Casa de Gonzalo Montoya.

- No lo hago mal - dije riendo intentando empujarle aunque con la risa y todo lo que había bebido apenas tenía fuerzas - vale, me rindo, tu tienes más fuerza - dije riendo - me duele la tripa - me quejé poniéndome las manos e inclinándome hacia el lado contrario al que estaba Adam para tumbarme un poco - quieres matarme de la risa o algo así.. para tenerme disecada - dije riéndome más.

-claro que si, disecada en el medio de mi salón. Así podre presumir de tener a la mujer que me gano al pacman- le dije riéndome un poco y echándome hacia el lado contrario al que estaba ella, tumbandome un poco- Ostia que borracho estoy- comente riendo un poco- ¿Porque me has dado esa ultima cerveza?- le pregunte

- Seguro que todo el mundo que venga dirá que soy una estatua bonita - dije riendo un poco acomodándome mejor en el sofá - pones una plaquita que ponga eso, que te gané al pacman.. para que todos lo sepan - comenté mirando al techo, aunque miraba la lámpara que había y me mareaba un poco - la has traído tu - dije cerrando los ojos para no marearme más, aunque así también me daba vueltas todo - para emborracharme a mi y que no te ganara.. tramposo - reí.

-Pues me ha salido el tiro por la culata...- comente con una mueca mirando a Kath- Porque al final solo he conseguido que me ganes, aunque claro, teniendo en cuenta que ahora te tendras que casar conmigo, igual no esta tan mal...- dije dandole el ultimo trago a la cerveza- Ahora no me queda...- me queje y mire al techo como ella.- ¿que hay?- le pregunte

- Sí pero antes de casarme contigo tienes que pedírmelo bien, que sea romántico, arrodillándote y con anillo - dije riendo un poco - no hace falta que sea en un restaurante cursi.. pero que sea bonito - comenté pasándome una mano por la frente, echándome el pelo hacia atrás - la lámpara se mueve - dije poniendo una mueca, dejé una mano en el respaldo y me incorporé despacio - me mareo si la miro - le expliqué mirándole, quedándome sentada en el sofá.

-Vale... tengo que pedírtelo- mire alrededor un poco- Es que no tengo anillos por aquí... y esto no te parece romántico ¿no?- dije riéndome- Soy un friki, las pedidas de los de mi especie son románticas a nuestro estilo, yo te voy avisando, porque estas obligada a decirme que si, que me has ganado.- le dije riéndome un poco y mire la lampara- Nunca me había fijado en ella...- dije mirándola

- Es verdad, me he obligado a mi misma a decirte que sí - dije riendo un poco, eché la cabeza hacia atrás para mirar la lámpara y reí un poco - es bonita - dije mirándole a él, suspiré colocándome bien el flequillo y cogí mi cerveza para terminármela - bueno, futuro marido.. yo me voy a ir ya a casa - dije dejando la cerveza en la mesita - porque si no me quedaré dormida aquí.. tienes un sofá muy cómodo.

-Lo se, estuve una semana entera visitando la tienda de sofas y sentandome diez minutos en cada uno, al final me lleve el mejor- le dije sobre el sofa- Es que tenia que ser ergonomico para poder estar muchas horas frente a la consola sin dolor de espalda- le explique y sonreí.- Bueno, pues te acompaño- le dije levantandome, me fui para un lado pero me enderece enseguida riendo.

- Cuando me vaya a mi propia casa te pediré ayuda para elegir el sofá - le dije riendo - porque estar diez minutos en cada sofá, solo, tiene que se aburrido - comenté mirándole - ayúdame anda - le dije riendo un poco, cogiendo con mi mano su muñeca para levantarme y no tambalearme hacia un lado, aunque no había pensado que el estaba igual o peor que yo.

Me cogió de la muñeca, estirando de mi para que la ayudara a ponerse en pie, pero me pillo algo desprevenido y no me esperaba el peso, me fui contra el sofá y al intentar sujetarme termine por caerme a un lado, en el suelo y como no había soltado su mano y ella había hecho fuerza para levantarse termino encima de mi. La sujete con una mano por la cintura, porque si se iba de lado se daría con la cabeza en la mesa de café, y empece a reírme un poco.

Había sido mala idea sujetarme a él para levantarme porque al final habíamos terminado los dos en el suelo, él se empezó a reír y a mi también me entró la risa, así que me quedé encima suya riéndome, con las manos apoyadas en su pecho.
- Qué mal equilibrio tienes - le dije riendo todavía - ¿te has hecho daño? - pregunté mirándole.

