Casa de Alice Moretz

Nada más llegar a la casa caminé hacia el sofá y me dejé caer en el. Me quité los tacones, dejándolos a un lado y dejé el bolso junto a ellos. La miré mientras sacaba cartulinas y rotuladores para empezar a organizar lo de la fiesta y sonreí contenta, acomodándome un poco en el sofá.
- Mmm.. pastelito - murmuré a la vez que ella, me reí cuando dio un salto y la miré ir hacia la cocina. Coloqué los cojines a un lado y me recosté un poco, subiendo las piernas al sofá, no quería dormirme pero en el taxi me había quedado un poco traspuesta.

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- Ya estoyyy- canturreé contenta al sentarme-. Venga, a ver- dije cogiendo una galleta y metiéndomela en la boca-. A ver, por donde empezamos...ah sí, el desarrollo de la idea, hay que planificarla para disponer la organización- afirmé tras morder un trozo. Estuvimos allí un rato decidiendo como ibamos a hacer lo de la fiesta, mi cerebro trabajaba a mil y podía imaginarlo todo, telas colgando del techo con una luz bastante ténue para que no se pudiera identificar a nadie, las máscaras eran importantes pero la gente podía conocerse por otros factores como el físico, yo siempre me fijaba en esas cosas, así que tenía que pensar como si fuera yo la que no pudiera descubrir a esa persona. Al final nos quedamos dormidas allí planificando las cosas, ni siquiera subimos a la habitación.

Desde que había vuelto del festival no podía dejar de pensar en Adam, lo tenía en mi cabeza día y noche, pero estaba un poco indecisa en qué hacer ahora. ¿Habría significado algo para él o solo había sido un rollo de festival? cada vez que pensaba en ello se me revolvía el estómago.
Iba hacia mi cuarto cuando llamaron a la puerta, me acerqué a abrir y sonreí al ver que era mi prima.
- Hola - la saludé sonriendo, acercándome a darla un abrazo - ¿qué haces aquí? - le pregunté contenta, hacía unos días que no la veía.

Conduje hasta la casa de mi prima, aparqué donde siempre y llamé a la puerta. Esperaba que me abriera la chica de siempre, pero lo hizo ella, y estaba radiante cuando lo hizo.
- Madre mía, que cambio- dije riéndome un poco. Se le notaba en la cara que estaba mejor que la última vez que la había visto-. Bueno...me han levantado la orden de arresto domiciliario...- dije contenta- así que he decidido venir a ver a mi pequeño pastelito- dije tirándole un poco de la mejilla en broma-. ¿Estás solita?- pregunté mirando alrededor. Parecía que sí-. Creo que tienes cosas que contarme, y yo a tí, pero tú primero- la señalé.

- No me he hecho nada nuevo - dije cogiéndome las puntas del pelo con la mano, ahora que las miraba sí, necesitaban un repaso - creo que sí, mamá ha ido al spa - comenté mirándola, de mi padre ya no hablaba nunca - ¿quieres algo de comer o beber? - pregunté para ir a cogerlo antes de ir a la habitación - bueno, tampoco tengo mucho que contar - dije sonriendo, en realidad estaba deseando contarle lo de Adam, aunque me daba un poco de cosa, no sabía qué iba a decir.

- ¿De verdad?, cualquiera lo diría con esa sonrisita bobalicona que tienes- le dije soltando yo una risilla. Miré alrededor, como siempre no podía evitar cotillear las cosas de los demás y analizar en mi cabeza los cambios que habían hecho. Pude encontrar dos cosas nuevas-. Tu madre ha comprado un jarrón precioso- sonreí un poco al verlo y después la miré a ella-. No quiero nada, gracias, estoy a dieta- le expliqué-. No, a lo mejor mucho no, pero algo interesante sí, te conozco, tienes esa mirada...- la señalé sonriendo- es la misma que tienes cuando te regalan un vestido o un bolso que te gusta- reí.

- Que no - dije riendo un poco - vale, pues vamos a mi habitación - dije cogiendo su mano para ir hacia arriba, no quería que me escuchara nadie - es mejor que un bolso o un vestido - dije sonriendo, cerrando la puerta cuando pasamos a mi cuarto - pero es un secreto, no puedes contárselo a nadie - comenté yendo hacia el sofá para sentarme en el - sé que no lo vas a hacer, pero promételo - dije mirándola.

