Casa de Nathan y Gema Miller

-Genial- comente contenta poniéndome bien el bolso y echando a caminar hacia el coche- No hemos visto a Martha y Jota hoy, aunque claro con el lió de Cassie y el director- comente rodando los ojos. Subí al coche y me pase el cinturón, colocándomelo bien con la tripa porque muchas veces me molestaba.- Voy a tener que volver a ir a comprarme ropa, nunca pensé que me pareciera tan pesado ir a comprar ropa- comente riendo.- Es toda muy fea y no la voy a volver a gastar, bueno... a no ser que me quede embarazada otra vez.- La guardaría por si acaso

- A lo mejor dejaron a la cría antes que nosotros - comenté sacando las llaves del coche según nos acercábamos a el - dile a tu hermana y a Brooke que la compren por ti - eran unas locas de las compras - seguro que no les importa - comenté mientras arrancaba el motor para ir hacia alguna cafetería - tampoco te compres demasiado porque es eso que tu dices, no te la vas a volver a poner a no ser que te quedes embarazada otra vez - y no había hablado de ello todavía - ¿te parece bien ahí? - pregunté señalando una cafetería a un lado de la calle.

-Esa me parece perfecta- comente mirando la cafetería que había dicho mi marido. Entramos y pedimos algo para almorzar, al terminar fuimos a dar una vuelta por el centro, a casa y después a por los niños. Nathan se echo una siesta, comimos y el se fue a trabajar. Los niños empezaron a ir al colegio en autobús y yo descansaba en casa y trabajaba desde mi ordenador. Paso esa semana muy rápido, el fin de semana íbamos a ir al zoo todos y con los niños, así que nos levantamos mas o menos temprano y después de estar un rato intentando convencer a Justin dejamos que se fuera a comer a casa de mi padre, porque no quería venir que "me voy a aburrir como una ostra, eso es una mierda", asi que fuimos Nathan y yo con la niña.

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Dejé las llaves en el mueble de la entrada y fui hacia la cocina para coger una cerveza y una bolsa de patatas fritas, después fui hacia el salón para sentarme en el sofá, George estaba sentado en uno de los sillones. Abrí la cerveza y me recosté un poco mientras bebía, dejé la cerveza en la mesita, estirándome para llegar, y abrí la bolsa de patatas para comer.

Kristen se puso a contarle al abuelo todo lo que se había perdido sobre los delfines, de los demás animales solo dijo que estaban sucios y no le habían gustado. Mi padre le preguntaba cosas y le contaba otras de cuando el había ido a un zoo. Yo me eche una cabezadita mientras hablaban y después me levante para prepararme algo de merendar, le hice un sándwich a Kristen y otro a Justin cuando pasaba hacia el salón tocaron la puerta, me asome por la mirilla y vi dos policías esperando.
-Sube con tu hermano a merendar- le dije a Kristen dándole los dos sándwiches- Quédate arriba contándole cosas o jugando ¿vale?- ella asintió y subió por las escaleras- Papa tienes que irte.- le dije seria y deprisa.- Policías.- el asintió y se levanto cogiendo sus cosas
-Esperare en la cocina a que entren y saldré por la puerta de detrás- dijo dándome un beso. Mire a Nathan y cogí aire, volvieron a tocar.-
-Ya voy- dije caminando hacia la puerta.

Miré a Gema poniendo una mueca cuando dijo que había policías, ¿a qué coño venían aquí? ¿habrían encontrado droga en la Clímax? porque nosotros ya no la pasábamos, ya no estábamos metidos en esas mierdas..
- Deja, que ya abro yo - dije levantándome deprisa del sofá para adelantarla y llegar antes que ella a la puerta - buenas tardes - dije abriendo un poco la puerta.