-No, no me he hecho daño- comente riéndome un poco y suspire, cogiendo aire y apoyando la cabeza en el suelo. – Tu supongo que tampoco, porque has caído sobre blando- comente mirándola y baje la mano de su espalda hacia su costado, dejándola alli apoyada y mirándola.- Otra vez te estas riendo de cosas que no se que son.- comente algo mas serio

- Sí, estás blandito - dije riendo un poco, aunque me puse algo seria cuando lo hizo él - me río porque tu te has reído y porque la situación es graciosa - dije riendo - ¿por qué te pones tan serio? - pregunté mirándole curiosa - ha sido como en las películas cursis - el otro día había visto una con Meg en la que pasaba algo parecido.

-Bueno… veras… los hombres somos muy sensibles- le explique- Si sigo riéndome y haciéndote gracias terminare por… querer acosarte o algo peor- comente sonriendo un poco- Aunque igual quieres acosarme tu a mí y por eso estas sonriendo- le dije levantando las cejas y riéndome un poco, no podía evitar reirme porque estaba un poco borracho.

- ¿Sensibles? - dije echándome a reír - vale, lo siento, hombre sensible.. ahora vamos a ser serios para que ninguno quiera acosar al otro ¿vale? - dije mirándole - pero primero.. voy a intentar levantarme - dije riendo un poco, apoyé una mano en el sofá y me impulsé para levantarme un poco, lo haría por partes, primero me sentaría en el sofá y luego me pondría de pie, porque todo se movía demasiado.

-No me has entendido- comente riéndome un poco cuando dijo que era un chico sensible, me hacia gracia las caras que ponía para levantarse- Estas tan guapa borracha como normal… yo me despeino mucho cuando me emborracho, tu vas impecable- le dije todavía tumbado en el suelo

Le miré de reojo cuando dijo que estaba guapa tanto borracha como de normal.
- Y creo que sigo sin entenderte - dije riendo un poco - ¿ahora me haces la pelota? - pregunté mirándole desde el sofá, él se había quedado tumbado en el suelo - tu tampoco estás mal ahora.. o yo voy muy borracha - dije riendo.

-Oooh, te parece que no estoy nada mal ¿eh?- comente incorporándome un poco, apoyando la espalda en el sofá y quedándome sentado en el suelo- El aspecto despeinado y la cara de borracho me queda bien- le dije como si fueran complementos.- Tienes que casarte conmigo, tendré que hacerte la pelota, ¿no?- dije mirandola

- Claro.. vas a ser mi futuro marido, tendrás que parecerme al menos guapo ¿no? - dije riendo un poco, recostándome hacia atrás en el sofá, es que no me apetecía nada levantarme y caminar hasta casa, seguramente Meg ya se habría marchado - tampoco estás tan despeinado - dije pasando una mano despacio por su pelo - ¿te echas espuma? - le pregunté riendo un poco.

-No, de normal lo dejo que se seque al aire libre- le explique- Mi ex siempre me repetia una y otra vez que me lo cortara, pero a mi me gusta mas asi... si no, tengo que estar en la peluqueria cada dos semanas... prefiero llevarlo un poco largo, asi tardo mas en visitar al señor Marcus.- que era el peluquero de toda la vida- Tendrias a que ver a mi sobrino, es pelirrojo y tiene el pelo asi como yo pero con mas caracoles, tiene a todas las niñas del cole locas.- me rei

- Lo tienes guay así - comenté pasando mi mano por sus rizos - pero tu sobrino no liga por los rizos, liga por ser pelirrojo - dije riendo un poco - los pelirrojos tenemos un aura especial - dije riendo más - seguro que es un niño guapísimo - dije sonriendo.

-¿Un aura especial?- pregunte riendome- A ver, espera, dejame buscarla- comente poniendome frente a ella y mirandola fijamente, despues empece a mirar a su alrededor, como si buscara algo- Yo no la veo... pero estoy un poco borracho asi que...- me encogi de hombros.- Los tios con rizos tambien ligamos- me defendi- Podemos decir que es un... 50, 50- propuse

- No sé.. yo diría que los pelirrojos un 70 y los tíos con rizos un 30 - dije riendo un poco - no la ves porque no miras bien - dije mirándole - y porque vas borracho, eso también contribuye - dije riendo, afirmando con la cabeza - me gusta tu pelo - dije sonriendo un poco, mientras seguía pasando una mano, cogiendo un rizo y estirando despacio para después soltarlo.

-Creo que podriamos dejarlo en un 60/40, porque tu acabas de decir que te gusta mi pelo, y si a una peliroja, que se supone que teneis ese aura especial, le gusta mi pelo, es porque tengo casi casi un aura especial en la cabellera, por lo que... subo en el ranking de la sensualidad- le dije sonriendo un poco.

- Vale, pues un 60/40 - dije sonriendo - pero tampoco te flipes eh - dije riendo un poco, suspiré y dejé de tocarle el pelo, dejando la mano en el sofá - debería irme ya de verdad - comenté mirándole - es tarde.. o temprano, según cómo lo mires - dije riendo un poco.