- Ya, claro- me reí un poco mirándola y subí las escaleras con ella, intentando no correr demasiado porque Mark me había dicho que no estaba recuperada del todo y se me podía reabrir-. Uy, pues ya tiene que ser bueno- comenté sonriendo cuando entramos en su habitación. Cerró la puerta, yo dejé el bolso a un lado y me senté en uno de los sofás que tenía en el saloncito que había pegado a su habitación-. Sabes que no- rodé los ojos sonriendo un poco, estaba concenta, me alegraba muchísimo, ya era hora de que volviera a tener la misma luz que antes-. ¿Enserio?- pregunté. Levanté la mano-. Yo Caroline Forbes, juro solemnemente sobre todo mi armario y lo que me importa que no diré a nadie nada de lo que puedas contarme en esta habitación y en este preciso instante- bajé la mano dejándola sobre mi regazo y sonreí un poco-. Adelante- la animé.

Me mordí el labio mientras ella juraba que no iba a decir nada y después suspiré echándome hacia atrás en el sofá.
- Creo que me he enamorado - dije sonriendo, mirando hacia el techo - se llama Adam, es guapísimo, tiene el pelo super rizado y una sonrisa increíble - empecé a contarle dejando las manos en mi tripa, notaba lo típico que decían de las mariposas - le conocí en el instituto, y coincidimos un par de veces pero lo importante pasó en el festival - dije incorporándome para mirarla - nos besamos - dije en bajito - aah fue increíble - exclamé contenta levantándome del sofá, no podía estar sentada, me entraban los nervios - tengo una foto donde sale él, ¿quieres verla? salimos haciendo el tonto pero bueno.. - dije riendo un poco, yendo de una carrerita a la habitación para coger la foto de debajo de la almohada, volví a la salita y se la di para que la viera - ¿a que es guapo?

- ¿De verdad?- pregunté riéndome un poco. Me hacía mucha gracia verla así porque me recordaba a mí en el instituto-. Oh dios mío, qué pasó- pregunté mirándola esperando que me contara más. Solté una risilla cuando me dijo lo del beso-. Entonces ya se por qué querías ir en realidad a ese festival- dije entre risas-. Que genial pastelito- dije sonriendo al verla tan emocionada-. ¡Claro!- exclamé animada cuando me preguntó si quería ver una foto. Esperé impaciente a que volviera con ella en la mano y la cogí para verla-. Sí...- dije mirándola. ¿Cuántos años tenía ese tipo?- y mayor...- dije algo confundida, mirándola, aunque manteniendo la sonrisa-. ¿Está en el instituto?- pregunté mirándola con curiosidad.

- Es que no podía dejar pasar la oportunidad de poder verle y pasar más tiempo con él - dije sonriendo - me acompañó hasta la casa los dos días, es tan bueno - dije contenta sentándome a su lado en el sofá, aunque no tardaría en tener que moverme otra vez - sí, ¿verdad? - comenté sonriendo cogiendo la foto para mirarla yo, es que era guapísimo - es profesor de educación física - dije mirándola - vino a hacer una sustitución y nos conocimos como en las películas, debajo de las gradas - solté una risilla y volví a mirar la foto, esperaba que ahora no se enfadara - no es tan mayor.. - comenté mirándola de reojo.

La miré pasmada cuando me dijo que era profesor de Educación Física, dudaba que ni siquiera supiera lo que estaba diciendo. Dejé que cogiera la foto sin saber muy bien que responder a lo que me había dicho.
- Ali, este chico tiene más o menos mi edad- lo señalé- y es profesor...¿sabes que eres menor de edad y es un delito?- pregunté mirándola a los ojos- lo pueden meter en la cárcel por esto- la señalé. Es que no sabía que decirle-. Cariño, me alegro mucho de que hayas encontrado a alguien que te guste pero...¿no hay otros chicos de tu edad?- pregunté. Suspiré un poco. Ese tipo estaba abusando de ella seguro, y ella ni siquiera se daba cuenta.

