Casa de Nathan y Gema Miller

-Pues lleva por lo menos, por lo menos…- dije pensativa- Un año y medio, casi dos- era mucho tiempo.- Menos mal que tú no te vas a ninguna parte.- me moriría si tuviera que estar tanto tiempo sin él y lo peor era que en esas cosas siempre estabas a la espera de que pudiera pasarle algo.- Fijo que está harto de “eso”- dije riendo y mire por la ventanilla.- Cuando vuelva igual encargan uno de estos de tanto que lo van a hacer- señale a Kristen con la cabeza.

- Pues que no te extrañe - comenté mirándola de reojo - estarán tan ocupados haciéndolo que no pensarán en nada más - dije volviendo la vista a la carretera - no sé cuánto tiempo se iba pero después de tanto seguro que viene unos días, pregúntale a Martha - ella era la que mantenía el contacto con él.

-Le preguntare, no sufras.- le dije riendo-Cotilleare todo lo que pueda y luego te cuento- me incline en el asiento para darle un beso cuando llegamos- nos vemos cuando vengas a recogernos- le dije bajando del coche así el se iba directamente a la Clímax. Baje a Kristen de la sillita y la cogí en brazos caminando hacia la puerta para tocar al timbre.

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- Sí, me parece buena.. aunque suprimiría lo del churro - comenté riendo un poco. Al llegar a casa aparqué frente al garaje pero sin meterlo dentro, era un buen barrio y no pensaba que fuera a pasarle nada al coche por dejarlo ahí. Fue entrar en casa y que la niña viniera corriendo por el pasillo para que la cogiera en brazos.
- ¿Has estado llorando? - le pregunté separándome un poco para mirarla, seguro que le habría estado dando la tarde a George - tampoco hemos tardado tanto - comenté abrazándola con un brazo y dejando las llaves en el mueble con el otro - vamos a ponerte el pijama y de mientras me cuentas qué habéis estado haciendo el abuelo y tu esta tarde - comenté acariciándole la cabeza con una mano, saludé a George moviendo la cabeza cuando se asomó por la puerta del salón y subí las escaleras para ir al cuarto de la niña a cambiarla.

Sonreí mientras entraba en la casa, Kristen vino corriendo y Nathan se la subió para ponerle el pijama y que se tranquilizara. Le di un beso a mi padre cuando entre en el salón, Justin estaba allí sentado frente a la tele jugando a la consola.
-Hola mama- dijo sin mirarme, mi padre lo señalo.
-Lleva toda la tarde ahí- se sentó en el sofá y me senté a su lado- Bueno, ¿me lo enseñas ya?- pregunto sonriendo, abrí el bolso y saque la eco pasándosela.
-Es eso de ahí- lo señale. Justin se levanto de la silla y se acerco.
-No se va nada- dijo con una mueca.
-Es muy pequeño todavía, pero todo esta bien y perfecto.- dije contenta, me levante y camine hacia fuera.- Voy a hacer la cena. ¿Te quedas papa?- pregunte en alto mientras abría la nevera

La ayudé a cambiarse mientras ella me decía que Justin había estado toda la tarde jugando a la consola y no la había dejado ver la tele, que el abuelo no sabía jugar a las muñecas y que había llorado porque se le había metido el pelo en el vaso de zumo y el abuelo no se lo había limpiado rápido y además se hacía de noche y no habíamos vuelto. Cuando terminé de cambiarla bajé al salón con ella en brazos.
- Quita eso ya - le dije a Justin señalando la televisión - te vas a tu cuarto a jugar si quieres pero ahora vamos a ver la tele - dije yendo al sofá para dejar a la niña.
- No papá - dijo abrazándose a mi cuello para que no le dejara ahí y siguiera con ella en brazos, así que fui con ella así a la cocina - hola mamá - dijo cuando entramos y la acerqué a Gema para que le diera un beso.
- Está cabreada porque se le manchó el pelo de zumo - le dije a Gema rodando los ojos sin que la niña me viera.

-¿El pelo de zumo?- pregunte como si fuera algo súper alarmante- ¿Te ha limpiado el abuelo?- estire mis manos para mirar su pelo- Bueno, no ha pasado nada, está perfecto- le dije sonriendo- Y muy limpio- tenia manías con la limpieza. Le di un beso en la cabeza y sonreí mirándola acariciándole la mejilla. -¿Te quedas aquí a ayudarnos con la cena?- le dije abriendo la nevera- Papa que ponga los vasos y tu las servilletas- se lo pase y seguí con lo que había puesto en el fuego, cenaríamos alitas.- ¿has pensado como quieres que sea la mochila del cole para este año?- le pregunte mirándola, así cambiábamos de tema y se le pasaba el disgusto.

