Casa vecina de Hugo

- No hace siempre frio, hoy lo hace porque estamos en invierno aun- le dije mirando hacia abajo. Silvia miraba tambien y nos miraba a nosotros dos.
- Ota- dijo mirandome.
- No esta nena- le sonrei- ha ido a hacer unas cosas- le coloque bien el pelo y mire a Hugo-. Deja a Lucy, te he dicho que no la presiones Hugo- suspire-. Deberias hacerte un lavado de cerebro, te hace falta- rode los ojos y volvi a mirar hacia abajo-. Quedate, no seas idiota- le dije mirandolo- aqui tienes mas posibilidades de estar cercca de Lucy- a mi eso me daba igual, yo lo que queria era que se quedara, me hacia falta, lo hechaba de menos-. Y podremos planear como matar a Max.

-No la presiono, es mia, todo el mundo lo sabe, y el que se ha enterado tarde esta criando malvas por no informarse de lo que es de Hugo no se toca, ni se mira ¿que es Ota? ¿quien esta haciendo cosas? no se si me quedo, me voy o me vengo, hago lo que me apetece, segun el viento que me de, no puedo evitar ser asi

- Ota es Jota, ella lo dice asi- lo mire y resople-. Ahora eres filosofo- seguro que ni sabia lo que era eso-. Anda ya- bufe-. Deja de decir tonterias, no eres Dios, Hugo, hay gente que no te conoce- cogi la manita de Silvia acariciandosela con uno de mis dedos-. Y parece que todo el mundo sabe que Lucy es tuya menos ella, porque no te hace ni caso- ni siquiera habia intentado verlo.

Dejé a la cria con cuidado en el suelo, sentada nos miraba, al uno y al otro, asi parecia traquila, le di un empujon a Martha lanzaandola lejos de Silvia y me abalance sobre ella.
-Si vuelves a repetir eso va a ser lo ultimo que digas, no me gusta que se metan en mi vida, para pronunciar el nombre de mi Lucy te lavas la boca ¿lo entiendes? es facil,-joder como me estaba gustando tener a Martha debajo.- Lucy está loca por mi, la culpa es tuya, que le dices que no le convengo, pero eso va a acabar.-dios que cuello, me parecia tan facil partirselo que se me hacia la boca agua.- la culpa de lo que me pasa es tuya

- Es ella la que no quiere saber nada de ti- le escupi las palabras riendome y mirandolo a los ojos- a mi me da igual que esteis o no juntos- mentira, preferia que estuviera con el que con cualquier otro, pero eso no se lo iba a decir y menos ahora- se que no te gusta que te toquen los huevos, pero mira donde esta mi pierna- la levante un poco mostrandole donde la tenia puesta. Me rei otra vez mirandolo, me hacia gracia la situacion, aunque tenia una cara un poco rara, parecia que estaba cachondo o algo.

-Si me tocas los huevos te corto la pierna y se la doy de comer a los cerdos,-apreto la pierna contra mi.-no vas a conseguir que grite, nunca doy ese placer cuando me torturan, tu lo sabes mejor que nadie, lo has intentado siempre sin exito.-bajé una de mis manos a su pantalon y tire hacia abajo fuerte para bajarselo como pude.- yo si se hacerte gritar Martita, yo no tengo nada que perder ¿y tu?.-apretaba mi cuerpo contra el suyo para inmovilizarla.- yo si que se como te gustan las cosas

Cuando me bajo los pantalones deje de reirme y lo mire desafiante, como se le ocurriera le cortaba los huevos. Mire a Silvia desde donde estaba y despues lo mire a el.
- Yo tampoco grito- sonrei con ironia recordando las veces que me habia violado Max, nunca gritaba, no queria darle esa satisfaccion. Lo pense por un momento- Lu-cy - le dije sonriendo- puedes perder a Lucy como metas lo que no tienes que meter donde no lo tienes que meter- lo avise- y tus huevos- añadi- tambien perderas tus huevos...el lado positivo, es que no tendras problemas con nadie te los vuelva a tocar- lo mire seria ahora-. Ahora subete de encima mia- porque Silvia nos miraba fijamente a los dos.

