Casa vecina de Hugo

- Sí.. todo termina por pasarse - dije suspirando, miré a Jota cuando pasó su mano por mi flequillo - Jota, no eres un mal consolador - le dije mirándole ir hacia la puerta - gracias - le dije sonriendo un poco - yo creo que también voy a irme a dormir - le dije a Martha girándome hacia ella - mañana me dolerán los ojos - me quejé pasándome una mano por la cara, la sonreí un poco y la abracé - gracias a ti también - dije antes de separarme.

- No, te debo muchas de estas...me olvide de que es lo que tienen que hacer las hermanas- suspire colocando el cepillo en la mesa y sonriendole para que se fuera a la cama. Cuando se fue me pase las manos por la cara. Me encontraba mal, con lo de Silvia, lo que Jota le habia dicho a Alex, el hecho de sentirme ridicula por tener miedo a un estupido medico, el recordar los momentos en la otra casa en los que me escondia de Max y el sentirme impotente por no poder hacer nada para que Lucy se sintiera mejor y que Hugo volviera a ser el que era...todo estaba mal. Se me escaparon unas lagrimas que quite enseguida. Yo no podia llorar, yo no, era Martha Higareda y me habia propuesto no derramar una lagrima mas por nada. Me levante cansada y me acoste en la cama tal y como estaba, sin cambiarme de ropa. Esa noche me desperte varias veces porque Silvia hacia lo mismo llorando. A la mañana siguiente me levante como siempre y ayude a Margo a preparar el desayuno.

Me metí en la cama en cuanto entre en la habitación, la noche se me iba a hacer súper corta y mañana no sería capaz de levantarme para los abdominales y las flexiones, aunque finalmente lo hice, un poco más tarde que de normal. Después salí al salón para ir hacia la cocina.- Buenos días preciosas. – les dije a las chicas al entrar, sonriéndoles.

Me costó un montón dormirme pero al final lo conseguí. Abrí los ojos por la mañana y suspiré mirando el techo, me incorporé mientras me frotaba los ojos, me dolían de haber llorado, y seguro que los tenía super hinchados. No quería levantarme, pero no podía tirarme todo el día en la cama, así que terminé levantándome de la cama. Después de ir al baño fui a la cocina.
- Buenos días.. - murmuré al entrar, me fui a sentar en mi sitio y miré a Margo cuando me puso un plato de fruta delante, suspiré y lo cogí, normalmente no tenía hambre pero en ese momento tenía mucha menos hambre que nunca, pero como no quería ponerme a discutir empecé a comer despacio.

- Buenos dias- salude a Jota cuando salio de la habitacion, al poco rato aparecio tambien Lucy, era muy raro que ella se levantara tan temprano, pero seguramente estaria mal y no habia podido dormir bien. Me sente en la mesa para comer yo-. Tenemos que ir a comprar- dije suspirando-. A ti se te estan acabando los cereales- le dije a Jota mirandolo y despues mire a Lucy- ¿quieres venir?- le pregunte. Margo tendria que quedarse con Silvia, porque estando mala no la iba a sacar de casa con el frio que hacia-. Ademas aprovechare para comprar lo que el medico me dijo para la niña...- suspire mirando a Lucy, se la veia mal, ni siquiera habia protestado por la comida-. Tambien podriamos comprar algo de ropa- a ver si asi reaccionaba un poco.

-Guau, aquí está mi tercera preciosa- comente mirando a Lucy cuando se sentó en la mesa- Os lo digo antes de que venga Peter, que luego quiere matarme con la mirada- sonreí cogiendo n vaso para poner zumo y después echarme cereales en otro.- ¿a comprar?- dije a modo de queja, ir a comprar era un rollo.

Me encogí de hombros cuando Martha me preguntó si quería ir, me daba igual, no tenía nada que hacer, nunca tenía nada que hacer, y ahora tendría menos que hacer, porque no tenía ni novio.. suspiré y pinché un trozo de manzana para llevármelo a la boca.
- ¿Ropa? - pregunté mirando a Martha - ¿cuánta ropa? - antes no teníamos que andar controlando, yo tenía una tarjeta de crédito con la que podía comprarme todo lo que quería.. y ahora, hacía tanto tiempo que no me compraba nada - ¿puedo comprarme tres cosas?