- Ya sé que tiene casi tu edad - dije mirándola - y también sé que es un delito, pero.. en realidad no lo es, lo sería si me estuviera obligando a hacer algo que no quisiera, y para nada - dije girándome hacia ella - Adam es bueno conmigo, no es como los otros chicos, es.. diferente - no sabía cómo explicárselo para que lo entendiera - da igual - suspiré - de todas formas no creo que vaya a pasar nada más - él no iba a planteárselo por lo que decía ella, era un delito y todo eso - es el único chico que me ha tratado bien en mucho tiempo..

- No- dije mirándola- estás totalmente confundida- suspiré- esa es la idea moral, la legal es que si tiene algún tipo de poder sobre ti es un delito- comenté mirándola- ya sea a nivel de conocimiento, que obviamente lo tiene- porque él no iba a querer solo un par de besos y estaba utilizando su inocencia en contra de ella- de fuerza- que era a lo que ella se refería- o de otro tipo- es que no sabía que decirle, no quería que se enfadara conmigo, pero me preocupaba el hecho de que estuviera con un hombre y no con un chico-. Ya, ya lo sé, estás...- no podía decir enamorada- te gusta- dije mirándola- siempre será diferente en ese momento- sonreí un poco-. ¿De verdad?- pregunté- para empezar no debería ni haberte ilusionado- seguro que iba a ir a más, este iba a querer meterle mano por donde pudiera, era un pederasta seguro-. No lo creo...- negué con la cabeza- ¿estás segura?, ni siquiera es un chico, es un hombre Ali...- dije señalándolo.

- No sé.. es que tampoco hemos hablado de ello - dije agachando la cabeza - ha sido mi culpa, yo me he hecho ilusiones antes de tiempo - pero me gustaba pensar que yo le gustaba y que íbamos a seguir viéndonos - tampoco nos llevamos tanto tiempo.. y en menos de un año ya seré mayor de edad - dije alzando la mirada hacia ella - solo me levanto contenta porque pienso en él - sino me despertaría igual de mal que antes de ir al festival - no sé, a lo mejor yo también le gusto ¿no? porque sino no nos habríamos besado, y menos dos días seguidos.. quizás si lo hablamos podríamos hacer que funcionara..

- Ali...- suspiré un poco cuando me lo dijo de aquella manera- no es tu culpa- dije mirándola- eres joven todavía...- se estaba aprovechando de ella- es normal que sueñes con estas cosas- le sonreí un poco-. Sí, pero tendrás que ir a la universidad...¿qué vas a hacer sino?- pregunté- allí habrá fiestas y otras cosas a las que con el tiempo él no querrá ir- comenté mirándola- ¿o vas a quedarte en casa todas las noches viviendo como una persona mayor en vez de disfrutar la universidad?- a ella le gustaba salir, yo lo sabía porque lo había visto y porque a mi también me encantaba, no podía perderse esa experiencia-. No digo que no le gustes...- es que no sabía como decirle que se estaba aprovechando de ella para que no se enfadara, no podía-. Es mayor y...habrá un momento en el que querreis cosas distintas y los dos habreis perdido el tiempo- comenté mirándola- y tu lo que tienes que hacer ahora es salir, divertirte y liarte con muchos chicos- sonreí- de tu edad.

- Ya, ya lo sé.. pero iré a la universidad de aquí, y puedo hacer todas esas cosas aunque esté saliendo con alguien - dije mirándola - yo no quiero liarme con muchos chicos - y menos si todos iban a ser igual de capullos que los que ya conocía - los de mi edad son todos unos críos.. me gusta Adam porque no es igual que ellos - expliqué mirándola - y no es tan mayor - repetí como antes. Había empezado a contarle el tema muy contenta y ahora estaba hundiéndome poco a poco.

