Casa de Gonzalo Montoya.

- Ya, bueno.. ¿pero qué hará hasta entonces? ahora tiene que centrarse y estudiar, no puede ponerse a trabajar, el pobre ya tiene suficientes cosas que hacer - no tendría tiempo para salir con sus amigos y así nunca encontraría una buena novia - ya sé que no va a estar siempre en casa - murmuré mirando la comida de mi plato, si por mi fuera se quedaría para siempre con nosotros.. suspiré y sonreí un poco al verle echarse ensalada - es tu casa y tu hermano, así que como tu quieras - dije empezando a cenar.

- Pues nada, que se quede hasta que encuentre trabajo, después se muda aquí- así el niño de Gema crecía y se le quitaban las ganas de bebé, que cada vez que veía al niño se le iluminaba la cara-. ¿Te parece bien?- pregunté mirándola. Me parecía raro que no me dijera que no directamente como hacía siempre, era muy raro sí-. Supongo que encontrará trabajo pronto así que...- a ver si se largaba pronto.

Sonreí cuando dijo que se quedara hasta que encontrara trabajo, era lo que yo quería, una vez tuviera trabajo podía valerse más por si mismo y en cuanto a la comida yo podía hacérsela y que cuando viniera los fines de semana a comer se llevara los tuppers, o pasarme por la casa, no estaba acostumbrado a limpiar, así también le echaba una mano.
- Me parece bien - le dije a Gonzalo sonriendo - seguro que también le hace ilusión tener la casa para él solo - comenté sirviéndome un poco más de ensalada y de paso echándole a él.

- Se me va a poner la cara verde Brooke- me quejé mirándola-. Ya, seguro que le hace ilusión y me monta a saber cuantas fiestas- dije haciendo una mueca-. Como me destroce la casa le pego una paliza- comenté mientras partía un trozo de pollo y me lo metía en la boca. Después pinché la ensalada y me metí un poco en la boca-. Entonces no le decores mucho el cuarto- le dije a Brooke mirándola después de masticar- porque va a ser gastar dinero para nada, comprale lo imprescindible y ya está.

- La ensalada es buena, se te caería la cara a cachos si no comieras verde, es un alimento necesario - dije mirándole - así que come - dije señalándola con el tenedor - no te va a destrozar nada, es un niño muy cuidadoso - y si no ya vendría yo a ayudarle a limpiar, pobrecito - vale, algo sencillo.. ya lo tenía pensado - dije sonriendo, en el fondo sabía que Yon no pasaría mucho más tiempo con nosotros, ya se estaba haciendo todo un hombrecito - ya.. gastar dinero para nada - como su habitación de juegos.

- Me parece que tu lo ves demasiado santito- dije mirándola serio mientras pinchaba un poco de ensalada-. Voy a parecer la masa- comenté mientras la masticaba-. O un gusano- me reí un poco y cogí la cerveza para beber un poco-. Una cama, una mesilla...poco más- comenté mientras comía volviendo al tema de la habitación de Yon-. ¿Vas a querer hacer alguna reforma en la casa?- pregunté.

Rodé los ojos cuando dijo lo del gusano y afirmé a lo de la cama, la mesita..
- Que sí Gon, tranquilo.. esa habitación tendrá lo básico, así después podremos usarla como habitación de invitados por si alguien viene a casa - dije mientras iba comiendo - no, me gusta como está.. de momento - más adelante podríamos pensar reformas - y hablando de visitas, después de que nos hayamos instalado en la nueva casa y haya pasado un tiempo.. mis padres quizás vengan a visitarnos - dije mirándole - mi madre quiere venir a acompañarme a buscar el vestido de novia - dije sonriendo.

- Si, exacto- dije sobre la habitación de invitados. Miré a Brooke a la vez que comía mientras me iba diciendo lo de sus padres. Asentí cuando acabó-. Ya me imaginaba que querrían venir, tendrás que preparar una habitación para ellos- porque hasta que Yon no desalojara la suya no ibamos a tener cuarto de invitados-. Aunque igual pueden quedarse aquí- comenté pensándolo bien. No me emocionaba la idea de dormir en la misma casa que ellos, la madre de Brooke era igual que ella, y yo solo podía soportar una-. Dile que traiga galletas a tu madre- siempre le decía que me trajera galletas, le salían de muerte.

