Casa Katherine y Megan Prescott.

Negué un poco con la cabeza, no tenía que llorar, pero no podía evitarlo, me sentía triste por ella y si encima ella lloraba también ya sí que no podía evitarlo. No sé cuánto rato más estuve llorando, mientras tanto intentaba pensar qué podíamos hacer, ella había dicho que no lo quería, así que tendríamos que ir al médico para que abortara..
- Lo primero.. es ir al médico ¿no? - dije mirándola, intentando no seguir llorando aunque del berrinche ahora me costaba respirar bien - para que lo confirme.. y bueno, si quieres interrumpirlo, supongo que nos dirán cómo o qué hacer.

Estuvimos llorando las dos en silencio, no sabía bien cuanto. Levanté la cabeza cuando la escuché hablar de nuevo, sabía que le costaba respirar porque a mi me pasaba lo mismo. Afirmé con la cabeza cuando dijo lo de ir al médico.
- ¿Vienes conmigo?- pregunté mirándola. No quería ir sola, me daba miedo hacerlo o lo que pudiera decirme...yo solo quería acabar con esto de una vez, me sentía fatal tanto física como emocionalmente.

- Claro que voy contigo - dije mirándola - ¿qué clase de pregunta es esa? - dije pasándome las manos por la cara, respiré hondo despacio y después me puse de pie, estirando mi mano hacia ella para ayudarla a levantarse - date una ducha ¿vale? yo voy a llamar para ver si podemos ir hoy - cuanto antes fuéramos mejor - y tranquila, lo solucionaremos - dije acercándome a darle un abrazo.

Me alcé un poco de hombros cuando me preguntó, levantándome después de que me diera la mano y pasándome las manos por la cara. Afirmé con la cabeza y conrrespondí a su abrazo, fuerte, la había echado mucho menos...y tenía que pasar esto para que volviéramos a hablarnos. Suspiré y me giré para abrir el grifo de la ducha, me desvestí y entré dentro. Me miré la tripa mientras me enjuagaba, no había mucha diferencia, yo solo la veía un poco más hinchada, muy poco, pero yo lo notaba...Salí de la ducha y fui a la habitación para coger algo de ropa, volviendo después de nuevo al baño para secarme bien y vestirme. Cuando terminé entré en la habitación de nuevo y miré a Kath.
- ¿Qué te han dicho?- pregunté mirándola preocupada.

Salí del baño y al llegar al cuarto me senté en la cama, me sentía perdida, no sabía qué iba a pasar ahora, Meg siempre había sido la más cuidadosa de las dos en todo, siempre lo tenía todo bajo control y ahora.. Cogí el móvil para llamar al médico, a ver si podía conseguir cita, por suerte tenían un hueco en una hora.
- Que vayamos dentro de una hora - dije mirándola - voy a darme una ducha rápida - le dije sonriendo un poco. Cogí ropa limpia y fui al baño para ducharme, por el pasillo me crucé con mamá que iba a hacer el desayuno. - Ya están despiertos - comenté cuando terminé y volví al cuarto, a lo mejor podíamos arreglarlo antes de tener que decirle nada a ellos.. esperaba que no necesitáramos dinero, porque apenas tenía nada ahorrado.

