Piso de Adam Brody

- Pues sí.. lo del color creo que me lo dijo Meg - comenté mirándole, me metí en la boca el último trozo de sandwich y cogí el vaso para beber un poco de agua y pasarlo mejor - que yo sepa a día de hoy eso aun no ha ocurrido - dije sobre lo del pacman, cogí una servilleta para limpiarme la boca - así que no vaciles tanto - le dije riendo un poco, suspiré y le miré, dejando la espalda apoyada en el respaldo de la silla - gracias otra vez - dije sonriendo un poco - voy a irme ya, para dejarte dormir tranquilo - comenté levantándome, cogí el vaso y el plato y lo llevé al fregadero para lavar las dos cosas rápido.

-Eh, no hace falta que lo friegues- comente mirándola y levantándome detrás de ella.- Y puedes quedarte por aquí si quieres, ya sabes que no me importa. Si necesitas un sitio donde quedarte tengo el sofá- si había venido a estas horas era porque le había pasado algo y podía que fuera en casa o con su hermana, como tampoco me había contado nada no estaba seguro.- Te ganare algún día al pacman, ya veras- añadí sonriendo después.

- Encima que te despierto y me como tu comida, dejo los platos sin fregar.. sí, claro - dije rodando los ojos, no tardé nada en lavar el plato y el vaso, los dejé a un lado y me sequé las manos con un trapo - no sé, no quiero molestarte más - dije mirándole, apoyándome en la encimera - está bien tener fe - le dije riendo un poco, dejando el trapo a un lado.

-Es verdad, eres mas mala que el joker- comente en broma mirandola- No me molestas, mira yo me acuesto y tu haces lo que te de la gana por la casa. En serio, no te sientas incomoda, como si fuera tu casa- añadi recogiendo el agua y dejando mi vaso en el fregadero.- Total, ya te has tomado la libertad de coger mi fregaplatos para lavar eso- añadi

- El joker en realidad no era malo, era un incomprendido - comenté mirándole - vale.. - le sonreí, me encantaba Adam, nunca hacía preguntas, no agobiaba, siempre tenía tiempo cuando le necesitabas - me quedaré en el sofá un rato, no me apetece ir a casa - dije mirándole - pero tu a la cama - dije poniendo mis manos en uno de sus brazos y empujándole para salir de la cocina.

-Vale, vale, yo me voy a la cama, mama- le dije en broma- ¿vas a venir a taparme?- pregunte divertido, dejando que me empujara un poco hacia el pasillo- Bueno, quedate el rato que te haga falta ¿vale?- le dije mirandola, parandome en la puerta del salon

- Claro, y a contarte un cuento - dije rodando los ojos, me paré a mirarle cuando él se quedó en la puerta del salón - vale.. gracias, otra vez - le dije sonriendo, fui al sofá y me senté en el. Esperé a que se fuera para apoyar los codos en mis piernas y dejar la cabeza entre mis manos. Estaba cansada y triste, tenía ganas de llorar. ¿Cómo podía haberme hecho eso? vale que no éramos nada, ni antes ni ahora, porque no habíamos hablado de eso, pero me parecía muy feo que mientras se había acostado conmigo, estaba acostándose con Alexa. Lloré un rato, en silencio, y sin darme cuenta acabé tumbada hacia un lado, y me quedé dormida.

Me desperte por la mañana y entre en el baño para darme una ducha y vestirme. Al salir al salon me di cuenta que Kath seguia alli, al final se habia quedado dormida en el sofa. Entre en la cocina y me hice algo de desayunar, me daba pena despertarla porque tampoco sabia a que hora se habria dormido, asi que me quede alli desayunando mientras veia la tele pequeña de la cocina.

Cuando me desperté y abrí los ojos me costó reconocer el lugar donde estaba. Me incorporé despacio y hasta que no vi la colección de películas y comics en las estanterías no me di cuenta de que estaba en casa de Adam. Me pasé una mano por la cara, me dolían un poco los ojos de haber llorado por la noche. Escuché algo de ruido en la cocina y me levanté para ir hacia allí.
- Buenos días - murmuré entrando dentro - me quedé dormida - dije rodando los ojos.

