Casa abandonada del bosque.

- No necesito ninguna de estas cosas - comenté mirando por encima lo que había en la maleta, afirmé mirando los papeles y después fui hacia la mesita donde había dejado mi taza de café - tranquilo.. haciendo lo de siempre - dije mirándola, me encogí de hombros mientras daba un trago - ya sabes mis horarios - era lo que hacía cada día - Café ya transporta el palo unos tres metros - comenté riendo un poco - hemos estado practicando.

-Es que ninguna de estas cosas eran para ti, las cogí según mis gustos... Tu madre quiso que me trajera algo... y me ha invitado a pasar la navidad con ellos, pero bueno... ya pensare algo- comente empezando a sacar la ropa- ¿enserio?- pregunte cuando dijo lo del perro- Eh, chico, estas hecho todo un campeón- dije acercándome al perro y acariciándole-

- Bueno, tanto como un campeón.. creo que no entiende del todo el concepto recoger y traer - dije riendo un poco, sentándome en el sillón - creo que no es un perro muy inteligente - dije mirándole, miraba a Gabriella fijamente moviendo el rabo a los lados y siguiéndola a donde iba, estaba contento de verla - pero ya no podemos cambiarlo, así que.. - bebí un poco - si les dices que tienes que pasar las navidades con tu familia no creo que insista mucho más, seguramente para entonces ya ni se acordara..

-Deja de meterte con mi perro- le dije mirándole con cara indignada y acariciando a Café con una de mis manos. Me levante para seguir dejando cosas en su sitio y el perro me seguía o me miraba contento.- Yo no lo cambio por nada del mundo, era el o ninguno- dije sobre el chucho, nos lo habíamos quedado, no era que lo hubiéramos comprado, no había sido elegido a dedo.- La verdad es que yo el concepto de traer y llevar un palo tampoco lo entiendo, en realidad... ¿Para que sirve?- le pregunte

- Ya, a mi también me parece estúpido pero es lo que los perros hacen - comenté mirándola - nunca hemos probado con una pelota, a lo mejor esa es la clave - dije mirando al perro que no dejaba de seguirla - mañana podrías pasarte por el pueblo, hacen falta algunas cosas para comer.. y de paso compras una pelota - bebí y dejé la taza vacía en la mesita que había al lado - ¿sabes algo de los demás? - pregunté refiriéndome a Mark, Sarah y Ashton.

-Vale, pues podíamos hacer una lista de la compra para mañana- le dije cogiendo un papel del mueble y sentándome en la mesa para escribir.- Si, hable con Mark el otro día, esta bien y también hable con Asthon... el no esta tan bien, pero... le ira bien, esta con Sarah... ella esta un poco deprimida porque Mark y Asthon se enfadaron por vuestra forma de actuar...- rodé los ojos

- Ya se les pasará.. tanto el enfado a Mark y a Ashton como a Sarah la depresión - comenté mirándola - me alegro de que tu no te enfadarás - dije sonriendo un poco, acaricié la cabeza de Café cuando la dejó apoyada sobre una de mis piernas - hace falta comida para perro - comenté mirando a Gabriella - pasta, sal, tomate.. lo de siempre - apenas comíamos otra cosa que no fuera pasta - y café, eso es bastante urgente - dije riendo un poco.

-No tenia derecho a enfadarme- yo hubiera hecho exactamente lo mismo o peor, mis planes siempre eran de los que los demás consideraban una locura.- Vale, lo apunto- dije empezando a anotarlo- Si es tan urgente puedo ir esta tarde, me apetece comprar algo de tela para coser y ya de paso traere la maquina y algunas cosas que quiero del piso- aquí no teníamos mucha música y podría pasar tiempo libre bailando o practicando.- Y debería hacer todo esto antes de decirles a nuestros amigos lo tuyo...- dije señalandole, cuando les dijéramos que estaba muerto no podría pasarme por el pueblo, tendria que ir a hacer la compra mas lejos.