Hice mi cama y la de mi hermana mientras ella se duchaba, más que nada por mantener la cabeza ocupada, no quería pensar mucho en lo que ibamos a hacer.
- Ya, los he oído...- suspiré. Me temblaban las manos, tenía ganas de vomitar y de llorar a la vez. Salimos de la habitación y al bajar mamá nos preguntó si no íbamos a desayunar-. No, hemos quedado con Yon para desayunar- le puse como excusa, fue lo primero que se me ocurrió. A mamá le gustaba Yon, a papá no tanto, pero él no estaba en el salón ahora. Mamá solo sonrió y nos dijo que lo saludáramos de su parte. Salimos de casa y fuimos hacia el coche de mamá, hoy no tenía que trabajar así que cogíamos el suyo. Le di las llaves a Kath para que condujera ella, yo estaba demasiado nerviosa.
Cuando llegamos al hospital nos sentamos en la sala de espera hasta que nos llamaron. Entramos en la consulta y le expliqué al médico lo que me ocurría como si fueran los síntomas de un costipado, todo de forma mecánica, no quería que se notara mucho, no me gustaba que la gente me juzgara. Me dio un vaso para que orinara y entré al baño, después nos dijo que esperáramos fuera mientras analizaban la muestra. Al cabo de unos diez minutos nos llamó para que entráramos de nuevo y abrió un especie de sobre. Se puso las gafas y lo leyó con detenimiento, me miró y sonrió un poco. No supe qué tipo de sonrisa era, de lástima de felicitación...estaba demasiado ocupada pensando en "que sea negativo, que sea negativo", una y otra vez.
- Enhorabuena, va a ser madre- dijo finalmente mirándome-. Si es tan amable de tumarse ahí le haremos una ecografía para hacer una estimación...¿dice que tuvo el periodo el mes pasado?- preguntó mientras yo me tumbaba en la camilla y me subía la camisa y desabrochaba un poco el pantalon mirando de reojo a Kath, quería llorar otra vez. Asentí a su pregunta mientras miraba la crema esa por mi tripa, estaba bastante frío y no pude evitar encogerme un poco. Lo extendió bien y después puso el aparato sobre ella. Yo no quería mirar a la pantalla, así que miré al techo. Él parecía concentrado, porque no dijo nada en un rato-. Bueno, pues parece que estás aproximadamente de 12 semanas...- miré a Kath y después miré la pantalla- lo que has tenido no ha sido el periodo, a veces se pueden producir sangrados- explicó-. Parece que el corazón va bien- lo podíamos escuchar, iba bastante rápido-. Mira, esa es la cabeza...- dijo señalándolo- y eso son los brazos...y las piernas...- me miró y después miró a mi hermana.

Le dijimos a mamá que desayunaríamos con Yon para escaquearnos del desayuno, a mi no me iba a entrar nada y suponía que a Meg tampoco. Conduje el coche de mamá hasta el hospital y después de aparcar fuimos a la consulta. Nos llamaron casi al llegar y pasamos dentro. El médico le preguntó a Meg sus síntomas, le hizo una prueba de orina y después de esperar diez minutos nos volvieron a llamar. Me pasé una mano por la cara cuando confirmó que estaba embarazada, parecía que el suelo se abría debajo de nuestros pies. Me puse a su lado en la camilla cuando fueron a hacerle una ecografía y me quedé mirando todo el rato la pantalla, yo no vi nada hasta que el médico lo señaló pero sí que se podía oír perfectamente el corazón latiendo deprisa. El médico siguió explicando cada parte del cuerpo del bebé y después miró a mi hermana, como no dijo nada me miró a mi, pero tampoco me salían las palabras. Miré a Meg, ¿qué íbamos a hacer ahora, qué sería lo correcto?

Lo veía en la pantalla, pero no sabía como sentirme, solo quería acabar con esto de una vez...Sonreí un poco al médico cuando me miró, después de un momento incómodo. Nos dijo que era más pequeño de lo que debería, pero que no era algo de lo que preocuparse, a veces pasaba.
- Tienes que cuidarte y comer bien- comentó él mientras yo me vestía de nuevo. Cuando terminé lo miré.
- Yo...quiero...abortar...- dije mirándolo y después mirando a mi hermana.
- Oh...- dijo el médico mirándome-. Bueno pues...- desconectó la máquina y fue a un armario. Sacó unos folletos y me los dio-. Infórmate bien antes de tomar la decisión, muchas madres después se arrepienten- dijo mirándome primero a mí y después a Kath.

Me puse a un lado para que pudiera bajarse de la camilla, seguí mirando de reojo a la pantalla hasta que el médico desconectó el monitor. Cogí unos cuantos de los folletos que nos estaba tendiendo, pero no quería mirarlos, ahora no estaba tan segura de que eso fuera lo mejor.
- ¿Puede.. eh.. darnos una copia? - pregunté mirándole, él frunció el ceño como si no me entendiera - de la ecografía - dije señalando el monitor.
- Aah, claro - asintió yendo a la máquina para imprimir la ecografía, miré de reojo a Meg mientras se vestía y de nuevo al médico cuando se acercó para darme un par de copias, me quedé mirándolas, era un bebé tan pequeño.

