Casa de Caroline y Mark.

- Mark Anthony Turner...- dije rodando los ojos-. ¿Por qué tiene que haber una razón para todo lo que hago?- pregunté mirándolo. Caminé por el salon y me dejé caer en un sofá. Le hice una señal a la chica sonriendo para que se sentara a mi lado-. Quiero estar hoy contigo, no es tan raro...- comenté mirando a la chica cuando se sentó a mi lado, le aparté el pelo a un lado y cogí su cara en mis manos-. Clavadita...- sonreí- me encanta- me daba pena hasta matarla, es que era igual que yo-. No puedes decirme que no la quieres- dije mirándolo a él ahora-. Me ha costado encontrarla- la señalé-. Vamos, baja la guardia, hoy no estoy de misión, quiero pasar un rato contigo- dije seria-. ¿Qué iba a querer de ti?- pregunté-. Se supone que estás encerrado en tu cueva, se supone que yo tengo que estar investigando...pero no a ti, no tienes ningún atractivo vultúrico para mí- dije poniendo una mueca-. Te saqué de la cueva porque no podía soportar que estuvieras allí- eso era verdad, mi parte humana era estúpida, lo odiaba y quería a la vez, a mi simplemente me ponía como una moto-. ¿Qué me dices?- pregunté mirándolo.

- Tu labor como Vulturi sería devolverme a la cueva, aun no entiendo por qué me sacaste - dije mirándola cuando se sentó en el sofá - ¿por qué no podías soportarlo? - pregunté un poco curioso, acercándome donde estaba para sentarme en el sillón de enfrente, así dejaba espacio de por medio - quiero saber qué ganas con esto - aunque sabía la respuesta a eso, se estaba divirtiendo a mi costa - ¿haces regalos de cumpleaños a todos los que te traicionan?

- Bueno...dejémoslo en que no soy una buena Vulturi- dije sonriendo un poco-. Si tanto te interesa...- me alcé de hombros-. Verás mi parte humana es algo debil y tiene un clonflicto bastante extraño...te odia y te quiere a la vez...- comenté mirándolo- supongo que estaba en el momento en que te quería- me reí un poco y negué con la cabeza, después puse una mueca-. Que esquivo- me quejé- hay confianza Mark...sientate aquí- señalé el otro lado de la chica, así ella quedaba en medio-. Pues me he entretenido bastante buscándola- dije señalándola- así que me has quitado el aburrimiento...- resoplé-. Agg, que fastidio tanta pregunta- me quejé-. No, porque no me has traicionado más que tu...que yo sepa- no me acordaba de la mitad de mi vida así que- digamos que no se muy bien como se tiene que tratar a los que te traicionan...además, tu eres mi ex novio, no hay nada de malo en que quiera pasar tu cumpleaños contigo ¿no?- pregunté mirándolo curiosa.

- Estoy bien aquí - dije cuando ella señaló el otro lado de la chica - no lo sé - dije refiriéndome a lo último que había dicho, es que no entendía a qué venía todo esto, estaba siendo una situación d elo más subrealista - no me fío de tu parte no humana - y de la que decía que era humana tampoco - ¿dónde está la trampa Sam?

- Que aburrido eres- dije poniendo una mueca-. Bueno, yo tampoco me fio mucho de tí, pero eso no quiere decir que no podamos portarnos como vampiros civilizados- reí-. Es solo un día Mark, mañana volveré a fastidiarte como hasta ahora...hoy es tu cumpleaños, me aburro a menudo y tu no tenías nada pensado porque estás todo el día encerrado en tu habitación, en vez de hacer tantas preguntas deberías venir aquí y comer conmigo- me quejé fastidiada-. No hay trampa- dije mirándolo seria-. Es algo que me apetece hacer y punto- dije mirándolo seria, es que se estaba poniendo pesadito con tanta pregunta.

- Entonces esto es una pérdida de tiempo - dije mirándola - quieres que te sonría, bromeemos y te siga el juego, hasta que te aburras.. entonces volveré a ser el que te mintió y traicionó ¿no? - dije serio - ahora la pregunta es, ¿qué gano yo con esto?

- De verdad, que fastidio- dije resoplando-. Estás poniéndome dificil no enfadarme- dije mirándolo seria. Lo miré con una ceja levantada y después eché la cabeza hacia atrás soltando una carcajada-. ¿Cómo que qué ganas?- reí-. Una cena deliciosa con mi compañía- eso si había sido divertido. Me levanté y fui a la cocina para coger un cuchillo, después volví rápido y me senté al lado de la chica-. Si no quieres cenar conmigo lo haré yo sola...- dije mirándolo. Le hice inclinar el cuello a la chica y corté un poco con el cuchillo dejando que cayera la sangre, en verdad lo que quería era que la oliera y que le diera sed. Acerqué mi boca a su cuello y pasé mi lengua despacio por él.

- No quiero enfadarte, solo quiero que te vayas - dije levantándome, dejé de respirar en cuando la vi con el cuchillo - que te aproveche - dije dándome la vuelta, es que no entendía por qué me venía a provocar ahora de esta manera, encima el día de mi cumpleaños..

