Casa de Alice Moretz

- Pues si alguien te pilla podrá admirar lo bien que bailamos las mujeres de la familia- le dije soltando una risilla, tapándome la boca con la mano-. En casa yo bailo con la fregona- le confesé sonriendo un poco-. Lo se- me reí un poco dándole vueltas a la pajita en mi vaso y dándole después un trago-. Supongo que tendé que hacerlo- sonreí-. Si, bueno, cuando yo venía solía haber más gente pero...supongo que ha pasado aún más de moda o algo...pero a mi me da igual mientras no lo cierren.

- Yo ni siquiera sabía que esto era un cabaret - dije mirando a mi prima - creo que necesitan una buena campaña de marketing para relanzar esto - comenté mirando alrededor, me terminé mi bebida y dejé la copa en la mesita - ¿puedo tomarme otra? estaba rica - dije señalando la copa, aunque a lo mejor estaba abusando un poco de la bebida, notaba las mejillas calientes.

- ¿No lo sabias?- pregunté-. Bueno, en la entrada hay un letrero- reí- no te habrás fijado, ahora vais como locos de un lado a otro...es como cuando te compras un coche, que cuando lo tienes es cuando ves todos los de la misma marca- comenté pensativa-. Yo lo descubrí por casualidad, me llamó la atención Douglas, se estaba fumando un cigarrillo fuera y me puse a hablar con él- me alcé de hombros-. Yo también lo creo, en teoría tienen a alguien encargado del marketing, pero no parece muy bueno...- le respondí-. A lo mejor podemos hacer algo nosotras, ¿se te ocurre algo?- pregunté rapidamente, dejando que pasaran ahora por mi mente un monton de ideas a toda velocidad-. ¿Otra?- pregunté mirándola. Sonreí un poco y asentí llamando a Sack con la mano y después la bebida de mi prima.

- Pues no, nunca me había fijado en el cartel - dije encogiéndome de hombros - así ahora mismo, no sé.. - dije mirándola - pero es un sitio grande, ¿se hacen fiestas? podría hacer fiestas, eso siempre atrae a la gente.. o días especiales.. con un cartel bonito y un eslogan atrayente - dije sonriendo - gracias - le dije a Sack cuando trajo mi bebida, le di un sorbito y la dejé apoyada en la mesita.

- Creo que desde que lo conozco no han hecho ni una sola fiesta- me reí un poco mirándola, estaba algo contentilla ya, entre lo que había bebido en casa y lo de ahora...-. No estaría mal hacer algo especial...y si hacemos algo del tipo...- lo imaginé rápidamente- ¿que la gente pruebe?- pregunté- um...no creo que nadie se atreviera...- me dije a mi misma-. Lo de la fiesta está bien...a lo mejor si viniera alguien famoso...eso siempre atrae a gente...- aunque claro, eso costaba dinero, a no ser que conocieramos a alguien que conociera a alguien que conociera a alguien famoso o algo así-. Lo del eslogan brillante me gusta, a lo mejor deberíamos empezar por el cartel de fuera, ponerle luces billantes.

- Claro, podríamos poner en el cartel de fuera luces como las del espejo de mi habitación, pero en grande - era como un espejo de los tocadores antiguos - y luego las letras en neón rojo, que quede como una mezcla de moderno y antiguo - dije sonriendo - yo creo que se podrían hacer actuaciones especiales cada semana, por ejemplo, todos los sábados algo especial, o mejor un día entre semana que queda más especial, o más secreto, porque nadie sale entre semana.

- Eso me gusta- dije señalando a Ali, soltando una risilla-. Oh, oh, pastelito, me acabas de dar una idea increíble- dije toda emocionada. Ahora mismo mi cerebro iba a mil por hora imaginando como sería lo que se me acababa de ocurrir-. Una fiesta secreta- dije sonriendo- sobres dorados...o negros con tinta dorada, el nombre del invitado...algo que parezca selecto pero poco a poco se iría invitando a más gente...algo...- lo pensé- oh dios mío, ¡clandestino!- me encantaba la idea-. Incluso...un cabaret con máscaras...el día de las máscaras- sonreí.

- Claro, la primera fiesta podría ser de máscaras, como para inaugurar el sitio secreto.. sería un sitio donde valdría todo - dije mirándola - bueno, todo todo no.. no sé - no tenía que haberme pedido esa otra copa - pero sería un sitio misterioso, lo que ocurriera aquí sería como secreto - me mordí el labio - sería fantástico.. cada semana, una fiesta así, donde puedes ser quién quieras.. yo creo que vendría mucha gente.

- Oh sí- afirmé riéndome un poquito, entusiasmada-. La invitación tendría que entregarse en una bandeja de plata por un recadero, personalmente...y por supuesto el recadero tendría que ir con un traje color...- lo pensé, combinaba los colores con la carta, pero es que al imaginarlo yo veía una mano sujetando la bandeja y la manga era blanca o como mucho color vino tinto...-. Claro, secreto, nadie sabría nada...hombre, eso de hacer de todo...- reí un poco, era exagerado- es...morboso y misterioso...¡estoy deseando estar en esa fiesta!- dije emocionada.