- Puedes comprar lo que quieras- le dije mirandola, parecia que habia reaccionado y si comprando se sentia mejor...ya reduciria costes de alguna otra cosa-. Entonces vamos de compras ¿no?- sonrei un poco-. Y tu necesitas unas zapatillas de deporte nuevas- le dije a el- ¿Has visto como tienes las otras?- me sentia como su madre dios, ¿el no se daba cuenta de esas cosas o que?-. En fin...¿tu vas a querer venir?- le pregunte a Jota, habia dicho lo de la compra de una manera que no veas, sabia que no le gustaba hacerlo y a mi me daba igual porque ibamos a estar tambien de tiendas de ropa. Mire a Margo-. Tienes que quedarte con Silvia- le dije.

-Si, yo creo que debería comprarme algo de ropa… pero me da miedo porque luego me criticáis- dije riendo, pero cuando vi que a Lucy le emocionaba lo de las compras me lo pensé- ¿Os apetece comprar mi ropa?- dije riendo- Te dejare elegirla Lucy, toda… yo os llevo, me quedo por allí revoloteando- fugándome a probar todos los juegos nuevos en la tienda de videoconsolas- y vosotras compráis.-

¿De verdad iba a poder comprar lo que quisiera? afirmé sonriendo un poco cuando preguntó si íbamos de compras, hacía tanto tiempo que no me compraba más de tres cosas de seguido.. Miré a Jota sin creérmelo cuando dijo que comprara toda su ropa, me encantaba ir a comprar ropa para mi pero casi más ir a comprar ropa para otras personas.
- ¿Enserio? - pregunté mirándole, mirando después a Martha - ¿cuándo nos vamos? - pregunté sonriendo, iba a tener que deprimirme más a menudo..

- Te arrepentiras de esto- le dije a Jota riendome-. Yo que tu no le daba la mano, la conozco y como te descuides te cogera hasta el pie- lo avise. Queria que no estuviera mal, no malcriarla, pero en fin, tampoco era algo que hicieramos todos los dias-. No me vengas llorando luego cuando coja una camisa que no te guste- le dije riendome. Margo parecia contenta, paso por el lado de Lucy y le di un beso en la cara.
- Yo me encargo de Silvia, vosotros salid- nos dijo mirandonos y quitando algunas cosas de la mesa.
- Pues si quereis en cuanto acabemos de desayunar- les dije a los dos-. Si pasa algo con la niña me llamas- le dije a Margo mirandola seria, no me quedaba tranquila dejando a Silvia, pero tampoco podia sacarla y si no sacaba a Lucy estaria depresiva toda la tarde-. Pero desayuna con tranquilidad que las tiendas no se van a ir de donde estan.

-No creí que te fuera a hacer tanta ilusión…- comente riendo- ¿Puedo poner un par de normas?- les dije después, terminándome el zumo- Nada de pantalones de pitillo, ni camisetas rosas… tiene que ser ropa a mi estilo, aunque sea bonita- les dije, aunque miraba a Lucy. Le sonreí y me levante- Y necesito algo para salir a correr, cuando llegue el buen tiempo me iré a la playa… un bañador- dije antes de salir de la cocina- Y no puede ser de flores- añadí por el pasillo riendo para ir a por la chaqueta.

- A tu estilo de viejo.. - comenté rodando los ojos, lo de las camisetas vale pero lo de los pantalones.. con lo bien que le quedarían, suspiré - las flores están pasadas de moda - dije alzando la voz para que me escuchase cuando salió de la cocina - ¿quieres que te compremos algo Margo? - pregunté mirándola, había empezado a fregar los platos, miré el mío, ya no quería más - podemos comprarle algo a Silvia - le dije a Martha sonriendo y me levanté para ir a ducharme y a vestirme - no tardo - dije saliendo de la cocina.