- Oh, venga ya- rodé los ojos-. Me rebajo para venir a verte y me tratas a patadas- dije sorprendida-. Eres un mal educado- dije poniendo una mueca. Así no tenía gracia, me crucé de brazos y piernas mirándolo-. ¿Por qué eres así conmigo?- pregunté curiosa yo ahora-. Intento pasar un rato agradable con un viejo amigo, ahora que me da igual lo que me hayas hecho...y tu no te inmutas...

- Es que no te tiene que dar igual Sam - dije girándome - soy así contigo porque no eres tu, no eres Sam - dije serio - eres.. una mala copia suya, esa tiene más de Sam que tu - dije señalando a la chica que estaba a su lado - quiero que seas tu, que te enfades, me grites y me digas que me odias.. no que hagas como que no pasó nada - como si no me hubiera querido - para jugar a lo Vulturi tienes a tus perros..

- Ya claro...¿quieres que llore por todo lo que ha pasado?- pregunté mirándolo, estaba empezando a enfadarme con sus tonterías. Me levanté del sofá mirándolo-. Tu no tienes ni idea de nada- dije sonriendo un poco. Empezaba a notar como se removían cosas y no me gustaba, había venido porque quería saber si podía acabar de una vez con mi humanidad-. ¿Qué es lo que pasó Mark?- quería que lo dijera él mismo.

- ¿Otra vez? - pregunté mirándola - no pienso volver a hablar de ello para que sigas riéndote - ni siquiera le importaba - te da todo igual, ¿y sabes qué? también debería de empezar a darme igual a mi - dije señalándome - porque tu tampoco tienes ni idea de nada..

- Me estoy partiendo de risa- dije con ironía sonriendo un poco. Estaba empezando a ser fuerte y trataba de rechazarlo, pero tenía demasiada fuerza-. ¡¿Qué es lo que no se?!- pregunté después de unos segundos explotando de una vez-. ¿Que te quería y me traicionaste por vengar a tu novia muerta?- pregunté mirándolo-. ¡Si me lo hubieras dicho te habría ayudado!, no tenías que engañarme- notaba como intentaban aparecer las lágrimas pero las eché hacia atrás.

Me eché un poco hacia atrás cuando por fin explotó, porque realmente no me lo esperaba, pensaba que iba a seguir con esa actitud todo el tiempo que era la única que conocía desde que había salido de la cueva.
- No podía decírtelo, si Sairus se enteraba nos habría matado a los dos.. además, era mi problema, no el tuyo - dije mirándola - cuando me metí en eso ni siquiera te conocía y cuando quise dejarlo ya era tarde, ¿te crees que te traicioné por gusto?

- Sairus no me habría matado- dije mirándolo- él quería que yo estuviera a su lado- me señalé-. Me obligó para intentar destruir a los Vulturi...si me lo hubieras dicho habría tenido una razón por la que enfrentarme a ellos, o a Jane, y no me habrían hecho todas las cosas que me hicieron- hablaba en un tono más bien alto, porque estaba enfadada y me sentía impotente-. Y luego...eras mi novio, se suponía que tenías que decirmelo, lo habríamos arreglado los dos pero...- negué con la cabeza y miré a otro lado aguantándome las ganas de llorar-. No lo se Mark- dije respondiendo a su pregunta-. Yo no se nada...solo se que cuando te vi me rompí en mil pedazitos, y que la única forma que tenía de escapar era yéndome con los Vulturi...y ahora me he convertido en esto- me señalé-. ¡Soy todo lo que odio!- y no podía controlarlo.

- Vale Sam, ¿y yo qué sabía? no quería ponerte en peligro - había intentado proteger a todos lo más que había podido - no Sam, no podíamos arreglarlo los dos.. me arriesgaba a que te pasaran muchas cosas - además, tampoco pensaba que ella fuera a entenderlo, se pensaría que aun quería a Tanya - y yo lo siento cada segundo que sigo vivo - dije mirándola - pero ya no puedo hacer nada.. mi castigo era permanecer ahí, en la cueva, y tu me sacaste.. ahora ya no sé qué hacer - encima venía ella aquí, a confundirme aun más.

- ¿Ponerme en peligro?- pregunté mirándolo-. Yo ya estaba metida ahí hasta el fondo, Sairus me convirtió para eso...solo estaba esperando a que desarrollara mi don y como no lo hice me obligó- dije mirándolo-. ¿A que me pasara qué?- pregunté- ¿que me borraran la memoria?, ¿que me obligaran a beber sangre humana?, ¿que hicieran algo a los demás?- negué con la cabeza y me pasé una mano por la cara cuando noté que se me caía una lagrima, no quería llorar ahora, delante de él-. Yo si que lo siento cada segundo...- dije asintiendo con la cabeza-. Sí, yo te saqué...- asentí de nuevo- nadie se merece ese castigo...y...independientemente de que yo te odie o te quiera tu tampoco...ese no es castigo para nadie.

