Piso de Ben, Emily y Cassie

-Esto ya controla nuestras vidas- le dije señalándonos- ¿Quieres que deje mis estudios? Vale, lo dejo- comente serio- No puedes seguir así, te acabara pasando algo malo.- le dije acercándome un poco mas- Te lo suplico, hazlo por ti, por favor- comente mirándola a los ojos.- Te quiero y si seguimos así no avanzaremos nunca, nos quedaremos estancados- no tendríamos futuro, estaríamos siempre yo en el hospital de Frost y ella trabajando de noche en un bar, no era un buen futuro.

- Que no joder, yo.. solo era un ejemplo - dije empezando a desesperarme cuando dijo que dejaba de estudiar - que no me va a pasar nada malo - dije mirándole - ya te he dicho que no quiero - dije alzando un poco la voz sin querer - ¿vale? no quiero y no voy a hacerlo - dije alejándome un poco de él, dando unos pasos hacia atrás - ¿qué más da? a mi me gusta nuestra vida como está ahora - me gustaba más cuando Cassie no estaba revoloteando todo el día a nuestro alrededor pero me había aguantado y lo había hecho por Ben, ¿por qué él no podía dejarme hacer lo único que me gustaba?

-Pues yo quiero que con el futuro cambien algunas cosas, quiero hacer cosas de pareja normales- le dije mirándola.- no quiero que estemos aquí para siempre… - y mucho menos como estábamos ahora.- ¿Por qué lo necesitas? ¿Por qué quieres seguir con ello? Tiene que haber una razón… ¿Qué te falta?- pregunte

- No se trata de que me falte nada, no lo hago porque lo necesite, lo hago porque quiero - dije mirándole - me gusta ¿vale? me siento bien, y voy a seguir haciéndolo Ben, así que hazte a la idea - le dije seria - ¿y a dónde quieres ir? ya hacemos cosas de pareja normales ¿no? esto no afecta para nada.

-Entones si no lo necesitas no te importara estar un fin de semana sin ir a trabajar y sin colocarte ¿no? Podríamos ir a hacer algo de pareja, a un balneario o algo así, tu y yo, los dos solos.- le dije mirándola, ella creía que no la dominaba pero si lo hacía, se había apoderado de ella.- Yo…- suspire quedándome unos segundos callado- Yo quiero tener hijos algún dia…- si seguía así no podríamos.

- ¿Y por qué no podemos irnos de fin de semana sin más? - pregunté seria - ni siquiera lo vas a ver, no lo has visto en todos estos años ¿qué más te da? ¿quieres que vayamos de viaje? vale, vamos, pero que me coloque no interfiere en ello - dije mirándole - ah no, no, no - dije riendo un poco, mirándole y negando con la cabeza - no vamos a mezclar conversaciones - sin darme cuenta volvía a rascarme el brazo - además, no vamos a hablar de algo que si sucede algún día será en años - dije empezando a caminar por el salón nerviosa, yendo de un lado a otro.

-¿Ves? Estas enganchada, sientes la necesidad de colocarte, te has puesto nerviosa solo por el hecho de que haya dicho que no vas a poder meterte nada en todo el fin de semana- le dije señalándola- Y te estás rascando de nuevo.- señale su brazo y me deje caer en el sofá, metiendo la cabeza entre las manos para presionarme un poco la sien.

Resoplé cuando dijo que me ponía nerviosa por estar enganchada, él ni siquiera se había parado un momento a pensar en cómo me sentía de verdad.
- ¿Qué quieres, que reconozca que estoy enganchada? pues sí, lo estoy - dije parándome frente a él pero manteniendo una distancia - pero es que me da igual, no quiero dejarlo y no lo voy a hacer, y si no te gusta cómo estoy ahora déjame tranquila.. mañana cuando vuelva estaré igual de bien que siempre - dije lo último de camino a la habitación, no podía ni quería quedarme un minuto más allí discutiendo con él.

-No lo entiendo- comente bastante cabreado, no entendía como podía admitir que estaba enganchada y no querer dejarlo.- Deberías pararte a pensar en todas las cosas negativas, solo un minuto, pero a ti te da igual todo, sobre todo yo.- comente mosqueado- Vete a trabajar si te da la gana- dije encendiendo la tele para ponerme a verla, aunque estaba bastante cabreado ahora.

Me vestí lo más deprisa que puse para salir de allí lo antes posible.
- Yo sí que no entiendo cómo puedes estar disfrutando con esto, porque sino, no sé cómo sigues con el tema - le dije cabreada saliendo de la habitación - ¿cómo puedes decir que me das igual después de todo lo que he tragado por ti? - intentaba no alzar la voz porque Cassie estaba en su cuarto pero no podía evitarlo - ni siquiera intentas ponerte tu en mi lugar - dije mientras me ponía el abrigo - paso de esta mierda - dije yendo hacia la puerta.

-¿Qué quieres que trague por ti?- le dije levantándome del sofá y gritando ahora yo también un poco.- ¿Has pedido algo? Nunca pides nada, no hay nada que yo pueda hacer por ti y solo quieres esto… ¿De verdad no quieres nada mas? ¿No esperas nada mas?- ¿No tenia sueños ni aspiraciones? No entendía como podía quedarse así para siempre y estar contenta, estaba estancada.- ¿De verdad te parece que disfruto?- dije mirándola seriamente. Si en realidad solo estaba pasándolo mal, no quería que le pasara nada.

- Lo único que te pido es que me dejes la poca libertad que me queda para hacer con mi vida lo que quiera, y ahora también me quieres quitar eso - dije girándome hacia él - ¿qué quieres que espere, de verdad te piensas que yo puedo esperar algo? - pregunté mirándole, suspiré pasándome una mano por la frente - no quiero discutir más sobre esto Ben.