- Toma - le dije a la niña pasándole las servilletas, fui a dejarla en el suelo pero se volvió a quejar así que me la quedé en brazos y pusimos así la mesa mientras la niña le explicaba a Gema cómo quería que fuera su mochila.
Pasaron unos días y llegó el cumpleaños de la cría de Chad, por la tarde era la fiesta de cumpleaños y aunque yo no tenía ninguna gana de ir me había ido haciendo a la idea, al menos habría cerveza.
- Vamos a llegar tarde - dije desde el salón, cuanto antes fuéramos antes podríamos volvernos.

GEMA
-Ya voy, ya voy- dije un poco agobiada- Un momento- dije después- O no se...- me queje sentándome en la cama, tenia tres vestidos, cuatro faldas, siete camisas y nada me quedaba bien. Si me ponía algo de aquello me iba a apretar en la tripa, no podía cerrar la mitad de las cremalleras. Vi pasar a Justin por la puerta.- Justin- le llame mientras me ponía de pie.- Bájame la cremallera- no llegaba a quitármela. Encima la vecina hoy me había dicho que estaba gorda, que se notaba que había dejado de cuidarme y que probablemente en unos años mi marido me dejaría por otra. Tenia ganas de llorar pero no quería que el niño lo viera así que le dije que se podía ir y me senté en la cama a mirar la ropa. Me tendría que poner un vestido de verano, de esos que no iban nada apretados.

JUSTIN
Baje al salón después de preguntarle a mi madre si le pasaba algo, parecía que se iba a poner a llorar de un momento a otro, pero me echo de la habitación así que me fui hacia abajo.
-Papa, creo que esta llorando, pero no se porque- le dije señalando hacia las escaleras

Miré a Justin cuando dijo que pensaba que Gema estaba llorando y me levanté del sofá.
- Quédate con tu hermana - dije señalando a la cría que me miraba con el chupete en la boca, si no se quedaba con él vendría detrás conmigo - y no la hagas de rabiar - comenté saliendo del salón, subí al cuarto - ¿qué pasa? - pregunté al entrar acercándome a ella para ver si estaba llorando.

-Debería estar contenta- le dije cuando vi que había entrado en la habitación- Ahora seguro que me dejas ir de compras sin pensar en el dinero, porque no me abrocha nada de lo que tengo en el armario- señale toda la ropa que había sacado y que estaba encima de la cama. Me pase las manos bajo los ojos porque seguía medio llorando- Pero no se...- solloce- No quiero llorar, pero no puedo parar... Y la vecina hoy me ha llamado gorda. Pero no gorda de embarazada, eso es algo bueno, ella... ni siquiera me ha dejado contárselo, lo ha convertido en algo malo.- nadie convertía en algo malo a mi bebe.- Y quería venir a buscar una de esas pistolas que tenemos por si acaso y pegarle un tiro y yo ya no soy así.- le dije mirándole- Y por supuesto que ella no es nadie para insinuar que mi marido es como el suyo, que me va a dejar por una de veinte años con dos críos y un bombo- me señale la tripa. Me levante y cogí el vestido ancho que había pensando en ponerme, lo abroche de un lado y le mire.- ¿Que tal estoy?- pregunte mirando en el espejo como me quedaba el vestido.

Suspiré mientras la miraba hablar, ya estaba explotando, dentro de poco yo diría algo que no le gustaría y querría pegarme el tiro a mi. Me acerqué a ella por detrás y la miré en el reflejo del espejo.
- Estás guapísima - dije mirándola - ni siquiera estás gorda todavía, casi ni se te nota - dije dejando mis manos en su cintura, dejando mi pecho contra su espalda, le di un beso en el hombro mirándola de reojo - ponte contenta, podrás gastarte el dinero que quieras en ropa.. pero recuerda que a final de mes también se come.