- Sí que me lo merecía, por traicionar a mis amigos y traicionarte a ti - dije mirándola, estaba llorando y era por mi culpa - ahora no estarías llorando si siguiera ahí dentro - comenté serio - si no me he mostrado ante los Vulturi cuando vinieron aquí o no he ido a Volterra, es porque no quiero que tu tengas problemas - porque se enterarían de una forma u otra de que fue ella quién me sacó de la cueva, y también salpicaría a Ashton y Sarah - pero mi sitio era ese - era lo que me merecía - después del primer año no se estaba tan mal.. - dije sonriendo un poco, aunque triste.

- No, no estaría llorando...pero daría igual porque seguiría sintiendome igual de mal por dentro- dije pasándome otra mano por la cara-. Llorar solo es la expresión- en verdad lo peor estaba por dentro-. Tarde o temprano se enterarán...- lo sabía desde el primer momento, pero pensaba decir que la culpable de todo había sido yo, con un poco de suerte Aro se enfadaba y acababa conmigo, aunque necesitaría el permiso de Marco y dudaba que Marco me castigara así, había gastado demasiado tiempo conmigo-. ¡No!- me acerqué a él y le di un guantazo- ni se te ocurra decir que no se estaba tan mal...- lo empujé un poco pero casi no lo moví, él era mayor que yo. No podía decirme que no se estaba tan mal en aquel lugar, porque de solo pensarlo me ponía yo enferma...- el único momento en el que yo estoy bien es cuando me apago...- dije mirandolo. Solo me sentía bien cuando apagaba mi humanidad.

Dejé la cara de lado después del bofetón que me dio, aunque cuando me empujó no me moví del sitio.
- Conozco vampiros que han vivido durante muchos años con su humanidad apagada - dije volviendo a mirarla - pero eso no es distinto a estar dentro de una cueva encerrado - dije mirándola, pasé una de mis manos por su mejilla, despacio, para quitarle las lágrimas y después dejé un mechón de pelo tras su oreja - ahora sé que hay más de una opción para todo Sam.. las cosas no van a ser siempre así de malas.

- Lo se...- murmuré mirándolo cuando me dijo que no era diferente a estar en una cueva- pero no duele- era más fácil, aunque hiciera cosas horribles, era mucho más fácil no sentir nada. Miré su mano y antes de darme cuenta estaba inclinando mi cabeza hacia ella-. ¿Y cómo no van a serlo?- pregunté en un murmullo. Estaba atontada por el contacto, lo había echado tanto de menos...

- Pero no puedes estar para siempre con la humanidad apagada.. y en algún momento volverá a doler - dije volviendo a dejar mi mano en su mejilla, al principio pensaba que iba a apartarme pero no lo había hecho - si no te doliera, significaría que estás muerta del todo - sonreí un poco, porque de verdad había momentos en los que había pensado que la Sam que conocía no iba a volver, y ahora veía que sí, estaba delante mía - créeme, aunque ahora lo veas todo mal, llegará un momento en que las cosas cambien..

- Ya ni siquiera la apago yo...- dije mirándolo. Se apagaba sin que yo pudiera hacer nada por evitarlo...suponía que interiormente, inconscientemente yo quería hacerlo-. No es que yo lo vea todo mal...- dije mirándolo- es que están mal de verdad...y van a empeorar, como siempre- tragué saliva mirándolo, mirando sus labios, porque me en esos momentos me apetecía besarlo, daría cualquier cosa por hacerlo pero...Cogí su mano de mi cara despacio, cerrando los ojos para aprovechar hasta el último momento de contacto hasta que lo solté-. No debería haber venido...- miré a la chica-. Ni haberla traído a ella...- me acerqué y cogí su cara entre mis manos-. Vete, un ladrón te ha asaltado, pon la denuncia y di que no recuerdas como es...olvida todo lo que has visto u oído- dije mirándola a los ojos para hipnotizarla- corre- me quedé quieta mirando como se iba-. Yo...intentaré no molestarte más- dije mirándolo- ni cuando no tenga mi humanidad...- podía intentar centrarme solo en Nick, distraerme con él cuando me aburriera.

Me quedé mirándola mientras me cogía de la mano, después fui hacia la chica, suspiré en lo que ella la hipnotizaba y la volví a mirar cuando volvió a mirarme.
- A mi no me molestas Sam - dije mirándola - tu a mi no me has hecho nada.. deberías ser tu la que no quiere verme - era lo que no entendía y confundía, ¿me odiaba o no? ¿me había perdonado? ¿quería que fuéramos amigos? - personalmente prefiero que si vienes a molestarme seas tu, no tu copia mala - dije sonriendo un poco - yo voy a estar siempre ahí Sam..

- No lo parecía hacía un momento- dije mirándolo-. No, no vendré...- dije mirándolo aún. En cualquier momento podía apagar mi humanidad y ser la otra o al contrario y ser yo- y tampoco deberías estar ahí aunque yo vuelva a buscarte- dije mirándolo- porque yo te quiero- aunque me dolía todo lo que había pasado- y solo hará que me duela más- el a mi no me quería y era una tontería que me aprovechara de que se sentía en deuda conmigo.