Bufé y me levanté, me puse bien la ropa y fui a coger a la cria del suelo, se puso contenta cuando lo hice y empezo a tirarme del pelo mientras hacia ruidos que no entendia que querian decir.
- No meto mi cacharro ahi ni loco, se me pudriria.-sonrei sarcasticamente.- estaba a punto de partirte el cuello, no pensaba en follarte, estas enferma.-le extendi un brazo para que se agarrara y se levantara.- tu eres muy zorra, pero tendre que buscarme otra mas que tu, estas acostumbrada a que todos los tios quieran lo mismo de ti, yo no soy como los demas, solo que me gusta atacarte por que sabes como hacerme daño y eso me gusta ¿no me vas a dar una paliza?.-no queria metersela, pero si tenia que hacerlo para que me diera una paliza de las grandes lo haria, me sentia raro sin dolores de cuerpo ni magulladuras.-

- Mas te vale, es lo mejor para la salud de tu polla- le dije mirandolo seria, me subi los pantalones y mire a la cria, despues volvi a mirarlo a el de reojo-. Si es que quieres conservarla claro- sonrei con ironia-. Hugo, se que no buscas de mi lo mismo que los demas- le dije manteniendo la sonrisa. El lo que buscaba era provocarme para que le pegara, y ya de paso desfogarse porque estaba cachondo, pero las cosas no iban asi, yo no me iba a follar al ex-novio de mi hermana-. No voy a meterte una paliza con mi hija en brazos- dije mirandola, se lo estaba pasando muy bien con el, coloco su mano en la cara de Hugo y empezo a darle tortazos pequeños-. Podriamos...coger practica- le dije cruzandome de brazos-. Hace tiempo que no me peleo con nadie, y hacerlo contigo es mucho mas satisfactorio porque no me va a importar meterte una paliza como tu dices- me rei-. Tal vez podriamos usar cuchillo...- hacia tiempo que no lo haciamos, hechaba de menos esas cosas.

No habia terminado de hablar y me meti dentro de casa en busca de cuchillos o algo que causara mucho dolor y heridas profundas, rebusque por todos lados y Margo no paraba de ir detrás de mi maldiciendome y diciendome que me fuera al infierno que es de donde no tendria que haber salido nunca.
Me encontre con una cosa peluda, la cogi del pescuezo, se me revolvio, me araño y lo lancé contra la pared, no me gustaban las ratas, y menos si no me atacaban como dios manda. Segui buscando hasta que encontre armas de todo tipo, cogi dos cuchillos bastante grandes y bien afilados, armas de fuego no, que luego me echarian la culpa de los agujeros de las paredes y me tendria que marchar unos dias hasta que se les pasara el enfado, no mme gustaba vivir con mujeres por esas cosas.
-Este para ti.-le lancé el cuchillo entre los pies, con firmeza pero no la suficiente para clavarlo en el suelo.- soy muy malo con los cuchillos, tiramelo tu a mi ahora a ver si eres capaz de darme,-rompi la camisa para dejar mi pecho al descubierto.- no te he follado por que se que solo te gusta como te lo hace Max.-si se cabreaba mucho igual me arrancaba un buen trozo de carne.- puta, o no, la puta de Max, como el te llamaba siempre

Lo segui con la mirada y le di a Margo a la niña cuando me tiro el cuchillo al suelo.
- Sacala de nuestra alcance- le dije a Margo sonriendo. Ella empezo a protestar diciendo que estabamos locos, nos ibamos a matar y un monton de cosas de las suyas, ni que fuera la primera vez-. ¿Quieres provar mi punteria?- le dije riendome. Cogi el cuchillo del suelo y antes de incorporarme totalmente se lo lance clavandoselo en el hombro. Le habia dado ahi a posta, si fuera otro se lo habria tirado directo al pecho. Me acerque a el y le saque el cuchillo del hombro con fuerza, pase el dedo por un poquito de sangre que le salio y me lo meti en la boca- se me habia olvidado como sabia- le dije riendome y hechandome hacia atras antes de que pudiera alcanzarme el con su cuchillo-. Vamos Huguito...