-Me gusta estar gorda.- le dije mirándome el espejo- Pero ella… lo dijo con desprecio, como si fuera algo malo y no es nada malo- apoye mi cabeza contra su cuerpo dejando que me abrazara.- Mi hermana me va a restar algo de ropa, no creo que tenga que comprar tanta. Prefiero gastarme el dinero en ropa de la que me gusta.- dije sonriendo con picardia.- no se ni porque he llorado…- comente quejándome.- Si ha sido hace un monton de rato, hasta me he despedido de la vecina con una sonrisa- le explique y suspire- Creo que son las hormonas- me rei- Lo siento.- suspire y me incline para ponerme perfume- Venga, vámonos.-

- Tu cómprate lo que quieras, lo metemos dentro de tus antojos - dije sonriendo un poco, le robé un beso y salí para bajar al salón - venga, nos vamos - dije mirando a los críos.
- Vamos a llegar tarde - dijo Kristen quitándose el chupete para hablar, se bajó del sillón en el que estaba y vino hacia mi para que la cogiera en brazos - ¿crees que le gustara el regalo? yo creo que sí, es bonito, si no le gusta me lo quedo yo - dijo mientras iba hacia la puerta - ¿cuándo empieza el cole? quiero estrenar la mochila nueva ¿la has visto papá? es rosa y brilla, y después de comprarla mamá y yo fuimos a merendar y al parque..

-Ya no queda mucho para que empiece el cole- comente mientras cogía el bolso y las llaves, salimos por la puerta los cuatro. Rabiamos obligado a Justin a ir, luego podría irse con sus amigos, pero mínimo tenia que merendar con la familia.- Y jugamos con el tobogán- dije riendo y haciéndole cosquillas a la cría.- Seguro que le gusta el regalo- sonrei y mientras Justin se montaba a un lado yo cogí a Kristen para montarla en la sillita y que Nathan fuera arrancando. Después me subí en el coche y baje un poco la ventanilla, tenia calor. Saque el pintalabios del bolso y me puse una poco mirandome en el espejo retrovisor, despues lo guarde y mire a Nathan sonriendo mientras conducía.

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Bostece pasándome las manos por la cara cuando note como Nathan apagaba el despertador. Cerré los ojos y me di la vuelta, acercándome a su cuerpo para seguir durmiendo un rato mas, pero me desvele cuando empecé a escuchar ruido, era el baño, debía de ser Justin.
-Oh no… es el primer día de cole- murmure de mala gana y me incorpore un poco, mirando a Nathan a mi lado. - Que sexy estas- dije pasando una de mis manos por su pecho.- Oh si- comente contenta al instante- dios ha escuchado mis plegarias- me eche hacia atrás en la cama, dejándome caer otra vez- Es el primer día de cole… podemos volver cuando les dejemos y meternos en la cama y desnudarnos…- se lo decía entre besos en el pecho.

- Prefiero que nos quedemos directamente aquí - dije pasando una de mis manos por su espalda - no me apetece moverme - dije todavía con los ojos cerrados, suspiré y me incorporé porque sino me quedaría dormido otra vez y me daría cada vez más pereza - tendríamos que haberles apuntado a lo del bus, así no tendríamos que llevarlos nosotros - dije levantándome de la cama y yendo a coger la ropa para vestirme.

-Ya sabes que me gusta dejarlos en la puerta del cole- comente sonriendo- Darles un beso, que Justin se avergüence de mi beso y que los demás padres nos tengan envidia por ser mas jóvenes, mas guapos y mejores.- sonreí mientras me ponía en pie. Suspire colocándome delante del espejo y me mire, me quite el camisón y me puse de lado para mirarme la tripa. Le sonreí lanzando un beso a Nathan a través del espejo. Saque un vestido del armario y empece a vestirme.- Venga, date prisa.- dije mientras me abrochaba los zapatos- Voy a preparar el desayuno, tu despierta a las fieras- comente sobre los niños, dejando de camino hacia la puerta un beso en sus labios.

- Ya, si todo lo que sea presumir a ti te encanta - comenté mientras me abrochaba los pantalones, me puse una camiseta y salí de la habitación - no te pases ahí encerrado dos horas que tengo que entrar con la cría - le dije a Justin dando unos golpes en la puerta del baño, estaba dentro con la radio puesta - ¿me has oído?
- Que sí - dijo desde dentro y subió un poco más la música, rodé los ojos y fui hacia el cuarto de la cría.
- Hay que levantarse - susurré sentándome en la cama, me daba mucha pena despertarla, suspiré pasándole una mano por el pelo - despierta nena..
- No quiero - murmuró girando la cabeza hacia la almohada, cogí su ropa y empecé a vestirla, era el primer día, no iba a obligarla a que lo hiciera ella. Se fue despertando mientras lo hacía y empezó a contarme lo que había soñado.
- Ahora te lavas la cara, te peinas y bajas a desayunar - le dije llevándola hasta el baño en brazos, me costó un poco que se soltara pero al final se metió en el baño y bajé a la cocina.