- Tenemos alguna habitación más vacía Gon, podemos poner un sofá cama de los grandes y cómodos en una de ellas - dije sonriendo - así estamos todos juntos - dije contenta, porque ya que venían yo prefería que se quedaran con nosotros - le diré que traiga ya hechas y haremos antes de que se vayan para que tengas para más días - le dije sonriendo - va a ser genial - dije emocionada - a lo mejor podrías ir con papá a mirar lo del traje..

- Em...- pensé un segundo lo que dijo sobre el sofá cama, no era mala idea del todo-. Me parece buena idea- al final se iban a quedar en casa, había provado a ver si colaba pero iba a ser que no-. Pues nada...compraremos un sofá cama de los cómodos- comenté asintiendo-. Esa idea me gusta aún más- dije sobre lo de las galletas-. Es que tu madre...- negué con la cabeza rodando los ojos para decirle que cocinaba de maravilla. Me terminé lo que tenía en el plato y lo dejé a un lado-. No se si debería ir con tu padre a comprarme el traje...no termina de convencerme mucho.

Sonreí, claro que era una buena idea, en todas las casas tenía que haber un sofá cama cómodo, nunca se sabía quién podía ir a hacer una visita.
- ¿Y por qué no? - pregunté frunciendo un poco el ceño - así no vas solo - o con Chad, Nathan y compañía que no tenían ni idea de trajes - mi padre sabe de esas cosas.. y le haría ilusión - dije levantándome para recoger la mesa.

- No se, es que...tu sabes que tu padre y yo...- es que ese hombre de lo simpático que era me daba miedo, porque me daba la sensación de que me iba a clavar un puñal por la espalda en cuanto me diera la vuelta, o que solo estaba esperando el momento oportuno para matarme-. No se, lo pensaré, de todas formas tenía pensado ir con Chad y esos- le comenté levantándome para ayudarla a recoger las cosas.

- ¿Qué, mi padre y tu qué? - pregunté girándome hacia él - siempre se ha portado muy bien contigo - nunca le había dicho nada feo ni malo, mi padre era un sol con todo el mundo - además, te quiere mucho - dije mirándole de reojo mientras recogía los platos - pero bueno.. como tu quieras - dije dejando las cosas en la encimera, fui al bol de las frutas y cogí dos peras, le di una a él y me senté a comerme la mía.

- Ya, si a mi me cae bien también- era como una versión masculina de ella, alucinante, me imaginaba a sus tíos y sobrinos todos iguales-. Es que no se, me voy a casar con su hija- hice una mueca- a los padres no suelen gustarles esas cosas- que me iba a matar en cuanto le diera la espalda, no podía ser tan bueno. Me senté y empecé a pelar la pera que me había dado para comérmela-. Me lo pensaré- seguramente se empeñaría en acompañarme y acabaría siendo que si.

- ¿Y qué? no todos los padres son iguales, mi padre es feliz si yo soy feliz - dije sonriendo - yo te quiero y él te quiere - dije mientras pelaba la pera, siempre pensaba mal de la gente, no todos eran malos - pero bueno, como tu quieras.. tu no te agobies - me daba miedo que se saturara de cosas y dijera que ya no había boda.

- Ya...- no me terminaba de convencer, pero si le hacía ilusión a ella me daba igual, así me quitaba de encima lo de elegir el traje, porque seguro que el padre me lo elegía, de todas formas a ella no le iba a gustar mi traje, así que me daba igual-. Vale, iré con él- me comí un trozo de pera y la miré-. No estoy agobiado- me miraba como si me fuera a romper o algo así en cualquier momento.

- Genial - dije sonriendo, aunque no le daría mucho la paliza con el tema, seguramente lo estaría diciendo para que me callara - bueno.. ¿qué tal el trabajo? - pregunté sonriendo, habíamos comido deprisa y después se había echado la siesta, así que apenas habíamos hablado.