- Hay para hoy.. pero no pasaremos de mañana - ella sabía que me gustaba tomar café varias veces al día, y no sabía si era una cosa mental o de verdad ocurría pero al beberlo me sentía menos sediento de sangre - vale.. ¿vas a poder tu sola? a lo mejor Mark puede ayudarte, o Sarah - dije mirándola, tampoco era plan de que viniera muy cargada, yo iría con ella pero no podía, eso me fastidiaba. Afirmé a lo último que dijo, durante esa semana había estado dudando sobre mi decisión, si había podido resistir las ganas de comerme a Caroline quizás.. pero siempre terminaba descartando esa posibilidad, solo había sido suerte.

-Se lo conté a Ben por teléfono antes de irme a Manhattan, así que el solo está esperando a que yo le diga cuándo debe hacerlo, que creo… debería ser lo antes posible. Hace mucho que no doy señales a nadie, ayer me llamo Nikki y no le cogí el teléfono- porque no sabía que decirle tampoco.- Y tu tampoco has hablado con nadie ¿no?- suponía que no habría hablado con nadie por teléfono.-

- No, no he hablado con nadie - dije mirándola - ¿por qué no vas a verles por última vez? así te despides de ellos.. o puedes seguir en la ciudad, que yo ya no esté no significa que tengas que dejar de ser su amiga, yo no quiero eso - dije poniendo una mueca.

-No, si les digo que… bueno, que tu ya no estás, tendré que fingir que no estás- vamos, que había muerto- y tendré que aguantar llamadas y que quieran quedar para charlar y… es mentir demasiado.- comente negando. Eso era más doloroso- Hablare con ellos por teléfono cuando haya pasado un tiempo. De todos modos iba a tener que hacerlo tarde o temprano- comente encogiéndome de hombros.-

- Pero es muy pronto - dije mirándola - no quiero que pierdas a tus amigos por mi culpa.. diles que prefieres no hablar sobre esto y ya está - no era tan complicado, ellos terminarían respetando que no quería hablar - todavía puedes disfrutar un tiempo de Frost.

No queria verles mas porque sabia como se iban a poner, querrian preguntarme como estaba y tendria que finjir estar mal y no podia, era terrible, como en Manhattan.
-Bueno... a lo mejor podria decirles que me has dejado, que estas en Manhattan con tu madre o algo asi- comente encogiendome de hombros- Porque no voy a pasar lo de casa de tus padres otra vez... tu no estabas alli.- no iba a ver a mas gente sufrir por eso, porque yo tenia la culpa y no queria, jamas volverian a ver a su hijo por mi culpa.

- Sí, supongo que no irán a Manhattan a buscarme - comenté mirando a Café que había terminado por tumbarse a mis pies - diles lo que quieras Gabriella - dije alzando la mirada hacia ella - lo único que no quiero es que tu lo pases mal.. pienso que ver a nuestros amigos, salir de vez en cuando con ellos estaría bien, pero si no quieres - me encogí de hombros, yo lo único que quería era que ella siguiera con su vida normal, es lo que habría querido de haber muerto y ahora que estaba semi-muerto lo seguía queriendo.

Me quede un momento sentada pensando en lo que había dicho, a lo mejor si que podía seguir viéndoles, salir por ahí, ir de compras con las chicas.
-Llamare a una de las chicas... a Nikki o Lucy para decirles que vuelvo al pueblo... que no había nada mas que hacer y...ya esta.- dije insinuando que les diría que había muerto.- Si les digo que no me hablen de eso supongo que lo respetaran, pero tender que salir poco al principio, no puedo estar contenta después de algo así.- no era logico

- Vale - dije sonriendo, contento porque era lo que quería, que saliera con los demás, quería que tuviera amigos, yo tenía que quedarme ahí encerrado durante un tiempo, hasta que pudiera controlar la sed, pero ella tenía que salir y aprovechar más el tiempo. Me levanté para lavar la taza de café que había usado en el desayuno. - Podemos ver una película luego - comenté desde la cocina.

-Claro, hace días que no veo la tele- comente sonriendo, apunte un par de cosas mas a la lista de la compra y me levante para colgarla con una chincheta de la pared. Estaba mirando por la ventana cuando me vino el olor, era un vampiro... no, eran mas.- Viene un clan- le dije a Erik desde la puerta-. Hacia aquí- me puse bien el pelo, apartando un par de cosas de la puerta y atando al perro con la correa en la cocina.

