para coger otro trozo de pizza.

Cogí el vaso cuando me lo dio y le di un trago, dejándolo en la mesa pero esta vez más cerca, porque con la pizza en la mano no podía mover bien la silla.
- Ya, lo se, pero no me gusta que discutan de todas maneras- Gonzalo era muy impulsivo y se le podía ir la pinza en cualquier momento y mandarlo todo a la mierda-. No me echo las culpas de todo lo que pasa...solo de las cosas que se que son mi culpa- comenté mirándola-. ¿Tu discutes con Justin a menudo?- pregunté mirándola curioso.

- A menudo no, de vez en cuando, como todos - dije encogiéndome de hombros, al menos eso era lo que suponía y esperaba, que las parejas discutían - lo mejor son las reconciliaciones - dije riendo un poco. Suspiré mordiendo la pizza, quería cambiar de tema porque no me gustaba hablar de mi relación con Justin, eso eran cosas nuestras, pero últimamente no sabía de qué hablar con Yon, él nunca hacía nada y yo siempre hacía lo mismo..

- Si que lo son...- comenté sobre las reconciliaciones. Aunque la verdad es que no necesitaba saber eso. De todas formas no tenía mucha conversación con Kath, aunque sirviera solo para mantenerla un rato aquí conmigo merecía la pena hablar del tema y...joderme a mi mismo-. Cuando yo estaba con mi ex...- hacía mucho tiempo- discutíamos de vez en cuando y las reconciliaciones eran buenas, pero si se discute muy a menudo al final la relación se mina y...muere- me alcé de hombros dándole un mordisco a mi pizza.

- Ya, supongo que sí - comenté cogiendo mi vaso para dar un sorbo - esta peli ya la he visto - comenté señalando con la mirada la televisión, para cambiar de tema porque de verdad no quería hablar de esas cosas con Yon - ¿te cuento el final? es un rollo, muy previsible - comenté riendo un poco - ya no hacen películas buenas de miedo, son todas iguales - era un tema tonto pero no se me ocurría nada mejor.

Miré la tele cuando me dijo que ya había visto la película terminándome el trozo de pizza y estirando la mano para coger otro.
- Yo también la he visto- comenté mirándola- al final mueren todos menos la morena- la señalé- ni siquiera es de miedo- puse una mueca-. No, no las hacen- ya ni siquiera me contaba sus cosas, no teníamos tema de conversación, cada vez me daba la sensación de que estaba más lejos de ella...y seguro que era por esta mierda de silla, ¿quién quería tener de amigo a un tullido como yo?-. De todas formas es mejor que los programas de corazón que echan a estas hora en la tele- puse una mueca.

- Sí, eso es verdad.. esos programas son un asco, a mi madre le encantan - dije rodando los ojos - siempre está viendo algo de ese estilo o de cocina - añadí riendo un poco. Me estiré para alcanzar una servilleta y limpiarme las manos y la boca, después cogí el refresco y di un sorbo. - Estoy llenísima - dije riendo, dejando el vaso en la mesa para después hundirme en el sofá dejando las manos en mi tripa - me voy a poner gorda.

- Ya, tu madre tiene pinta de que le gusten esas cosas...además, cuando he ido y ella estaba en casa tenía puesto Gandía Shore- puse una mueca. Me terminé el trozo que me quedaba y cogí la lata para darle un trago después-. Ya te veo- comenté cuando se hundió en el sofá, sonriendo un poco, me hacía gracia cómo se ponía-. No creo que te sentara mal la gordura- comenté como si nada mirando la tele.

- Lo de Gandía Shore a veces tiene hasta su punto de gracia.. lo que menos me gustan son las tertulias - dije rodando los ojos - oh sí, seguro que con veinte kilos más encima estaría de lo más sexy - dije riendo - creo que voy a proponerme lo de hacer ejercicio este verano, ahora tengo tiempo de sobra - comenté mirando la tele.

- Dime que no ves eso- le pedí mirándola de golpe, ¿de verdad me estaba diciendo que ella veía ese programa tan...? no tenía ni palabras-. Pues igual sí, ¿has estado gorda alguna vez?- le pregunté mirándola-. Seguro...- rodé los ojos cuando dijo que iba a hacer ejercicio-. Eso si es verdad, e igual es más sano que ver ese programa tan cutre...

- No lo veo siempre, pero mi madre sí, y suelo desayunar a la vez que ella.. además, me parece divertido, me río de esa gente - dije encogiéndome de hombros, ¿también me iba a juzgar por eso? no tenía suficiente con lo de Justin.. suspiré un poco - no, pero puedo imaginármelo.. las lorzas no le gustan a nadie - Meg siempre me repetía lo importante que eran las dietas, estar delgada y todo eso - puedo hacer deporte mientras lo veo - dije riendo.

- Ya, lo único que puedes hacer es sentir pena de esa gente o reírte- eran demasiado extremos para mi gusto, solo había visto el programa una vez y no iba a volver a hacerlo. La miré cuando comentó lo de las lorzas, entonces también pensaría que a nadie le gustaban los tíos en silla de ruedas-. ¿Eso crees?- pregunté- no pensaba que tuvieras un pensamiento tan superficial- me asombraba escucharla decir eso, esa no era ella, era su hermana-. Si, supongo que sí, si tienes los aparatos de gimnasio...es más cómodo.

