Casa de Gonzalo Montoya.

- Solo el café, no tengo hambre - murmuré con rintintín en voz baja para que no me escuchara, le sonreí cuando entró en la cocina, después de que me diera un beso en la cara - sí, sí, negro - rodé los ojos, siempre se lo hacía igual que era como le gustaba, suspiré y me acerqué a él - toma, kiwi que es muy sano - dije metiéndole un cuadradito de kiwi en la boca, se lo había pelado y cortado en taquitos - siéntate ahí y vete comiéndotelo - le dije sonriendo dándole el plato, le robé un trozo y me lo metí en la boca mientras iba a controlar el agua - no me cuesta nada hacerle la comida - comenté revolviendo el agua, fui hacia la cafetera cuando acabó de hacer el café y cogí una taza para echarle - cuidado que quema - le dije sonriendo dejándola en la mesa.

Suspiré cuando me dio el kiwi y me metió un trozo en la boca. Es que de verdad no me apetecía desayunar, lo que me apetecía era beberme una cerveza. Me senté en la mesa con el plato en el que me había puesto el kiwi y la miré. Los perros estaban en la cocina, así que cuando se descuidó le di un trozo a cada uno, cuando se dio la vuelta me comí un trozo y cogí el café.
- Gracias- suspiré y cogí una cuchara y el azúcar. Le eché menos de media cucharada de azúcar y le di un sorbo porque quemaba-. Vale, pero algún día tendrá que independizarse, deberías enseñarlo, ¿o le vas a dar tuppers cuando viva solo?.

- No sé, lo que él prefiera - comenté sonriendo mientras le iba haciendo la comida a Yon - ¿te molesta? - pregunté mirando a Gonzalo de reojo - pobrecito, déjale que aproveche mientras viva aquí, ya aprenderá a cocinar después - aunque yo seguiría haciéndole tuppers, me daba miedo que pasara hambre - oh oh, un rayo de sool uoh oh oh - canturreaba por lo bajo, moviéndome un poco mientras partía las verduras.

- No, me da igual, solo me preocupo por mi hermano- comenté mientras le daba otro trozo de kiwi al perro y me comía yo uno para disimular. La miré con una ceja levantada cuando empezó a cantar esa canción- estamos a punto de entrar en invierno- comenté. Aunque me arrepentí porque fijo que ahora empezaba con alguna de navidad o algo así y a mi me ponía nervioso como se pegara todo el camino a casa de Gema y Nathan así. Le di un trago al café- ¿hemos cambiado de marca?- pregunté.

- Tienes razón, esta canción es demasiado veraniega - comenté pensativa - aunque hoy todavía parece que es verano eh - dije sonriendo - pero tengo ganas de que llegue el invierno, ojalá nieve mucho - dije contenta - ahora tengo ganas de que sea invierno - me quejé poniendo un puchero, apagué el fuego y aparté la cacerola a un lado, le había hecho unas verduritas y tenía pescado del día anterior - cuando llegue la navidad tendremos que ir a comprar un árbol enorme, más grande que el del año pasado - dije contenta sirviéndome una taza de café y yendo a sentarme frente a él - pondrán todas las calles con luces, villancicos en el centro comercial.. ¿no tienes ganas de que sea navidad? - le pregunté sonriendo - ooh blanca navidaad - canturreé riendo robándole un trozo de kiwi.

- Odio la navidad- le respondí cuando me preguntó-. Solo es una fiesta que se han inventado los centros comerciales para que la gente se gaste dinero- hice una mueca y cogí otro trozo de kiwi-. Además lo único que se hace es ir de una comida en otra, gastando dinero por todos lados y por supuesto cogiendo 5 kilos- me quejé- que después cuestan perder- y a mi me había costado bastante volver a la costumbre de correr y demás-. Prefiero el verano- me alcé de hombros-. El del año pasado era grande- dije sobre el arbol-. ¿Lo quieres aún más?, va a ser caro- suspiré- pero vale- pasaba de discutir hoy, estábamos muy bien y a mi me daba igual el arbol.

Rodé los ojos nada más que dijo que odiaba la navidad, Gonzalo y su alegría por la vida.. suspiré, nunca le gustaban las cosas bonitas y alegres, era un rancio.
- Pues a mi sí me gusta, adoro la navidad - dije sonriendo - eres un racano eh - nunca quería gastar dinero - ¿para qué está el dinero? es para gastarlo, un día te morirás y te darás cuenta de que no has gastado todo lo que podías - comenté mirándole, di un sorbito y puse una mueca de asco, se me había olvidad echarle azúcar - luego te quejas de que en verano hace demasiado calor - nunca se contentaba con nada, iba a insistirle con lo del árbol pero dijo que sí a la primera así que sonreí mientras me echaba azúcar.

- No soy un rácano, es que me gusta tener dinero en la cuenta- y cuando ella se ponía a comprar compraba, pero mucho, por no decir demasiado-. Tu eres demasiado ligera de cascos en cuanto a dinero se refiere- solo sabía gastar. Hice una mueca y le di un trago al café-. Porque hace calor- dije mirándola- si no hiciera calor no me quejaría, no es mi culpa- me alcé de hombros-. Y el dinero está para tenerlo guardado, más vale pájaro en mano que ciento volando- le dije pasándole el plato del kiwi para que se comiera el último trozo, como me lo metiera en la boca yo potaba ahí mismo.