- ¿Cómo un clan? - yo también lo había olido - ¿malos o buenos? - pregunté dejando el paño con el que me había secado las manos a un lado. Esperaba que fuera un clan bueno. Cogí su mano y tiré de ella para salir al porche, esa era nuestra casa, no me gustaba que hubiera gente dentro que no conocíamos.

-No lo se, lo veremos cuando lleguen- comente mirándole, el tiro de mi mano y salimos al porche una vez allí tire yo de la suya para alejarnos unos cuantos pasos mas de la casa. No tardaron mucho en aparecer, eran cuatro, dos chicos y dos chicas, una de ellas era muy joven, no tendría mas de los 15 años vampiricos.
-Vaya, vaya, una casita de vampiros. Con perro y todo- dijo uno de los chicos sonriendo mientras nos miraba- ¿Que tal? ¿ Alquiláis habitaciones?- pregunto con sorna
-Max, deberiamos irnos- dijo el otro chico y cuando le mire le conoci. Hacia 109 años, cuando era una neofita mi creador me habia obligado a hacer la peor cosa de toda mi eternidad: El.

Miré serio a los vampiros que se acercaron. Dos chicas y dos chicos. Después de haber conseguido salvar a Ashton y Gabriella me sentía un poco más seguro con mi don, y estando con Gabriella no tenía dudas de que podríamos parar a los cuatro si era necesario.
- Sí, será mejor que os vayáis - dije firme, atento a sus movimientos.

-Tu...- susurro el vampiro que había hablado primero mirándome y sonriendo un poco- ¿ella?- le pregunto a su compañero, el asintió con la cabeza- ¿Tu sabes lo que hice yo con mi creador?- me pregunto insinuando que matarlo.-
-Fue por que la obligaron- añadió rápidamente el vampiro- Y deberiamos irnos, yo estaba alli el dia que mato a nuestro creador, enserio Max, vamonos- dijo con miedo, las chicas no habian dicho nada.
-Haz lo de tu don, con tantos años como tiene debe de llevar muchas cargas y son dos, podemos divertirnos.- dijo el tal Max riéndose. Yo conocía el don del chico, me habían obligado a convertirlo porque también veía muertos, aunque el podía convocar a cualquiera, a todos los muertos que una persona hubiera conocido...

Miré a Gabriella de reojo un instante cuando contaron que ella había sido la creadora de uno de ellos, la habían obligado a hacerlo pero de todas formas.. me parecía algo tan grave. Dejé de pensar en ello en el momento en que el que iba de listo dijo que usara su don, usé yo el mío sobre el chico y se quedó paralizado al instante.
- No quiero tener que repetiros que os marchéis - dije serio, las chicas nos miraban un poco asustadas.

-¿Que coño...?- empezo a preguntar Max mirando a Erik y luego a su compañero que estaba paralizado.
-Ella es la chica de la que hablaba Jason- dijo una de las chicas- La que es capaz de tumbar a Jane y a Marco Vulturi y salir con un humano y con vida- añadio, recordaba ese dia y parecia que se habia corrido la voz- Y el es el humano, aunque poco humano- dijo ladeando la cabeza.
-Teneis que iros- les dije mirandoles.- Ahora.- añadi
.-No, ahora no, ¿Un cura?¿Quien conoce un cura muerto?- pregunto Max mirando detras de nosotros. Trague saliva cerrando un momento los ojos, no podia ser cierto.

- Sí, ahora sí - dije serio, empezaba a cabrearme, quería que se marcharan. Fruncí un poco el ceño y me giré cuando dijeron lo del cura, di unos pasos hacia atrás porque sí, detrás nuestra había un cura. Tiré del brazo de Gabriella para dejarla detrás mío.
- ¿Erik, querido? hay que ver, cuánto has crecido - miré hacia un lado siguiendo la voz y si todavía tuviera corazón, me habría dado un infarto, mi abuela había muerto cuando tenía cinco años pero ahí estaba.