Mire mi hombro y a ella chuparse el dedo, yo no estaba bien, me estaba poniendo a cien mil por hora y lo peor era que cuando empezaba no podia parar.
La cogi rapidamente del brazo, la atraje hacia mi, le hice una llave dandole la vuelta y poniendo su espalda contra mi pecho, le puse el filo de mi cuchilllo por el cuello y empece a acariciarla con el.
- Sabe a muerte, por que vas a morir, disfrutala por que es lo ultimo que vas a probar, me quedare con tu hija, y la haré mia cuando crezca un poco mas, yo seré su papaito igual que Max lo era contigo ¿la estas educando asi? ¿para que sepa por donde tiene que pasar si no quiere morir?.-me rei sarcasticamente, aprete un poco el filo del cuchillo hasta que le salio sangre, la tire al suelo y la cogi de las piernas arrastrandola como podia por que no paraba de moverse.-si no te estas quieta te tiro por el balcon, pelea bien.-le di una patada en su entrepierna bastante fuerte mientras seguia riendome.- papá se va a enfadar conmigo...Hugo malo

- Aggg, seras hijo de puta- le dije en español. Meti los pies entre los suyos y tire haciendolo caer al suelo, aproveche el momento para agarrarle el brazo y retorcerselo con fuerza haciendo que soltara el cuchillo, incluso escuche un "clack" y le meti una patada en la cabeza, le tenia que haber dolido porque le di con el tacon, le pegue una patada al cuchillo para alejarlo y le di un codazon en el costado para que la mano que tenia libre la ocupara ahi. Me levante rapido pisandole la mano dañada y empece a meterle patadas con la otra, fuertes. No iba a hablar asi de mi hija, por mucho que fuera Hugo, lo mataba antes, mi hija era sagrada. Me aleje un poco y me pase la mano por el cuello, tenia un poco de sangre, despues volvi y le meti otra patada en las costillas- mamon- le escupi y me agache a coger el cuchillo.

-¿ya?-me dolia todo, tenia bastante sangre, la olia y me gustaba, pero queria mas, la agarre del tobillo para tirarla al suelo, me levante, y empece a darle patadas, me dolia un poco la cabeza, y no veia bien por un ojo.- ¿sabes que el ultimo tiro que me han pegado ha sido el de la espalda?.-la deje y me sente en el suelo mirando al cielo.- ese si me jodio, pensaba que nunca mas volveria a tener piernas, mira que me han metido balas en el cuerpo pero ninguna tan mala como esa.-pensaba en aquellos tiempos.- ¿tu crees que Lucy me quiere? dime la verdad, no te voy a pegar mas, estoy bien mirame.-yo siempre estaba igual y ella lo sabia pero bueno, a la gente le tranquilizaba oirme decir eso.- ¿tiene novio? no me importa eh, si tiene me alegro,-solo necesitaba saber su nombre y donde encontrarle, no me importaria matarlo, desde luego que no, me lo iba a pasar en grande desgranando al cabron que se le hubiera ocurrido meterse en lo que era mio.-

Intente que dejara de meterme patadas pero tenia mas fuerza que yo, de golpe paro y se sento, estaba como una cabra, me gustaba, era Hugo. Le meti un codazo por la cabeza. Y me sente a su lado mirandolo con una ceja levantada.
- No lo se Hugo- rode los ojos-. Hace mucho que no me habla de ti, no quiere tocar el tema- resople-. Y no, ahora no esta con nadie, y si lo estuviera no te lo diria, porque serias tan imbecil de querer matarlo y perderias a Lucy definitivamente, asi que deja de decir memeces- lo mire-. Y lo de que no me vas a pegar mas...- me rei a carcajadas- no te lo crees ni tu- preferia que estuvieramos asi a que estuviera como cuando habia ido a verlo, que parecia un loco, ni siquiera pestañeaba.