- Sí, sí, que eres un rácano, no está mal gastar algo de dinero de vez en cuando, ni que nos fuéramos a arruinar por un par de compras navideñas - dije negando con la cabeza cuando vi que acercaba el plato hacia mi - acábatelo tu - comenté levantándome de la silla, me bebí lo que quedaba de café y fui a meter la taza en el lavavajillas - voy a sacarlos a pasear - comenté cogiendo las correas de los perros de detrás de la puerta, en cuanto me vieron vinieron corriendo para que les atará - ¡ay mis niños guapos! - exclamé mientras me entretenía acariciándolos.

- Ya, bueno, déjame lo de las cuentas a mi- le dije a Brooke cuando comentó lo de que no nos íbamos a arruinar. Estaba claro que no, cobraba un pastón, pero había estado ahorrando y no quería gastar demasiado dinero. Miré a los perros cuando vinieron corriendo- se llegan a chocar y me parto- algunas veces no les daba tiempo a frenar y alguno se la pegaba, hacían como carreras para ver quien llegaba primero. Rodé los ojos y le di un trago al café, alargando el momento del kiwi para ver si se iba y lo tiraba a la basura. Iba a acabar potando fijo, porque el café y la fruta eran mala mezcla, solo de pensarlo se me revolvía el estómago

Rodé los ojos, no se fiaba de mi para esas cosas. Después le miré mal cuando dijo lo de los perros, pobrecitos, abracé a Sinatra que era casi el doble que Elvis y terminé de ponerles las correas.
- Bueno, ahora luego volvemos - comenté tirando de ellos para salir fuera - como tires el kiwi a la basura o por el váter me enteraré - canturreé cogiendo las llaves para salir fuera.

- ¿Yo? ¿tirar el kiwi? de donde sacas eso, nunca se me ocurriría- rodé los ojos. En cuanto se fue fui al cuarto de baño y tiré el trozo que quedaba, no se me había ocurrido lo del váter pero tenía razón, si lo tiraba a la basura se iba a enterar, pero en el baño no. Volví a la cocina, abrí la nevera y le di un trago a la cerveza, después la dejé donde estaba y me fui a sentar al salón, puse la tele mientras esperaba a que Brooke volviera con los perros.

Fui caminando tranquilamente hasta el parque y una vez allí fue donde se dejaba a los perros y les solté para que jugaran con los demás, acercándome a hablar con un vecino que conocía de haber coincidido otras veces con los perros. Después de un rato llamé a Elvis y Sinatra, les puse las correas y volví a casa junto a Ted.
- Bueno Ted, nos vemos otro día - me despedí de él sonriendo, Ted vivía a unas casas de la nuestra - hace un día precioso - comenté al entrar en casa - podríamos ir a la playa o algo así, brilla el sol como nunca - comenté mientras soltaba a los perros - o podríamos ir de excursión al campo con los perros - comenté caminando hacia el sofá - no me apetece estar encerrada en una casa - dije sentándome al lado de Gon, girada hacia el para mirarle atenta - ¿qué dices tu?

- No hace tan buen día, hace fresco- lo que pasaba es que hacía sol y cuando te ponías al sol al rato estabas calentito-. Pues no se, si quieres si, a mi me da igual- hoy era mi día libre, que había tenido que currar los ultimos dos fines de semana-. Haz algo para que nos llevemos de comer y nos vamos al campo si quieres- comenté mientras miraba de nuevo a la tele-. Tendremos que buscar una manta o algo- comenté mirándola a ella ahora.

- ¡Bien! - exclamé contenta - vale, voy a hacer algo.. a ver qué queda en la nevera - comenté sonriendo mientras me levantaba - vete a buscar una manta y a preguntarle a Yon si quiere venir, a lo mejor le apetece venir - dije desde la cocina, mirando lo que había en la nevera.

- Voy- comenté subiendo a la habitación de Yon para preguntarle. Abrí la puerta, estaba terminando de ducharse, tenía un montón de libros sobre la cama y otro montón sobre la mesa.
- No son todos míos- comentó cuando me vio mirándolos- he tenido que coger algunos de la biblioteca- me explicó.
- Vamos a ir al campo, ¿vas a venir?- el negó con la cabeza.
- Tengo que repasar unas cosas para el lunes y después supongo que iré un rato con los amigos- comentó mientras se secaba el pelo con la toalla- id vosotros, pasad un día solos sin mi- sonrió de lado- trátala bien- me señaló.
- Que si, que si- dije para que se callara.
- Es una buena mujer Gonzalo, y te quiere, deberías tratarla mejor- comentó cogiendo una camisa y poniéndosela.
- ¿Crees que no lo se?, vete a tomar por culo- le dije dándome la vuelta y yendo a nuestra habitación, cogí una manta y bajé las escaleras con ella doblada- Yon no viene, tiene cosas que hacer- le expliqué- tampoco te mates a hacer comida- le dije-. He encontrado esta- se la enseñé- ¿vale?- ella controlaba esas cosas.

-------

https://frost.foroactivo.com.es/viewtopic.forum?t=411