- Así, a primera vista, ¿te liarías con una tía que pesara veinte kilos más que tu? - pregunté mirándole - venga ya, Yon, todo el mundo es superficial para esas cosas - ya estaba otra vez, es que me desesperaba cuando me juzgaba de esa manera - puedes decir lo que quieras, que sí lo harías, que el amor no entiende de físicos y todo lo que tu quieras pero es mentira, lo primero que ves es lo que hay fuera, luego puedes conocer a la persona y enamorarte, vale, pero al principio no te liarías con alguien así.

- No lo se...¿crees que no me he liado con chicas que estuvieran gorditas?- le pregunté mirándola- puede estar gorda y tener una cara que me guste, además...hay gente a la que le gusta la gente gorda, las delgadas no son las únicas que ligan Kath- dije mirándola. ¿Entonces una gorda nunca se liaba con nadie?, por esa regla de tres...-. Tienes razón en que lo primero que entra es el físico, pero hay gustos para todos...y sí, a lo mejor si la conociera sí que lo haría por cómo fuera esa persona, no solo por su físico, las hay muy guapas con un cuerpo diez y tontas de remate, ¿y sabes qué?, la gordura se quita pero la idiotez no- dije mirándola-. Pero por tu teoría...¿te liarías a primera vista con un tío en silla de ruedas?- pregunté señalándome las piernas- al menos las gordas andan- era una estupidez-. Además, ¿qué mas te da?, tu tienes novio ¿no?- pregunté- si te quiere por como eres no tienes que preocuparte por estar más o menos gorda para ligar más- otra cosa era que lo hiciera por sí misma, para sentirse mejor-. Que sepas que para mí estarías guapa aunque pesaras veinte malditos quilos más que yo- le dije justo antes de mirar la televisión. Si a Justin no le gustaba gorda igual es que no la quería tanto y no se la merecía, aunque de eso yo estaba bastante seguro.

- Pero es que no te estoy hablando de chicas gorditas, te estoy hablando de chicas gordas - ¿por qué estábamos hablando de ese tema? - no, no cambies mis palabras, no estamos hablando de gente en silla de ruedas - me estaba sintiendo atacada, como si intentara dejarme mal - vale.. gracias, supongo - dije un poco cortada con lo último que dijo, ahora además de lo anterior me sentía incómoda - se está haciendo tarde, es mejor que me vaya - no me gustaba acabar discutiendo con él, así que mejor me marchaba ya.

- Es que me da igual Kath- daba igual, los michelines eran los michelines y ella no se iba a poner como una foca, tenía buen cuerpo-. Estamos hablando de gente que no se amolda a la "buena figura"- y yo no lo hacía-. Sí, ya- dije cuando me dio las gracias por haberle dicho que me gustaría igual. La miré cuando dijo que se hacía tarde-. Sí, además, Justin te estará esperando- separé la silla de la mesa y empecé a moverla hasta la entrada para despedirla allí-. Pásalo bien- dije secamente. Yo no podía abrir la puerta, tenía que hacerlo ella.

Suspiré aguantando un poco el aire mientras cogía mis cosas para irme, siempre igual. Caminé hacia la puerta pero no pude resistirme.
- ¿Cuál es tu problema? - pregunté girándome hacia él - siempre haces lo mismo y ya estoy cansada, Justin no te ha hecho nada malo, ni siquiera le conoces y ya le estás juzgando antes de tiempo, tanto que dices que te liarías con alguien por el interior y todo eso, ni siquiera te has parado a intentar conocerle a él - dije seria, estaba molesta con él por eso - eres mi mejor amigo, y él es mi novio, y las pocas veces que sale en las conversaciones siempre pones la misma cara - que me ponía de los nervios - deberías estar contento por mi.

- Sí que me ha hecho- dije mirándola serio- y a ti, te ha hecho daño, ha estado jugando contigo hasta hace dos meses- respondí- puede que a ti se te haya olvidado o te de igual, pero a mí no- no sabía como a ella se le había olvidado, ¿cómo podía estar con él después de lo mal que lo había pasado cuando no le hacía caso?, me parecía increíble-. Así que no quiero conocerle precisamente por eso, porque soy tu mejor amigo- su mejor amigo...yo no quería ser su mejor amigo, llevaba años siéndolo, ya me estaba cansando de hacer el idiota.

Seguía sin tener razón. Justin me había hecho daño, sí, pero tampoco había sido para tanto, Yon no sabía la historia completa, no podía opinar.
- Vale, pero tu verás - dije seria - porque él está en mi vida, y lo que no voy a soportar es esa cara que pones cada vez que sale en las conversaciones - dije abriendo la puerta - así que acéptalo de una vez - ¿ni siquiera podía hacer el esfuerzo de conocerle? a lo mejor no era tan amigo mío como me pensaba..

- Es mi cara, no puedo cambiarla Kath- dije mirándola cuando abrió la puerta-. Oh, tranquila, si lo tengo muy aceptado- afirmé- lo que no quiere decir que me guste para nada y que esté dispuesto a conocerlo o a intentar que me caiga bien, porque se de sobras que no lo va a hacer- la señalé- pero lo tengo bastante aceptado.