- Vale...- mire a Margo un instante, ella me miro alzandose de hombros-. No, si ya- suspire y me levante de la silla terminando de darle lo que faltaba. Fui al salon y coloque tambien un poco por alli-. Dame la lista Margo- le pedi mientras terminaba, busque las llaves del coche-. Jota, ¿tienes tu las llaves del coche?- se las habia apropiado y ahora nunca las encontraba, siempre las tenia el. Me acerque a su puerta y le di unos golpes-. Jota, que si tienes tu las llaves te digo- rode los ojos cruzandome de brazos delante de la puerta esperando a que asomara por lo menos un trozo de el y me diera las llaves.

-No tengo estilo de viejo- le dije asomando la cabeza por la puerta de mi habitación cuando ella salió al pasillo. Después cerré y empecé a cambiarme de ropa, suspire y rodé los ojos cuando Martha pregunto si sabia donde estaban las llaves. Me termine de abrochar los pantalones y abrí saliendo al pasillo mientras metía la cabeza por la camiseta para ponérmela.-Estan en el cajón de la entrada, exactamente donde anoche y donde siempre…- dije riendo- Es un buen sitio para saber siempre con exactitud donde las has puesto.-

Fui al cuarto para ver qué me ponía y con la ropa fui al baño, me di una ducha rápida y me maquillé un poco para que no se notará que había estado llorando por la noche. Dejé el pijama en la habitación y cogí el bolso, cogí el móvil de la mesita y miré a ver si tenía alguna llamada, pero nada, suspiré y lo metí en el bolso.
- ¿Nos vamos ya? - pregunté colocándome el flequillo con una mano.

- Claro, pero ultimamente no se donde estan nunca- dije suspirando. Cogi las llaves y espere a que Lucy saliera- Guau, que rapidez...la proxima vez que quiera que vayas asi de rapido ya se que usar- me rei-. Si, nos vamos ya- cogi la lista que me tendia Margo en la mano. Abri la puerta y sali colocandome el abrigo y sacandome el pelo de por dentro. Llame al ascensor y cuando subio nos montamos. Una vez en el aparcamiento me monte en la parte del conductor y espere a que ellos montaran regulando los espejos y el sillon del coche para mi altura.

-Eso ya no es mi culpa, eres tu que no sabes dónde mirar- el dije a Martha levantando las manos, me puse la chaqueta y salimos. Cuando llegamos al coche nos subimos y Martha condujo hasta el centro comercial.- Es el único sitio de ocio de Frost que todavía no he visitado- les dije riendo mientras bajamos del coche.- Bueno, vamos a que la señorita Lucy deje temblando nuestras tarjetas- rei mirandola

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El mes paso rápido, Lucy seguía triste por lo de su novio y yo odiaba ver así a cualquier chica así que la intentaba sacar de casa siempre que salía yo, que últimamente era mucho. Me había dado cuenta que casi siempre que salía mojaba, asi que salía siempre. Esa noche le dije que se viniera conmigo y como no tenía planes acepto. Al principio pensé en las carreras, pero no le iba molar, así que iba pensando mientras me abrochaba la chaqueta y abría la puerta del piso para que saliera.
-A ver… ¿Vamos a un pub que hay aquí cerca? Sé que no te mola andar…- y no llevábamos coche

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Tenía la suelta de los zapatos rota, asi que me los quité y los tire por ahi, no los necesitaba, llevaba días caminando, no sabia donde cojones me habian encerrado, solo sabia que iba a buscar a Lucy, ahora andaba, podia hacer cosas utiles, matar mucho mejor, dar palizas hasta romper el ultimo hueso de cualquier cuerpo....Lucy volveria conmigo, ahora si, era mia, lo sabia todo el mundo, claro que mi mundo era ella, no sabia bien donde ir, pero parecia que podia olerla, Lucy tenia algo especial, una atraccion que me volvia loco, era capaz de hacer por ella lo inimaginable, como volver a andar, Marta se pasaba el rato dandome la murga cada vez que venia a verme, que tenia que moverme y salir de alli, fue facil, un dia sali de mi celda, y me dispuse a salir, unos tipos me impidieron el paso, no se por que, tuve que reducirlo todo a ceniza, como habia echado de menos el olor a gasolina, ahora si volvia a ser yo, tanto tiempo sin matar habia despertado en mi a un Hugo mucho mas impredecible.
- Soy yo, si no abres la puerta me voy a cabrear y voy a quemar tu casa, y a tu hija, luego me comere la carne chamuscada de tu hija, y los huesos se los dare a tu lameculos de turno.-para mi que esta era la casa que me habia enseñado una vez en una foto, que puta mania con hacer fotos de esas, las odiaba, pero ella se pasaba el dia contandome cosas, algunas las recordaba, y eso que nunca la prestaba atencion, o si, no, no, yo solo prestaba atencion a mi Lucy.-