-No te quiero quitar la libertad, esto no es libertad…- comente medio derrotado, estar enganchado a algo y depender de ello era estar muy lejos de ser libre, era todo lo contrario.- ¿Qué dices?- pregunte sorprendido cuando comento aquello.- Eh, tú puedes hacer lo que te propongas, puedes esperar muchísimas cosas si de verdad las quieres.- dije mirándola- Tu eres… eres increíble Emily, yo nunca había conocido nadie como tu.- solo quería que dejara de colocarse.

Le miré un poco triste, él no tenía ni idea de nada, no entendía lo que pasaba.
- Voy a irme a trabajar - dije caminando hasta la puerta, puse la mano en el pomo y me giré a mirarle - espero que sigas pensando eso de que soy increíble mañana por la mañana - le sonreí un poco, agaché la cabeza girándome y salí de casa antes de que pudiera decir nada.

Se fue antes de que pudiera decirle que yo siempre habia pensando que ella era increíble y que eso no iba a cambiar. Me quede sentado en el sofá con una mueca, me pase las manos por la cara bufando, al momento apareció Cassie mirándome.
-¿Qué pasa?- dijo mirándome.
-Nada, da igual.- le comente levantándome- ¿quieres pollo?- dije enseñándoselo, ella negó con la cabeza y después se subió a seguir haciendo deberes.

Pase la noche viendo la tele y después me fui a dormir, al día siguiente me fui a trabajar temprano y evite volver pronto así que cuando llegue Emily se había ido a trabajar y no nos vimos. Pero este día tenia vacaciones por lo que no tenia nada que hacer. Ella estaba durmiendo cuando yo me levante, me hice algo de desayunar y me senté a leer la sección de deportes del periódico en el salón. Después estudiaría un rato... o jugaría a la play.

Volví por la mañana temprano, pero asegurándome que Ben ya no estaría en casa, y al día siguiente me marché temprano a trabajar para no encontrarme con él. La mañana siguiente cuando volví él seguía en la cama pero estaba tan cansada, y colocada, que me dio igual y me metí directamente en la cama. Me desperté cerca de la hora de comer y cuando salí de la habitación vi a Ben en el salón.
- Hola.. - murmuré mirándole extrañada, a esas horas no solía estar y estaba casi segura de que no era fin de semana, caminé a la cocina y cogí un vaso para beber agua.

Estaba jugando a la consola cuando ella entro en el salón, la mire caminar por delante de mí y puse el pause cuando me dijo hola, girándome a mirarla.
-Buenos días- le dije- ¿Qué tal?- no sabía que mas decirle, todavía estaba un poco incomodo por lo de la otra noche.

Me bebí dos vasos de agua del tirón y dejé el vaso en el fregadero, después volví al salón.
- Bien, ¿y tu? - pregunté mirándole, no sabía si seguía enfadado conmigo o no - ¿hoy no tienes que ir a trabajar? - pregunté mirando de reojo la pantalla, estaba jugando a la consola.

-No, hoy es mi día libre de la semana- le dije señalando el calendario donde estaban mis días libres marcados en rojo. Lo tenia colgado en la puerta porque así podíamos hacer planes... aunque no habíamos hecho ningún plan desde hacia unas semanas.- No trabajo hasta mañana a las 5 de la tarde.- explique

Me giré a mirar el calendario y vi que el día estaba marcado en rojo.
- Sí.. es verdad - murmuré afirmando un poco con la cabeza, suspiré y le miré - voy a darme una ducha y si quieres luego podemos.. bueno.. no sé, podemos hacer algo ¿no? - no parecía muy enfadado - ahora vengo - dije antes de ir hacia la habitación, cogí ropa limpia y fui al baño a darme una ducha, después me sequé el pelo un poco con la toalla para no mojarlo todo y me metí un par de rallas. Recogí un poco el baño y volví al salón, sentándome al otro lado del sofá donde estaba Ben.

-Podríamos ir a comer a la pizzería del paseo de la playa, la que está al lado de la heladería- le dije cuando volvió del baño, volviendo a dejar el mando sobre la mesita de café que estaba delante del sofá. La mire y estire mi mano para limpiarle un poco la nariz, tenia restos de… no quería saber ni que mierdas seria. Solté un suspiro resignado y me levante.- Voy a vestirme- iba solo en pantalón del pijama.

Le miré cuando se levantó para ir a vestirse y me quedé en el sofá, suspiré apoyando la frente en el respaldo y cerrando los ojos, yo no quería que estuviéramos así pero tampoco entendía por qué tenía que dejarlo, ¿por qué no podíamos seguir como hasta ahora? antes estábamos bien. Me eché el pelo hacia atrás con las manos y me levanté del sofá para ir a la habitación y coger un jersey para ponerme por encima de lo que llevaba y así no pasar frío en la calle, después me senté en la cama para ponerme las zapatillas, le miraba de reojo a ratos.

Notaba que ella me iba mirando a ratos y yo también la miraba medio de reojo cuando creía que no me veía. Suspire disimuladamente y me abroche el cintaron que me había puesto.
-Ya estoy- le dije mirándola- vamos a por pizza- comente cogiendo la cartera para metermela en el bolsillo del culo.

Afirmé con la cabeza y me levanté colocándome bajándome el jersey para colocarlo. Salí detrás de él en silencio y llamamos al ascensor para bajar. Me apoyé en una de las paredes del ascensor y me coloqué un mechón de pelo tras la oreja mirando al suelo.