-Buenas tardes...- dijo el agente cuando Nathan abrió la puerta- ¿Es usted el señor Miller?- pregunto- Estamos buscando a Gema Miller... antes era Gema Scanlo.- ¿Porque venían a por mi?¿Porque ahora?- Es su esposa ¿Verdad? Es urgente que hablemos con ella.- comento el mismo policía.
-Y sabemos que esta aquí porque les hemos visto entrar hace un rato- dijo el otro policial, mire a Nathan desde detrás de la puerta.- No tiene que asustarse .- dijo- De momento- añadió

Afirmé cuando preguntó si era el señor Miller y les escuché con atención mientras hablaban.
- ¿Y se puede saber para qué la buscan? - pregunté apoyándome en el marco de la puerta, cerrando un poco la puerta por si Gema andaba por detrás para que no la vieran - ¿tienen una orden de registro? - pregunté mirándoles, porque si no no tenía por qué dejarles entrar.

-No, no tenemos una orden de registro.- dijo el primer policía que había hablado- Y no queremos tener que ir a pedirla. Veamos, señor Miller. Soy el inspector Smith y nos gustaría hablar con su mujer para ofrecerle un trato.- me apoye en la pared mientras lo escuchaba- Si fuera tan amable de dejarnos pasar para hablar con ella verían que no venimos a seguir la pista de nadie, en los detalles de comisaria consta como que su mujer cumplió la condena respectiva que le tocaba y supongo que usted sabrá que se ha casado con una mujer demasiado lista como para olvidarse de dejar ningún cabo suelto. No podemos hacer nada en contra de la señorita Scanlo y mucho menos de la señora Miller. Pero si que podemos hacer algo a favor y sus vecinos se van a escandalizar si ven dos policías en su puerta- comento

No me hacía ninguna gracia dejarles pasar pero tenían razón en cuanto a lo de los vecinos y no se iban a mover de ahí hasta que hablaran con ella, conocía demasiado bien a esos capullos.
- Adelante - murmuré sin muchas ganas haciéndome a un lado para dejarles pasar, esperé a que entraran y cerré la puerta - por aquí - dije señalándoles el camino al comedor para ir a sentarnos en la mesa, esperaba que George ya hubiera salido por la parte de atrás.

Antes de que Nathan los dejara pasar me fui hacia el salón, me asegure de que no quedara nada de mi padre y me senté en el sofá con mi tazón de te entre las manos.
-Buenas tardes- dije cuando los vi caminar, mirando alrededor con curiosidad.
-Hola Gema.- comento el que había dicho que era inspector.
-Señora Miller, si son tan amables- no quería que me hablaran de tu. Me levante y le estreche la mano.- ¿Qué quieren?- dije señalando una de las sillas que rodeaban la mesa, no pensaba dejar que se sentaran en mi sofá.
-Vaya…- comento el otro policía.- No sabíamos…- señalo mi tripa- Con el abrigo no se había notado nada…- se sentó en la silla que ofrecí, al lado de su compañero y miro a Nathan.- ¿Podría dejarnos a solas con ella?- le pregunto

Miré mal al que señaló a su tripa, pues sí que venían bien informados si no sabían que estaba embarazada. Caminé hacia la mesa con ellos y puse una mueca cuando me echó con educación.
- ¿Es un interrogatorio? - pregunté dejando una mano en la espalda de Gema - no creo que haya ningún inconveniente en quedarme presente - dije serio mirando a los dos maderos, no quería dejarla sola con ellos, no me fiaba una mierda de nadie.