Estaba jugando con Silvia cuando empece a escuchar voces, la deje en su corralito y fui a abrir la puerta con la pistola en la mano.
- ¿Pero tu de que coño vas?- le pregunte a Hugo de malas maneras cuando lo vi, me alegraba de verlo-. Mueve tu culo- me hice a un lado y lo deje pasar-. Como vuelvas a decir eso de mi hija te corto la lengua.

Entré y fui hasta donde estaba la cria, era como una MArta en pequeño, tenia su genio, no se, no me gustaban esas cosas pequeñas y pringosas, solo berreaban y no eran utiles, no sabia por que la tenia en brazos y la dejaba que me tirara del pelo.- huele a rico.- la cria olia bien.- tu hueles a perra.-la mire y me rei, no me gustaba apreciar a la gente, pero con Marta me costaba disimular cada vez mas.- quiero a Lucy, dile que venga, nos vamos, supongo que se querra casar y esas cosas, un dia me aburria en la carcel esa que me metiste, y le hice leerme a un tio una revista de esas que le gustan a Lucy, ponia que las chicas de su edad sueñan con casarse, comprale un traje, el que quiera, no tengo dinero ahora, lo pagas tu.-me ponia loco que la cria me tirara del pelo con tanta fuerza, me hacia daño, me gustaba esta cria.-

Entro y cogio a Silvia en brazos, la niña lo miraba curiosa, se reia y le daba pellizcos y cosas, era Hugo, asi que me daba igual. Me alce de hombros y me sente en el posabrazos del sofa.
- Lucy ahora no esta, no se donde puede estar ahora mismo, asi que vas a tener que esperarla aqui, y quita esa cara de loco o saldra corriendo, te recuerdo que hace mucho que no la ves- me cruce de brazos mirandolo-. Y deja de decir payasadas, Lucy no se va a casar contigo- rode los ojos.

-Te voy a partir la boca, y asi dejaras de decir gilipolleces, Lucy es mia, hara lo que yo diga, - alce a la cria para mirarla mejor.- es grande, me gusta, dejamela.-seguramente Marta le cantaria canciones como le hacia a Lucy y le pondria vestidos raros.- no es una muñeca, no es Lucy, tu la haras debil, yo no, tu puedes tener mas, ¿donde esta tu perro?.-los crios necesitaban un padre para nacer, eso lo tenia claro.- dime donde esta Lucy y yo voy, será facil encontrarla, llevo caminando dias en busca de ella ¿tienes algun arma? yo tenia una bolsa con mis cosas pero no se donde esta....solo conservo esto.-deje a la crcia sobre uno de mis brazos y con la mano libre saque una foto de la chaqueta, eran unas que nos hicimos en un viaje, de cabina en tres minutos.- quiero comer

- Que plasta eres- dije rodando los ojos, pero me alegraba de que volviera a ser el, lo habia hechado de menos-. Margo, hazle algo de comer a Hugo...- ella se asomo asombrada, lo miro de arriba a abajo, sonrio y volvio a la cocina-. Para el carro- comente mirando a la niña, la movia como un juguete, pero no me preocupaba porque sabia que no la iba a dejar caer ni nada, y ademas ella se lo estaba pasando pipa, se estaba riendo a carcajadas-. Lucy hara lo que quiera ella, deja de hacer el imbecil, esperate a comer, y espera a que venga- suspire-. Te dije que heche a Alex- es que no me escuchaba-. No necesita padre, y ya ves que debil no esta, Y NO PIENSO TENER OTRO, asi que es mia.