- Estoy suponiendo que irás a la de aquí- dije mirándola-. No sabes como es la universidad, todos los días hay una fiesta y a ti te encantan esas cosas, no puedes dejar de hacerlas y si tienes un novio de esa edad...- suponiendo que tuviera posibilidades y no quisiera simplemente acostarse con ella para dejarla después- él tendrá que trabajar, no querrá ir a fiestas y querrá que estés con él...igual querrá hasta formar una familia...- rodé los ojos. Si es que ella era demasiado joven...-. Yo quiero que te levantes contenta todos los días y que no estés como últimamente, pero deberías buscarte otra cosa que te haga sentir bien- era normal que le gustara un chico mayor que ella, a todas nos pasaba, y a todas nos parecía que los de nuestra edad eran críos-. Pues no te líes con muchos tíos pero...- señalé la foto- ese, y te lo digo como alguien que te quiere de verdad, no es el adecuado- me estaba sintiendo fatal teniendo que decirle esto, pero es que tenía miedo por ella, ¿y si le hacía algo?-. Te he prometido no decir nada y no lo voy a hacer- de momento-, tu misma tienes que darte cuenta de que esto es demasiado- suspiré-. ¿De verdad?, ¿cuántos años tiene?- pregunté mirándola- como mínimo te lleva seis años Ali, y eso no es poco.

Rodé los ojos cuando dijo que no era el adecuado, ¿y ella qué sabía? ni siquiera le conocía. Suspiré agachando la mirada y dejé la foto boca abajo a un lado.
- Da igual, ya no quiero hablar más de esto - dije fastidiada, habría sido mejor no contarle nada - de todas formas ya te he dicho que seguramente no vaya a pasar nada más..

- Mira, yo eso no lo se- dije mirándola seria al ver como había cambiado el tono de su voz-, eres mayorcita para saber lo que haces, solo espero que no te acabes arrepintiendo- comenté suspirando-. Yo tampoco quiero seguir hablando de esto- estaba algo disgustada y si seguíamos así acabaríamos enfadadas, nunca nos habíamos enfadado y no quería que lo hiciéramos por esto, aunque seguía dándome miedo-. Yo también tenía que contarte algo- comenté mirándola- pero necesito que me prometas que no se lo dirás a nadie de la familia.

Me eché el pelo hacia atrás con una mano mirando hacia otro lado cuando dijo que ya era mayorcita y después suspiré.
- Claro, no voy a decirle nada a nadie - nunca iba contando por ahí lo que me contaba ella - te lo prometo - ella me lo había prometido hacía un momento.

- Bien, porque mi madre se pondría histérica- comenté rodando los ojos mientras pensaba rápidamente en cómo podía contárselo para que no se preocupara-. En realidad no es para tanto- aunque sí para mí-. La otra noche me asaltaron- dije después de mirar a los lados para asegurarme que no había nadie-. Me...apuñalaron- dije mirándola- por suerte mi ex-compañero de piso estaba por ahí y me salvó- sonreí un poco con esto último-. Pero todos estábais fuera y no quería llamaros- ella estaba en el festival y mis tíos y mis padres habían salido de Frost. Hablaba deprisa, no podía evitarlo, tenía las pilas cargadas-. He denunciado pero aún no lo han encontrado- dije sobre el tipo.

La miré abriendo mucho los ojos cuando dijo que la habían asaltado y después me tapé la boca con las manos, soltando un gritito, cuando contó que la habían apuñalado.
- ¿Y has venido hasta aquí tu sola?¿y si sigue por ahí suelto? - empecé a preguntar de golpe - pero.. ¿estás bien? ¿y no fuiste al hospital ni nada? tenías que haber llamado a alguien para no estar sola..

- Sí, bueno, ya estoy mejor...y ese tipo está en busca y captura- comenté pensando en ello. La verdad es que si lo pensaba bien era un poco descuidado por mi parte salir cuando me habían asaltado hacía unos días tan solo-. Es que no voy a quedarme en casa muerta de miedo- yo no era así-. Estoy bien- afirmé sonriendo un poco cuando lo dijo de esa manera-. No, Mark es médico, me encontró y me llevó directamente a casa para curarme- le expliqué-. No sé por qué, supongo que allí tendría mejor material pero...él es médico, así que él sabrá, no lo vería muy mal y...estoy bien- así que todo estaba bien.

- Ya.. pero no creo que sea seguro - dije poniendo una mueca, podía estar esperándola para vengarse o cualquier cosa - ¿Mark? - pregunté frunciendo el ceño - ¿pero no os llevabais mal? - pregunté un poco confusa - por eso se fue de tu casa ¿no? - pregunté mirándola.