-Entonces....-miraba al suelo y con un dedo hacia dibujos por el suelo.- no habla de mi.-dije despues de un silencio.- no siente nada por mi,-otro silencio.- de todas formas no tienes que dejar que salga por ahi y este con hombres, ni siquiera sabe usar un arma, es mas, ni siquiera le gustan.-nunca entendi eso, pero bueno, un arma era lo mejor que existia.- los hombres siempre se aprovechan de las mujeres, ella es muy pequeña, no sabe nada de la vida, deberias contarle tus experiencias con los hombres, tu no eres como las demas, eres fuerte, eres como un hombre, ademas haces cosas por mi raras, vas a verme, me hablas, me recuerdas a tu madre, te pareces mucho a ella, me gusta pegarte por que siempre sabes como joderme y sacarme de mis casillas, eres buena peleando, igual deberias coserme la herida del hombro, puta mas que puta, no deja de sangrar, mueve el culo y trae aguja e hilo.-habia dejado hace rato de mirar al suelo para mirarme la herida, no queria mirarla a los ojos despues de decirle todo aquello, ojala no se lo hubiera dicho nunca.-

- Ella no es como nosotros Hugo- dije mirandolo de reojo y mirando despues al suelo- no podemos encerrarla para que este segura, ya lo intente en su momento y no funciono, ella lo sabe todo y aun asi le da igual...- negue con la cabeza-. No he dicho que no sienta nada por ti, solo que no habla de ti- yo si pensaba que seguia sintiendo algo, despues de todo lo que habian aguantado para estar juntos...- Cierra la bocaza de una puta vez- le dije cuando empezo a llamarme puta-. Que yo soy puta tu eres un cabron- me levante y fui a buscar la aguja y el hilo. Sonrei mientras lo sacaba del mueble pensando en lo que me habia dicho y me vinieron a la cabeza todas las cosas que habiamos pasado juntos de pequeños, los malos tratos de Max, sus duros entrenamientos, la muerte de mi madre...aunque el no estuvo en ese momento e hizo como que no le importaba yo sabia que le dolia tanto como a mi, mi madre habia sido como una madre para el tambien. Suspire y volvi a la terraza-. Ahora se un hombre y no te muevas- me agache a su lado y le clave la aguja sin pensarmelo siquiera, a veces se la clavaba con un poco mas de fuerza

-Meteme la mano en el pantalon y vas a ver lo hombre que soy.-me rei, Martha me hacia hacer eso a veces, aunque no me gustaba hacerlo, luego me dolia la cara, me gustaba tener mi gesto de siempre.- soy un cabron, por que mi mujer se ha ido con otro, lo tiene todo, es guapa, lista, me saca de quicio, me pega, me dice cosas feas y malas.-la unica mujer para mi.- y tu eres puta, por que siempre te lo he dicho, claro que eso solo te lo puedo llamar yo, ojala te lo llamara mas gente.-moririan en el acto.- me estas jodiendo el hombro a posta, siempre que tu me curas me dejas peor.-le pegue un cabezazo no muy fuerte.- yo te he dejado cicatrices bonitas cuando te he cosido, ¿cuando vamos a ir a matar a alguien? a la noche, cuando se me ve poco, iremos a algun sitio con mucha gente...me apetece

- Si te metiera la mano en el pantalon solo encontraria una minipolla- le dije evitando reirme. Me dio un cabezazo pero no fue muy fuerte asi que no me dolio ni siquiera-. Como me muevas asi de nuevo te abro en canal con la aguja- lo amenace, aunque era mas bien una broma, las de siempre- ya, ya se que tu dejas buenas cicatrices- rode los ojos y me levante un poco la camisa para enseñarle la que tenia en el costado, me la habia hecho con un cuchillo-. Pillo lo de la puta, soy tu puta- evite reirme, termine de coserle la herida-. ¿Matar a alguien?- lo pense-. Si, esta noche vamos a matar a alguien- llevaba planeandolo varios dias y con el aqui seria mucho mas divertido, ademas, asi se calmaria un poco- ¿Recuerdas a Chavez?- le pregunte. Era el que se ocupaba de los negocios de Max en Mexico- esta aqui- queria matarlo.

