Casa de Chad.

-No te engañes, nada va a ser igual nunca más- comente negando con la cabeza. Nosotros ya nunca seriamos iguales, ¿Que iba a hacer?¿fingir delante de los niños? Pues yo no podría hacerlo, no podía hacer como si nada si después el me iba a seguir odiando, no era capaz.- Y con el tiempo sera peor- porque yo iba a envejecer y el no lo haría.

- Pero los niños no tienen que pagar las consecuencias- dije mirándola- ya los han abandonado una vez, dile tu a April que va a perder a una madre de nuevo- la cría había empezado a hablar más, estaba más suelta desde que ella se había venido a vivir con nosotros-. ¿Peor por qué?- no sabía a qué se refería con que iba a ser peor-. Yo no quiero que os vayais, si piensas que es por eso no lo hagas, ten claro que no quiero que os vayais.

-¿Que les vas a decir cuando vean que yo me hago vieja y tu no? Vamos Chad, los dos sabemos que las cosas ya no van a ser igual... he... roto lo que teníamos, ya no vas a confiar en mi- no íbamos a volver, tal y como le veía de enfadado lo tenia claro, no me iba a perdonar nunca.- Lo hare por April- dije al final, esa cria me habia estado consolando toda la semana, no podia fallarle ahora.

- ¿Envejecer?- pregunté levantando una ceja-. ¿De verdad piensas que vas a dejar de entrar en fase?- ni aunque quisiera podría hacerlo-. Solo lo has hecho cuando has sentido la necesidad...y teniendo en cuenta donde y cómo vivimos lo vas a necesitar más de una vez- para proteger a los críos, si se había hecho de su manada ahora lo haría hasta antes si darse cuenta, era una de los instintos de un alpha, proteger la manada-. Así que ni aunque quisieras, no podrías dejar de entrar en fase- dije serio mirándola- y menos cuando son tus hijos- comenté-. Bien- afirmé con la cabeza cuando cedió al final.

-Lo hare- comente mirandole- Me voy a mover por zonas en las que no haya vampiros y cuando... vengan por aqui, estas tu- le señale, confiaba en el, sabia que podia hacerlo sin mi, lo habia hecho otras veces, el era el mejor lobo que habia conocido nunca asi que no me iban a necesitar para nada.- No voy a robarle esto a ninguno de mis hijos, no voy a ser alpha, meteoslo en la cabeza, estoy fuera- le dije seria- De la manada, del consejo y de todo eso.-

- Bueno, lo veremos a medida que vaya pasando el tiempo- comenté yo mirándola a ella serio. No estaba muy seguro de que lo que decía encajara bien con lo que iba a suceder, de cualquier manera tendríamos tiempo para averiguarlo-. Pues entonces ya está decidido- comenté sobre lo de que se quedara. No iba a seguir con lo de que estaba fuera, porque yo no creía que pudiera hacerlo, y tampoco quería que envejeciera, quería que volviera a mi manada, conmigo, pero estaba demasiado enfadado como para plantearme siquiera buscar una solución, necesitaba espacio.

Pasaron dos meses iguales a las ultimas semanas, seguíamos en la misma casa pero las cosas eran malas, yo no había entrado en fase, me iba cuando se hablaba de lobos o cuando se reunía la manada, intentaba hacer como que las cosas no me habian pasado, habia dejado de ser lo que siempre habia sido con los chicos y lo pasaba mal pero intentaba que no se notara, tampoco parecia importarles mucho... Esa noche teniamos la inauguración del hotel, asi que pase por la tintoreria a recoger el traje que habia llevado de Chad, la verdad es que no sabia ni porque lo habia hecho, pro habia llevado mi vestido y ya de paso...
-Te lleve este a la tintoreria- le dije cuando deje las llaves sobre la mesa de la entrada.- Por si te lo quieres poner...- dije dejandolo colgado sobre una silla.

Pasaron dos meses, aunque a mi me parecieron dos años, las cosas seguían igual. Intentábamos disimular ante todos que no era así, aunque los adultos notaban la tensión los niños no parecían darse por enterados, aunque les resultaba raro que Is y yo ya no durmiéramos juntos. A mi cada vez se me hacía más dificil estar así, por un lado quería volver a estar como antes, pero entonces me acordaba de que ella ahora era un alpha de otra manada, que había decidido repudiarme a mi y a la manada y me sacudía el resentimiento. En todo este tiempo me hice cargo de la manada, de la empresa y me inmiscuí un poco en lo del hotel, viendo como iban las cosas, aunque en realidad los que lo llevaban todo eran Nathan y Gema. Hoy era la inauguración y ni siquiera sabía que ponerme, no encontraba el traje que usaba para esas cosas así que casi que había cogido el de las reuniones importantes. Is apareció justo con el traje que estaba buscando.
- Sí, lo estaba buscando- comenté sobre el traje mirándola- gracias- dije mirándola y acercándome a ella para cogerlo-. Los niños están jugando arriba, ya los he bañado- porque sino después no nos daba tiempo.