Me puse en pie y cogí mi chaqueta para ponérmela, acercándome después a mi hermana y cogiendo los folletos que le había dado el médico, quería mirarlos bien. Miré a Kath cuando le pidió la foto de la ecografía, no sabía para qué quería eso. El médico la sacó y se la dio.
- Si finalmente decides quedártelo deberías venir a que te hagamos unas pruebas para asegurar que no hay ningún problema con el feto- asentí con la cabeza y me acerqué a la puerta para salir, quería irme de ahí y además...ahora tenía hambre.

- Si, me muero de hambre- prefería no pensar demasiado en lo que acababa de ocurrir y en lo que iba a hacer, yo no era partidaria del aborto, pero mi situación era extrema, ¿cómo iba a tener un bebé sin saber siquiera quien era el padre o cómo iba a cuidarlo?, yo dependía ahora de mis padres, no les podía cargar con algo así, además...en cuanto se enteraran me echarían a la calle, papá siempre hablaba mal de las chicas jóvenes que se quedaban embarazadas tan pronto. Fuimos a la cafetería que había frente al hospital y nos sentamos esperando a que nos atendieran, yo miraba la carta cuando Kath me preguntó. En ese momento apareció también el camarero-. Una tostada de manteca con mermelada y un vaso de leche- el zumo me estaba sentando mal. Esperé a que mi hermana pidiera y cuando el camarero se fue la miré-. Sí- afirmé con la cabeza- no puedo tenerlo Kath...- dije negando rápido ahora- ¿qué iba a hacer yo sola con un niño?.

Miré al camarero que apareció justo en ese momento, pedimos y cuando se marchó Meg dijo que estaba segura y que no podía tenerlo.
- No estarías sola - dije mirándola - quiero decir que.. bueno, yo voy a estar ahí siempre - comenté cogiendo la servilleta para doblarla mientras esperábamos a que vinieran con la comida - es que.. ¿lo has visto? - ya era un bebé - no sé si.. estaría bien hacerlo ahora, es un poco tarde ¿no?

- Kath...no podemos criar tu y yo a un bebé...- dije mirándola-. Mamá y papá no se lo tomarían bien, ya lo sabes- suspiré un poco-. Ni siquiera he terminado los estudios y...no se quien es el padre- ¿qué iba a hacer?-. No estoy preparada para criar un bebé Kath- dije mirándola-. Si, lo he visto...- había intentado no hacerlo pero al final lo había hecho-. Según esto...- saqué uno de los folletos para mirarlo, cuidando que no lo viera nadie- dice que puedo abortar hasta los tres meses...solo estoy de doce semanas...

- Ya- sabía como eran y que iba a ser una decepción para ellos, estaba segura de eso, no lo iban a soportar, sobre todo mamá...¿qué iba a hacer?, tenía que abortar-. Sí- afirmé con la cabeza- Lionel, Jackson y Cook- era con los únicos que había estado, en verdad con el que más Cook, pero siempre había tenido cuidado con todos y habíamos usado protección-. Malditos preservativos...- me quejé pasándome la mano por la cara-. Si...algo he leído- suspiré-. Solo quiero que esto acabe Kath...- negué con la cabeza-. Me siento muy mal...- tenía ganas de llorar todo el tiempo-. ¿Y qué hago?, no puedo ser madre- repetí-. Soy demasiado joven, no estoy preparada...- negué.

- Ya lo sé Meg pero.. no me malinterpretes, yo también quiero que se acabe - dije mirándola - quiero que tu estés bien.. pero.. ya lo has visto, y lo has oído, le latía el corazón Meg - puse una mueca hundiéndome un poco en la silla - a lo mejor.. podrías tenerlo y darle en adopción, o algo así - dije mirándola, no creía que estuviera bien que abortara ahora, en el panfleto ponía que lo normal era hasta los dos meses, había fotos detalladas de fetos de doce semanas en las que se veían todos los deditos y la naricilla..

- No lo se Kath...no lo se...- no sabía si iba a poder con todo: papá y mamá, el padre del niño fuera quien fuera, las miradas de la gente, el propio embarazo y el parto...- no se- repetí llevándome las manos a la cabeza. Miré las fotos del panfleto y después miré a otro lado, me sentía muy mal pensando en que lo iba a matar, pero...es que no sabía que hacer-. ¿Y si todos me odian?- pregunté mirándola- el padre me va a odiar...- no era un regalo de navidad precisamente- y papá y mamá...- negué con la cabeza.