- Supongo que si, si tu dices que lo conozco puede ser,-en realidad solo habia un circulo muy pequeño de personas que conocia tanto como para recordar su nombre y su cara, unas cuatro personas mas o menos, no me fijaba en la gente, no me gustaba la gente.- es igual, ¿como quieres que lo haga?-lento, tortura a elegir por mi.- ¿puedo elegir arma? no me apetece con las manos, hace bastante que no mato a alguien con un arma.-demasiado.- ¿tienes aqui muchas armas para elegir?.-seguro que si,- quiero un sitio para mi solo donde no pueda entrar nadie.-tener mis cosas seguras y que nadie las toque.- ven a comerme la polla un rato y veras como no te cabe en esa bocaza que tienes, ven, acercate que no muerdo, te va a gustar

- Callate ya jodido imbecil- le dije rompiendo el hilo con el que le estaba cosiendo-. Matalo como te de la gana, pero lo quiero muerto- lo mire de reojo sonriendo-. Y si lo vas a torturar quiero mirar- me levante y le di con el pie en su pierna-. Mueve el culo de ahi, voy a enseñarte algo. Fui hasta mi habitacion y heche el colchon a un lado, levante la base de la cama donde tenia guardadas las armas y se la mostre-. Coge la que mas te guste- le dije.

Spoiler:

Tenia la mano en la barbilla decidiendo que escoger de entre tanta maravilla, no sabia bien que coger, vamos, me gustaria deshacerme de Martha y quedarme con todo aquel arsenal para mi.
- Necesitare, esto, esto tambien.-iba cogiendo de todo.- una bolsa, dame una bolsa.-busco en un armario y me tiro a los pies una bolsa de deporte.- esta sera mi bolsa.-metia cosas.- a mi me da igual que mires mientras me dejes acabar, si tardo te esperas.-llevaba demasiado sin quedarme a gusto.- quiero dormir aqui.-estaria siempre rodeado de armas.- me gusta este sitio.- ¿cuando nos vamos?

- Pues lo siento, pero esta es mi habitacion y la de Silvia, asi que si quieres dormir aqui tendras que compartirla conmigo- me cruce de brazos mientras el cogia las armas, y eso que no habia visto las estanterias de la tienda-. Tenemos que ver donde vas a dormir esta noche- si es que se dormia- o como minimo donde vas a pasarla- si es que llegabamos a tiempo para dormir algo-. Nos iremos esta noche, aun es pronto- comente apoyandome en la pared.
- Mamaaaa- escuche decir a Silvia desde su corralito- mamaaa- volvio a llamar.
- Ya voy nena...- le dije desde donde estaba.

Le di un empujon a Martha para apartarla de mi camino cuando oi gritar a la cria. Sali corriendo siguiendo su voz hasta que la encontre, me miro y se puso a reir, estirando sus brazos hacia mi.
- Voy a dormir contigo, no te pensaba dejar sola,-la tenia ya tomada y la miraba, estudiandola.- eres pequeña, hoy vas a venir con nosotros, a ti te gusta salir y esas cosas, cuando acabe Hugo el trabajo a dormir, no te preocupes por nada, nunca duermo, siempre lo escucho todo, asi que si quieres algo me lo pides, no me vayas a pedir teta que eso es tu madre, yo soy hombre, no hago esas cosas raras.-la levante y me puse a olerla.- Marthaaaaaaaaaa.-grite furioso.- huele mal, está podrida.-no se podia morir, yo solucionaria el problema, si estaba podrida le sacaria el mal que la consumia.-

Rode los ojos y fui hasta el salon. Lo mire con una ceja levantada cuando me dijo que Silvia estaba podrida, cogi a la cria de sus brazos y la mire.
- Alaa, ¿que has hecho?- le dije a la niña riendome-. ¿Tu no cagas o que?, por algun sitio saldra lo que comes...- rode los ojos-. Tu cagas en el water- o a veces ni eso- pero ella no sabe ir al baño, ni siquiera sabe andar, asi que cada vez que hace caca hay que cambiarla- le explique. Fui a la habitacion y la puse en el cambiador para empezar a cambiarle el pañal, cuando acabe se la devolvi-. Mira, huele ahora- suspire, era como un niño pequeño el tambien. Silvia se rio mirandolo y puso la mano en su cara tocandole la barba que tenia.