- Como siempre, la ATF dándome por culo en la oficina- me quejé-. Ha traído a no se ni cuantos tíos para interrogarlos, para nada, porque estaban limpios- comenté poniendo una mueca-. Es una mierda, tengo ganas de que se largue de una vez- comenté fastidiado. Me terminé de comer la pera y me levanté para quitar las cáscaras y llevarlas a la cocina, después limpié la mesa con un trapo húmedo y me senté a su lado-. ¿Qué tal los viejos?, ¿se le ha caido algún diente a alguno?- pregunté-. ¿Qué le ha traido el hada de los dientes?- pregunté.

- Su trabajo es bueno, ayuda a que se dejen de hacer cosas malas - dije mirándole - deberías ayudarla en vez de quejarte tanto - dije limpiándome las manos con una servilleta cuando me acabé la pera - bien como siempre - rodé los ojos por sus preguntas de los dientes - ya no tienen, no se les pueden caer - siempre buscaba cosas para chincharme por mis ancianitos - hemos jugado al bingo como cada jueves, y después hemos almorzado ensalada de frutas - dije sonriendo - mañana vamos a ir al parque..

- Yujú, excursión para la juventud- dije riéndome un poco-. No voy a ayudar a esa tía, es una pesada- dije poniendo una mueca- además, es más mala que el hambre- no dejaba de tirarme los tejos la muy zorra-. Además, para acabar con los malos estoy yo- con los malos que no me pagaban, claro-. Nada, Brooke, déjalo, no la conoces, si la conocieras...- que iba a ser pronto- dentro de poco hay una comida del cuerpo, la conocerás y ya me dirás que tal- dije sonriendo un poco de lado. Vamos a sentarnos allí anda, que estaremos más cómodos- dije señalando el sofá y levantándome de la silla.

- Siéntate tu, yo ahora voy - había que terminar de recoger la cocina, recogí rápido metiendo las cosas en el lavavajillas y fregando las otras y después fui al sofá con él, sentándome a su lado - ¿cuándo va a ser la comida? - pregunté curiosa acurrucándome contra él - qué bien, me encantan esas comidas - dije sonriendo.

- Podrías dejar eso para luego- era una cabezota. Suspiré y me fui a sentar, al rato vino y se sentó a mi lado. Pasé mi mano por sus hombros y la acerqué más a mi-. Pues no lo se seguro todavía, ya sabes que a mi no me gustan esas cosas...de organizarlo se ocupa mi secretaría- y tampoco es que yo le pusiera mucho entusiasmo para enterarme de las cosas-. Supongo que será a final de mes, no estoy seguro- me alcé de hombros-. Ya te avisaré...aunque no te ilusiones porque va a ser una mierda, ya verás.

- No va a ser tan malo - dije mirándole - será genial, ya lo verás, tienes que ponerle más ganas Gon, si no sí que te aburrirás - no le gustaban nada esas cosas, se amargaba él solo - estarás con tus compis, será divertido, además, así te acercas más a ellos, es importante que vean que eres un jefe que escucha - dije sonriendo - hablaré con ella, a lo mejor necesita ayuda para organizarlo - dije contenta refiriéndome a su secretaria.

- Es que yo no soy un jefe que escucha Brooke- me aburría escucharles, siempre les hacía escupir lo que fuera que me quisieran decir y luego los echaba, estaba ahí para trabajar, no para que me tocaran los huevos ni hacer amigos-. Ah, no, no, tu ya tienes bastante con la boda y la casa- negué con la cabeza. No la quería en la oficina, ni quería que se relacionara con nadie de la comisaría, mientras menos la conocieran mejor.

- Ya lo sé, pero al menos así lo aparentas un poco - dije mirándole, debería de serlo pero era una tontería intentar que cambiara en ese aspecto, nunca lo haría - la casa ya está prácticamente toda preparada - solo tenía que pasarme por las tiendas - tengo tiempo de sobra.. jo Gon, déjame ayudar - dije mirándole, poniendo un puchero - sabes que me gusta organizar esas cosas..