-No, no es ningún interrogatorio- dijo uno de los policías.
-Entonces mi marido se queda conmigo- dije yo seriamente y estire mi mano para coger la de Nathan y que se sentara en la silla que estaba al lado de la mía- ¿Qué es lo que quieren? Y deprisa que me duermo con mucha facilidad- sonreí con falsedad.
-Venimos a ofrecerle algo- empezó a hablar el inspector- Estamos buscando a un hombre, es un mafioso de los que se esconden bien, de los que piensan como usted.- me señalo- Es una maquina con la tecnología, aunque nuestras investigaciones nos dicen que jamás llegara a su altura- me señalo- Por lo que… nos gustaría que colaborara. Queremos que nos ayude a dar con este hombre, todo lo que tendrá que hacer serán investigaciones informáticas, contraseñas, cuentas, movilizaciones bancarias… para usted será pan comido. A cambio borraremos todo su historial delictivo, Gema Scanlo, Gema Clonney y Gema Miller no habran hecho nunca nada.- dijo mirándome.
-Quiero más cosas- dije mirándoles.- Quitaran todos los antecedentes de mi marido- lo señale- no constara que el haya estado jamás en una cárcel, ni siquiera tendrá multas de aparcamiento. Es más, ni siquiera le pondrán multas de aparcamiento.-

Intentaba no poner muecas ni caras mientras los tíos hablaban pero a veces no podía evitarlo. Yo no quería volver a meterme en movidas de esas, no quería que ninguno de los dos se viera envuelto en esas mierdas otra vez, y en teoría Gema quería lo mismo que yo, por eso cuando dijo de aceptar el trato, aunque añadiendo más cosas, la miré confundido.
- Oye Gema, creo que deberíamos hablar esto con más calma - le dije en voz baja, girándome hacia ella - esas cosas ya se acabaron - habíamos decidido que en cuanto acabáramos con Clooney lo más cercano a los rollos de mafias sería nuestras relación con Martha.

Mire a Nathan cuando comento que eso deberíamos hablarlo con más calma y le asenti. El tenía razón, ya no hacíamos esa clase de cosas, aunque claro, que le libraran de todos los cargos que tenía le podía servir para mucho.
-No sé si podemos hacer algo así…- comento el inspector.
-Entonces no hay trato, porque iba a pedirles que quitaran la orden de busca y captura de mi padre… pero si no son capaces de quitar un par de multas…- les mire sonriendo.- De todos modos… no creo que yo sea la mujer adecuada- les comente tocándome la tripa.- Y no me mete en estos problemas.- afirme
-No son problemas, esto son soluciones. Van a tener la vida solucionada con esta ayuda, sus hijos no sabrán jamás nada de su pasado, no tendrán problemas en los colegios o las universidades- explico el policía.- ¿Saben que en las universidades comprueban los antecedentes familiares antes de aceptar a los niños? No sé si los hijos de dos personas como ustedes podrían hacer una vida normal pasados los 18 años.

- No, no son soluciones - le dije a los dos maderos serios - y a mis hijos ni les nombréis - después me volví a girar hacia Gema - podemos solucionar lo de los críos - si teníamos que hacerles documentación falsa se la podíamos hacer - ya sabes cómo funciona lo de protección de testigos y toda esa mierda, si eso va mal, imagínate lo poco que le costaría a quién fuera saber que eres tu la que está dándole información suya a la policía - dije mirándola - no es buena idea, y menos ahora - con el crío en camino.

-Tienes razón- le dije a Nathan- Es una locura… No- dije mirando a los policías- No, no lo hare. No os necesitamos para librarnos de nuestros cargos. Yo me libre de los mios sin apenas trabajo y sabeis de sobra que podriamos huir durante años- les explique a los policías.
-Podemos venir un día con orden, a vuestra casa, a vuestras empresas… no tardaremos nada en conseguirlo.-Dijo el policía enfadado
-Estamos limpios, no encontrareis nada.- les dije- Hace cuatro años que lo hemos dejado. Y os he visto las caras, si os metéis en mi familia estaréis muertos.- les dije y me levante de la silla- Ahora fuera de mi casa-. Señale la puerta

- Exacto, estamos limpios.. así que hacer lo que queráis pero ella no se va a meter en esa mierda otra vez - dije levantándome - os acompaño a la puerta - dije caminando hacia la entrada, putos maderos, siempre tenían que tocar las narices - que tengáis una buena tarde - comenté mirándoles, abriendo la puerta para que salieran.