- ¿Entonces vas a organizarla de verdad? - pregunté mirándola atenta, suponía que yo no podría ir a una fiesta de ese estilo pero a lo mejor me dejaba ayudar a organizar las cosas - a mi.. me gustaría ayudar - dije un poco insegura, porque no estaba segura de que me dejara - aunque sea con las invitaciones.. para mis fiestas siempre las diseño yo, te puedo enseñar algunas a ver qué te parecen..

- Creo que sí- le dije sonriendo un poco, estaba bastante decidida, me apetecía mucho...es más, iba a invitar a todos mis contactos de la universidad para que vinieran...bueno, a todos no, que había que hacer selección para crear el rumor y la intriga...solo a los más populares la primera vez-. Vale, me va a venir super bien tu ayuda- le dije sonriendo ampliamente-. ¿Sólo quieres hacer las invitaciones?- pregunté mirándola sorprendida. Yo pensaba que querría ayudarme a organizarlo todo.

- ¡Genial! - exclamé contenta - no.. en realidad quiero participar en todo - dije riendo un poco - pero pensaba que como no voy a poder venir a esa fiesta no me ibas a dejar hacer muchas cosas - comenté mirándola - que me encantaría venir, pero parece un poco de mayores, no sé.. - cogí mi bebida y le di un sorbito.

Sonreí contenta cuando la ví exclamar de esa manera. Miré alrededor porque se estaban apagando las luces otra vez, iba a empezar otra actuación. Le hice una señal de silencio y miramos el espectáculo. Cuando acabó aplaudimos, eran geniales, me encantaban esos bailes y había buenas cantantes. Miré a Ali para volver a hablar con ella.
- Claro que te voy a dejar hacer cosas- reí un poco- voy a necesitar ayuda y tu me la vas a dar- afirmé contenta-. Ya, bueno, lo de la asistencia tal vez no...- fruncí un poco el ceño- sería demasiado irresponsable por mi parte ¿no?- pregunté riendo un poco. Ya estaba haciendo demasiado de mala influencia enseñándole esto, aún era menor, aunque sabía que le iba a gustar, por eso lo había hecho.

Se apagaron las luces de nuevo y salieron otro montón de chicas, con ropa distinta, a hacer otro número. Fue tan genial como el primero, me estaba pareciendo un sitio alucinante.
- Qué bien - le dije contenta - ¿y cuándo empezamos? - pregunté emocionada, miré mi copa, me la había terminado durante el espectáculo, pero ya no podía beber más - no sé.. de todas formas como será de máscaras puedo venir sin que te des cuenta - dije riendo - es broma - rodé los ojos riendo más, aunque en realidad pensaba que podía hacerlo, me podía hacer una invitación a escondidas..

- Oh, entonces permíteme que yo me encargue de las invitaciones jovencita- le dije riéndome un poco-. No lo se, supongo que podemos ir negociándolo a medida que lo vayamos preparando...porque tendremos que preparar los espectáculos, y tampoco quiero que pierdas toda la inocencia- bromeé-. De todas formas mejor que lo hagas conmigo y que yo lo sepa a que lo hagas a mis espaldas y me pueda llevar luego una sorpresita- le dije sonriendo un poco-. Lo negociaremos- afirmé-. Podemos empezar en cuanto lleguemos a casa- le dije sonriendo un poco.

- Lo he dicho de broma, en serio, me gusta hacer las invitaciones - dije poniendo una mueca, de verdad era una de las partes que más me gustaba de organizar fiestas - vale, me voy a portar tan bien que tendrás que dejarme venir - dije sonriendo ampliamente - además, ya he venido hoy y no he perdido nada, mi inocencia sigue intacta, no ha sido para tanto - a ver si así colaba - y tu te escapabas de casa para venir a escondidas.. así que.. no tienes excusa para no traerme - le dije sonriendo - ¿entonces nos vamos ya?

- Ya...mentira...- yo también habría dicho eso, pues anda que no me había colado yo veces en discotecas y esas cosas, aún tenía mis carnés falsos guardados-. Ya veremos cómo lo hacemos, por lo pronto hay que organizarlo bien y ya sabes que lo último son las invitaciones- a ver si es verdad- me reí un poco mirándola-. Ya...- afirmé-. Ah no, que yo era mayor de edad ya cuando vin- le dije riéndome un poco- esa no me vaaale- canturreé-. Venga, sí, que tengo ganas de empezar, así podrás empezar tu también a convencerme de que debo dejarte ir- bromeé.

- Mis dotes para organizar eventos te convencerán de que me merezco una de esas invitaciones fabulosas que voy a diseñar - le dije sonriendo ampliamente - vale, vamos - dije levantándome despacio para no marearme por la bebida - yo ya casi soy mayor de edad - dije riendo - mentalmente sí que lo soy.