-Hola- le dije sonriendo cuando aparecio en la cocina- Sientate, toma, ¿te gustan los cereales?- dije pasandole el paquete que estaba sobre la mesa- Ahi estan los platos y las cucharas, sirvete tu misma, estas en tu casa- repeti como por la noche.- No te he despertado porque me daba pena- le explique- Estabas clarisimamente soñando conmigo, tenias una cara de felicidad- le vacile

- Sí, gracias - dije sonriendo yendo a coger un plato y una cuchara - claro, qué rabia haberme despertado.. era un sueño genial - comenté cogiendo la caja de cereales para echarme en el bol - tendré que echarme la siesta esta tarde a ver si puedo volver a ese sueño - comenté sentándome en una silla, eché un poco de leche en los cereales y lo removí para que se mezclara bien - tu seguro que has soñado que eres Spiderman.. como siempre - dije riendo.

-No, esta noche era Batman, los voy alternando. A veces soy Hulk, pero ese no mola tanto. No triunfa nada con las chicas- dije como si fuera un fastidio y me reí.- Aunque, y esto te lo juro, hace unas noches soñé que te ganaba al pacman y ahora no estoy de guasa, lo digo enserio- me rei.-No se lo habia contado a nadie porque se supone que se cumplen, ¿no? Ahora ya no te ganare…- me queje

- Es que la idea de un hombre muy grande y verde no atrae, pero Hulk cuando era normal tiene su punto - comenté riendo un poco - es inteligente, no es feo.. el problema es cuando se enfada - comenté mientras iba comiéndome los cereales - no todos los sueños se cumplen - dije mirándole - y que me ganes al Pacman algún día.. es poco probable - reí.

-Eres una cabrona- le dije riendome sobre lo del pacman- Yo soy tan listo como Hulk y soy mucho mas guapo, por eso el no liga y yo si- le vacile sonriendo un poco y segui desayunando los cereales, al terminar deje el cacharro en el fregadero y la mire.- ¿has dormido bien en mi sofa? Es cómodo... lo elige bien, porque muchas veces me sobo mirando la tele-

- Pues entonces pobre Hulk.. deberías dejarle ligar un poco - comenté riendo, afirmé con la cabeza cuando me preguntó si había dormido bien porque tenía cereales en la boca - muy cómodo - dije sonriendo, terminé lo que me quedaba y me levanté para llevar el bol al fregadero, y como la noche anterior me puse a lavar las cosas que había - me quedé dormida sin querer.. ya verás la que me va a caer cuando llegue a casa - aunque con un poco de suerte papá y mamá no se daban cuenta.

-¿Que haces?- pregunte mirandola cuando vi como se ponia a fregar los cacharros- No puedes ponerte a fregar, que es mi casa- me queje poniendome a su lado- Ala, ya me has obligado a ayudarte...- me queje mojandome las manos y dandole un pequeño empujon con la cadera para que se apartara y enjuagarle las cosas que ella enjabonara.

- Fregar - dije riendo - eh, que yo no te estoy obligando a nada - dije devolviéndole el empujón - son solo cuatro cacharros que si no estuviera fregando yo ahora se quedarían aquí hasta mañana - dije mirándole de reojo - ¿o no? - le iba pasando las cosas para que el las enjuagara - ya está - dije pasándole la última cosa. Alcancé un trapo y me sequé las manos, después se lo pasé a él para que se secara. - Voy un momento al baño, y te dejo tranquilo - comenté antes de salir de la cocina, tenía que arreglarme un poco por si mis padres estaban despiertos.

-Hasta mañana o hasta que venga mi madre el martes a ayudarme un poco- en realidad venia a limpiarlo todo y ponia la lavadora, desde que lo habia dejado con Rebeca venia y eso que yo antes hacia cosas de la casa, pero mi madre creia que sin una mujer esta perdido y yo la dejaba que las hiciera...- Vale- le sonrei cuando comento que se iba al baño y sali hacia el salon para encender la tele.