-No se puede amenazar a la autoridad- dijo el policía joven mientras les acompañábamos a la puerta.
-Haced el favor de enseñarle a vuestros cachorritos con quien pueden y con quien no pueden meterse- le dije al inspector mosqueada- Porque será peor que aprenda por si solo que autoridad no siempre es policía.- me acerque más a la puerta y la empuje para cerrarla de un golpe en las narices de los dos policías. Mire a Nathan y cogí aire, lo solté despacio porque al final me había puesto nerviosa.-Estoy bien- dije soltando el aire de nuevo despacio.-

Suspiré mirando a Gema después de cerrar la puerta y me acerqué para abrazarla.
- Tranquila, estamos bien - dije pasando una mano por su cabeza, dejé un beso en ella y cogí su mano para llevarla al sofá - esos cabrones siempre tienen que aparecer cuando todo está bien tranquilo para joder - me quejé sentándome en el sofá - no tienen nada contra nosotros - dije mirándola - ya no nos metemos en esas cosas..

-No, si, bueno… quiero decir que no, no van a encontrar nada contra nosotros. No hemos hecho nada malo desde hace cuatro años.- me senté en el sofá y le mire- ¿Pero y antes? No han pasado los suficientes años como para que no reabran un caso… - comente con una mueca.- No se… ahora estoy un poco intranquila- aunque dijera que estaba bien. Puse una de mis manos en su mejilla, pasándola hacia abajo, me tranquilizaba notar su barba de dos días raspándose contra mi mano.- No, tienes razón, todo va a estar bien- comente poniendo la otra mano bajo mi tripa para abrazar el bebe.

- Bueno, no vamos a pensar en eso ahora, tranquilízate - dije mirándola, me giré hacia ella y dejé una mano en su tripa, los nervios no eran buenos para las embarazadas - vamos a tomárnoslo con tranquilidad, tendrán más gente en la lista a la que ir a putear.. mañana llamamos a Gonzalo - a ver qué cojones hacía que no nos avisaba de estas mierdas - que nos diga si hay alguna investigación sobre nosotros o algo así..

-Sí, eso es, llamaremos a Gonzalo, el tiene que saber qué coño pasa. Se supone que manda, ¿no? Debería saber que iban a venir aquí.- le dije a Nathan mirándole- Vale, ya esta- solté una risilla nerviosa- que tonta.- me queje de mi misma porque me había puesto nerviosa.- Vamos a pensar en cualquier otra cosa- comente todavía pasando mi mano por su mejilla. Me incline para besarle.

- Ya, está jodido de la cabeza, parece idiota, tenía que habernos avisado - dije sobre Gonzalo, me mosqueaba porque para una cosa que tenía que hacer por nosotros no la hacía. Suspiré y respondí a su beso, llevando la mano que tenía en su tripa hacia su cintura, inclinándome hacia ella, hasta que noté algo dándome en la espalda.
- ¿Quién era? - preguntó Kristen que seguía dándome en la espalda, hasta que no me giré hacia ella separándome de Gema no paró - ¿y el abuelo? no se ha despedido - dijo pasando por encima de mi para sentarse entre Gema y yo - Justin dice que los delfines son un rollo y que son tontos porque solo saltan y juegan con una pelota, pero son listos ¿verdad?

-Hola cariño- le dije a la niña sonriendo, la mire ponerse entre nosotros dos y sonreí a Nathan, siempre se colocaba en medio de los dos, así le teníamos que prestar atención si o si.- Era el tío Hugh, por eso el abuelo se ha tenido que ir corriendo. Pero vendrá mañana. ¿Le perdonaras que no se haya despedido?- le pregunte a la niña, ella asintió con la cabeza.- Justin no tiene ni idea, los delfines son muy listos y muy bonitos.- me sonrió y miro a su padre.
-¿A ti te han gustado, papa?- le pregunto- Estaban limpios- dijo como motivo para que le gustaran a todo el mundo.