- Yo no dudo de tus dotes para organizar, eres de mi familia pastelito- bromeé levantándome de la silla y empezando a caminar hacia la salida. Iba contentilla hoy, hacía tiempo que no bebía así, aunque no sabía por qué, aún era joven jopes-. Lo sé, aunque aún te quedan un par de años querida- reí- no pasa nada, disfrútalos, cuando llegas a mi edad te das cuenta de que no estaban tan mal- le expliqué-. Las mujeres maduramos antes, yo también era muy madura- es que me veía reflejada en ella, era como...miniyo, me encantaba.

- Hablas como si ya tuvieras treinta - dije riendo un poco mientras caminábamos hacia la salida - jolín, no me digas lo de pastelito ahora, que me entran ganas de comerme uno - comenté riendo - ¿tienes en casa? - normalmente nunca me entraba hambre a esas horas, y tampoco era hambre, solo eran ganas de comer algo.

- Ni se te ocurra repetir lo de los treinta- la avisé señalándola con el dedo, riéndome después un poco-. Hola, Douglas, nos vamos querido- me acerqué a darle dos besos y después me separé dejando espacio para que él se acercara a besar a Ali.
- Espero verte de nuevo querida- dijo él sonriendo.
- Ya verás como sí- me reí un poco y cogí la mano de mi prima para tirar de ella-. Adios- me despedí sonriéndole aún. Fuimos por la calle hasta que me di cuenta de que no habíamos llamado a un taxi y lo hice rápidamente-. Pues...- dije volviendo al tema- si que tengo- afirmé pensándolo-. Ayer hice cupcakes...- fruncí un poco el ceño- a mi compañero le gustaban y como a mi me gusta cocinar...- le expliqué-. Vaya desagradecido- me quejé- mira que despedirse con una nota- que mal educado-. Ahora asaltamos la despensa- le dije riéndome un poco.

- Vale, vale - dije riendo por lo de los treinta años, me despedí de Douglas y empezamos a caminar por la calle - cupcakes, qué ricos - dije sonriendo - bueno, tanto como asaltar la despensa.. solo un poquito - sabía que me iba a sentir fatal al día siguiente - ya, pero bueno, mejor que se haya ido, así puedo irme yo a vivir contigo - le dije sonriendo, estaba contenta porque creía que era posible que sí me dejarán ir a vivir con ella, y eso sería genial.

- Sí, están buenísimos, pero engordan- me quejé poniendo una mueca- mañana empiezo a dieta- mamá me había dicho que estaba gorda, ¿cómo podía decirme que estaba gorda?-. Hoy la asaltamos, que yo mañana me pongo a dieta- le dije riéndome un poco- madre mía, hablo como una tragona- me quejé un poco-. Sí, la verdad es que sí, te prefiero a ti...era un poco...rarito- puse una mueca y le hice una señal al taxi cuando llegó a donde estábamos nosotras- además, así seremos como hermanitas- dije emocionada. Me monté en el taxi cuando se acercó a nosotras y esperé a que ella montara-. Que ganas tengo de llegar a casa- dije sonriendo.

- Mañana tendré que dar cuatro vueltas más a la pista de atletismo por cada cupcake que me coma hoy - dije poniendo una mueca - sí, un poco raro sí que era - afirmé mirándola, enseguida llegó el taxi y montamos en el - yo también, así podemos comer y empezar lo de la fiesta - dije sonriendo. No tardamos mucho en llegar a la casa, se me hizo super corto. Bajamos del taxi y entramos en la casa.

- Pues me voy contigo- le dije contenta- hace tiempo que no corro...- en realidad hacía tiempo que no hacía deporte, casi no tenía hueco con todas las cosas que tenía programadas para cada día-. Sí- afirmé- aunque estaba bastante bueno- comenté riéndome un poco. Me había imaginado más de una vez como sería desnudo, por lo poco que había visto tenía un cuerpazo-. Entonces mañana nos ponemos a dieta las dos- sonreí. Ella estaba muy bien, aunque nunca venía mal hacer una dieta equilibrada. Miré por la ventana y fruncí un poco el ceño, me había parecido ver algo raro...la verdad es que el alcohol no me sentaba nada bien. No tardamos en llegar a casa, como habíamos ido hablando se nos había pasado super rápido. Pagué al taxista y entramos en casa dejando las cosas colocaditas. Fuimos al salón y saqué del mueble donde los guardaba papel y rotuladores. Me senté en el sofá y dejé las cosas sobre la mesa del café-. Manos a la obra pastelito- le dije- um...pastelito, ¡comida!- dije de repente levantándome y corriendo hacia la cocina para sacar cosas para comer, los cupcakes y alguna cosilla más. Volví al salón con las cosas en una bandeja y la puse a un lado sentándome en el suelo sobre la alfombra para llegar mejor a la mesa.