- No te van a odiar - dije refiriéndome a nuestros padres - les costará aceptarlo al principio pero no van a odiarte Meg, eso es imposible - dije negando con la cabeza - es que.. creo que hay más contras que pros - dije mirándola - no sé qué decirte - suspiré mirando mi desayuno, cogí el sobre de azúcar y se lo eché al café - yo no te voy a odiar nunca - comenté mirándola de reojo.

- No lo se- yo estaba segura de que iba a ser una decepción, no es que les fuera a costar, es que ya nunca iba a volver a ser lo mismo si les decía que estaba embarazada-. Necesito...tiempo- dije mirándola- lo pensaré hoy y mañana decidiré que hacer- suspiré y miré la ecografía que el médico le había dado a Kath y después el folleto de aborto...todos esos fetos muertos, era una imagen impactante y yo estaba un poco sensible desde hacía unos días. Cogí mi vaso de leche y le di un traguito, después le di un mordisco a la tostada, tenía muchísima hambre.

La miré y suspiré cuando dijo que necesitaba tiempo, eso era lo que menos tenía, porque el bebé iba a seguir creciendo dentro de ella.
- Vale - dije mirándola - de todas formas, es decisión tuya.. yo te apoyaré sea lo que sea que decidas - le dije sonriendo un poco. Cogí la taza de café y di un sorbito, la dejé en la mesa y empecé con las tostadas.

- Gracias...- dije mirándola, ya estaban a punto de salirme las lágrimas otra vez, la había echado de menos- necesitaba que tu estuvieras conmigo- suspiré un poco y le di otro traguito a mi vaso. Después de desayunar fuimos a casa y actuamos como si no hubiera sucedido nada, o al menos lo intentamos, a mi me costaba bastante más que antes, además estaba incómoda, porque aunque la tripa no se notaba casi nada yo sentía los pantalones demasiado ajustados y me molestaban. Me fui pronto a acostar, porque me moría de sueño, era otra de las cosas que notaba, estaba cansada todo el tiempo. Por la mañana me desperté y sin hacer ruido me puse a ordenar un poco la habitación, nada más que por entretenerme. Me había pasado todo el día pensando y casi toda la noche, estaba bastante cansada y no me apetecía seguir pensando, así me distraía un poco.

Me pasé la tarde en el cuarto con Meg, haciendo cosas de las prácticas y el vago. Llamé a Justin para ver cómo se encontraba de la resaca, para bromear un poco con él. Me apetecía verle pero ahora Meg me necesitaba. Nos fuimos a dormir pronto pero me costó mucho rato dormirme, no podía parar de pensar en lo del bebé.
Me desperté por la mañana al escuchar movimiento en la habitación. Abrí un poco los ojos y vi a Meg recoger. Suspiré estirándome despacio.
- Buenos días - murmuré quedándome tumbada, mirándola desde la cama - ¿qué haces?

Pensaba si ir o no a desayunar, me daba un poco de miedo por si me daban ganas de vomitar otra vez, por las mañanas era horrible. Miré a Kath cuando me dió los buenos días.
- Buenos días- respondí sentándome en la cama y mirándola-. Recoger un poco- comenté mirando alrededor y suspirando- no quiero seguir pensando en...ya sabes- me alcé de hombros-. No he podido dormir...- suspiré-. No lo voy a hacer- dije sobre abortar. Había estado echando un vistazo a los folletos al levantarme y había buscado también un poco en internet-. Lo daré en adopción- no podía matarlo- pero tengo miedo...

Me incorporé cuando se sentó en la cama, pero quedándome debajo de las mantas, crucé las piernas como los indios y me quedé mirándola cuando dijo que no lo iba a hacer y que lo daría en adopción. Suspiré mirándola y le sonreí un poco.
- Tranquila - dije pasando una mano por su brazo - todo va a ir bien - dije mirándola - yo voy a estar contigo - también tenía miedo pero no se lo iba a decir - creo que haces bien - abortar ahora estaría mal, ya era casi un bebé y podía afectarle a la salud.