Baje a la cocina y empece a preparar el desayuno, iba poniendo el zumo en la mesa mientras se hacían las tostadas para mi y la leche para los niños. Saque cereales para Nathan y Justin y prepare mi café con leche y las galletas para Kristen.
-Buenos días- le dije al crío cuando entro- Ponte bien la corbata, anda- me acerque a el se la coloque por dentro del jersey del uniforme del colegio.
-Mama, para.- se quejo- Este uniforme es una mierda- dijo mientras se sentaba en la mesa.
-Me da igual, lo llevaras hasta terminar el instituto...- me encogí de hombros, sonrei y Nathan cuando entro.- Acostúmbrate rápido.- aclare a Justin y le di un beso a la niña cuando entro medio dormida a la cocina. La senté en su silla y le puse delante el desayuno, sentándome en mi sitio cuando estuvo todo.

- Ya no quiero ir al cole - dijo Kristen cogiendo una galleta - tengo sueño - se quejó mojándola en la leche para morderla después - quiero quedarme durmiendo - dijo después de tragar, suspiró y volvió a mojar la galleta - ¿por qué tengo que ir al cole? - iba hablando mientras desayunaba.
- Porque los niños van al colegio - dije sentándome en mi sitio - ¿no querías enseñarle la mochila a tus amigas?
- Ya no.. prefiero quedarme durmiendo - dijo cogiendo otra galleta.

-Hay que ir al cole cariño- le dije a Kristen- Luego nos echaremos una siesta ¿vale?- le di un mordisco a la tostada, ella seguía diciendo que se quería quedar durmiendo y no ir al cole.
-No seas plasta, no puedes- le dijo Justin suspirando y siguio comiendose los cereales y la leche.
- No le hables así a tu hermana- le regañe.
-Pero es que es verdad, no puede quedarse en casa.- puso una mueca y yo mire a Kristen.
-El cole es divertido y si no vas no puedes enseñarles la mochila nueva, que es mejor que la de las demás… ya verás que envidia van a tener- le dije sonriendo.

- Es que ya no quiero ir - dijo Kristen mirando a Gema - ¿dónde vais a estar vosotros? - preguntó mirándome después a mi - no, no, quiero quedarme aquí - dijo negando con la cabeza - no me gusta el cole - rodé los ojos, la mañana había empezado demasiado tranquila.
- Solo será un rato Kristen, cuando quieras darte cuenta estarás aquí durmiendo la siesta - dije mirándola, ella negó con la cabeza - como dice Justin da igual, vas a tener que ir.. te lo pasarás bien, va a estar Silvia contigo, será divertido..
- No quiero ir - dijo negando con la cabeza, empujando el vaso de leche hacia el centro de la mesa - no voy.

-Kristen- la mire con seriedad- Termínate el desayuno, anda.- le puse el vaso enfrente otra vez- Nosotros vamos a estar trabajando, en casa no habrá nadie- le explique.
-Pues yo me voy contigo o con papa- dijo ella mirándonos- No voy al cole- tiro de nuevo el vaso hacia el centro.-
-Tampoco es para tanto, el año pasado te gustaba- le dijo Justin mirándola- Yo también tengo que ir, vamos los dos y Silvia y todas tus amigas del cole. El cole mola- aclaro el crio mirándola, sonreí, era raro que intentara convencer a su hermana de algo, siempre pasaba de todo- quiero que se calle ya- me dijo en voz baja cuando vio que estaba mirándole así.

Kristen se quedó mirando a su hermano mientras hablaba y al final suspiró y cogió el tazón de leche para beber y comerse una galleta más.
- Pero luego echamos la siesta - le dijo a Gema mirándola - ¿cuánto rato es el cole? - preguntó mojando la galleta para morderla después.
- Hasta la hora de comer - dije mirándola mientras me terminaba mi desayuno - es poco rato, se te pasará volando - dije mirándola, ella asintió mientras masticaba la galleta y se terminó de beber la leche - venga, ¿has preparado la mochila? - le pregunté cogiéndola en brazos.
- Sí, ayer la preparamos mamá y yo - me dijo mientras la llevaba hacia la entrada - ¿el chupete? - preguntó mirándome, abrí uno de los cajones del mueble de la entrada y se lo di, había varios repartidos por la casa.