Me lavé la cara para quitarme los restos de maquillaje y me peiné un poco, aunque terminé recogiéndome el pelo en una coleta alta.
- Bueno.. ahora estoy más presentable ¿no? - dije mirándole cuando volví al salón - si mis padres no me matan, ya hablaremos - comenté cogiendo mi chaqueta para ponérmela - tenemos que quedar un día, te debo una cena y una comida - dije mientras terminaba de subir la cremallera y me ponía la mochila a la espalda.

-Vale, tranquila que me acordare, siempre me acuerdo de las deudas que tiene la gente conmigo y la tuya se ha convertido en una comida china y eso me gusta- dije riendome- Si ves que van a matarte, llamame o meteme en la herencia, dejame los puntos de mas del pacman, anda- le dije de guasa, acompañandola a la puerta.

- No, no - dije negando con la cabeza - quiero que en mi lápida pongan algo relacionado con lo buena e imbatible que soy al Pacman - dije abriendo la puerta - algo así como "te ganaré al Pacman hasta desde el cielo, Adam" - dije riendo, girándome a mirarle - tranquilo que tendrás tu comida china - dije sonriendo - nos vemos, Adam - dije saliendo de su casa. Bajé las escaleras andando, así tardaba menos y me fui directa a casa.

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Después de pasar la noche con Cook volví a casa. Allí no había mucho para hacer y mi madre pretendía que me sentara a comer y a ver la tele, pero en vez de eso subí a mi habitación y ordené algunas de las cosas que no me habían dado tiempo el día anterior. Entre esas cosas encontré algo y se me ocurrió que podía dárselo a Adam. Cogí el bolso y salí tras decirle a mi madre que iba a dar una vuelta. Como siempre me dijo que tuviera cuidado y no apagara el móvil. Desde que estaba embarazada nos tenía atadas un poco más en corto a Kath a mí. Le había dejado una nota a Kath en la habitación diciéndole que tenía que ir a hacer un recado y me llamara si quería algo, así que ya no tenía que dar más explicaciones a nadie y fui a casa de Adam, aunque ni siquiera sabía si estaría. Pasé al portal sin necesidad de llamar porque coincidió que salía un vecino. Subí a su piso y llamé a la puerta. Cuando me abrió sonreí un poco.
- Hola...¿estás ocupado?- pregunté mirándolo.

-Hola- dije mirandola, por un momento pense que era Kath porque no esperaba para nada ver a Meg por alli, pero la tripa la delataba totalmente.- No, bueno, estaba poniendo el lavabajillas, en el descanso del rugby- le explique señalando la tele y dejandola pasar.- ¿Pasa algo?- pregunte curioso, a lo mejor le pasaba algo malo y por eso estaba aqui, era muy raro.

Pareció sorprendido al verme, al principio no tando, pero después me miró bien y se le notó más.
- Ah- dije pasando cuando se hizo a un lado. Dejé el bolso en la primera silla que encontré y me giré a mirarlo-. No, no pasa nada, solo que...he estado pensando en ti- comenté mirándolo- y en mí...- suspiré-. Quería decirte que lo siento- había tenido dos meses para reflexionar sobre lo que había hecho con él. Lo había acosado totalmente y me había enfadado con él cuando la culpa de todo había sido mía-. No me he portado bien contigo...

Me asuste un poco cuando dijo que habia estado pensando en ella y en mi, eso me cagaba, basicamente porque no queria volver a pasar por lo de antes, tampoco queria no hablarme con ella como pasaba practicamente ahora pero joder... en aquella epoca se me desnudaba cada vez que me veia. Asenti cuando me pidio disculpas.
-No importa, nadie es perfecto, estoy seguro de que yo tengo que pedirte disculpas tambien por muchas cosas- le dije mirandola, ofreciendole con una mano que se sentara en el sofa- ¿Te apetece beber o comer algo?- pregunte- Aunque no tengo mucha cosa... desde que vivo solo apenas hago la compra- admiti riendome.