-Vale- dije sobre lo de los niños, poniendo un poco la oreja para escucharles discutir sobre que color era mas bonito, si el rosa, el verde o el azul.- Te he traido… las invitaciones- dije empezando a abrir el bolso- de… bueno… de tus chicos- dije sobre la manada- Por si quieres que vengan- explique dejándolas sobre la mesa, aparte un par, eran la de mi padre y mis tios.

- Um...vale- comenté cogiendo las invitaciones-. Jackie quería ir- comenté cogiendo una de ellas para mirarla- y Scoot y Nathan- comenté también- pero no se si se las daré- si se las daba era más bien por hacer promoción al hotel, aunque ellos nada más que iban a hacer gasto y tampoco me parecía adecuado invitarlos-. Ya veré- comenté mirando al techo-. ¡Niños!- los avisé. Estaban peleandose por no se qué tontería de qué color.
- Estamos jugando- escuché que me decía James desde la puerta, después la cerró para que no los escucháramos, ellos aún no sabían lo que éramos.

Intente que no se notara la cara que habia puesto al escuchar quien queria venir, como no, super Jackie mano derecha y unica mujer de la manada queria ir, claro que si y si podia meterse en la cama de Chad mucho mejor. Puta zorra, me di la vuelta para caminar hacia la cocina, odiaba pensar en ella de ese modo, pero... es que cada vez veia a Chad mas lejos de mi y no podia soportar querer... volver atras o estirarle de los pelos. Me limpie un par de lagrimas y me puse un vaso de agua.
-Recuerdale que tiene que ir de etiqueta.- le dije a Chad saliendo al salon con el vaso

- Ella sabrá de sobra lo que se tiene que poner, a mi me da igual- comenté secamente cogiendo el traje y llevándolo a mi habitación. Lo colgué para ponérmelo después y salí de la habitación-. De todas formas ya te he dicho que no creo que los invite, solo comerán y harán el tonto- no iban a suponer ninguna promoción, haría más promoción si regalaba las invitaciones a alguien de la calle o de mi empresa-. ¿De qué color va a ser el vestido que vas a usar?- pregunté. Era por la corbata, aunque suponía que acabaría quitándomela a lo largo de la noche.

-Azul claro, aunque tiene unos detalles rosas y morados oscuros- le dije mirandole- Puedes ponerte esa oscura que tienes- era asi como el morado de las flores de mi vestido.- No tienes niguna rosa, ni amarilla ni azul clara- le di un trago al vaso de agua y puse la tele para mirarla un rato, todavia me quedaba tiempo.

- Pues esa- yo tampoco le iba a dar muchas vueltas al asunto, era ella la que siempre me había elegido la ropa para estas ocasiones, se le daba mejor que a mí. Salí al jardín para dejar salir a Txus y cuando entré de nuevo escuché a April llorar- ¿Qué ha pasado?- pregunté mirando hacia arriba.
- April se ha entallado un dedo- dijo Keith abriendo la puerta y asomándose a las escaleras- estábamos jugando- suspiré y subí las escaleras para ver con qué se había entallado.

Mire hacia arriba cuando escuche el llanto, Chad enseguida pregunto y cuando les escuche decir lo que habia pasado me levante corriendo, subiendo tras de el a ver que les habia pasado. Kim miraba a April con cara de asustada, porque estaba llorando.
-A ver, ¿Qué ha pasado?- pregunte acercándome a la cria a la vez que Chad, esperaba que no fuera nada.

Entramos tanto Is como yo al cuarto a la vez, Kim estaba al lado de April, mirándola, suponía que había intentado consolarla o algo así y se había apartado cuando nos había oído subir. Cuando Is preguntó que había pasado la niña levantó el dedo que se sujetaba con la otra mano.
- ¿Cómo se ha entallado?- pregunté mirando a los demás mientras Is se ocupaba de mirarle el dedo, a April no hacía falta mucho para hacerla llorar.
- Pues que iba a coger eso del armario- respondió Keith mirándome- y se ha entallado al cerrarlo- se alzó de hombros y miró a April.
- No es nada- le dijo James colocándose al lado de su madre.

-Ven, déjame ver- comente cogiendo la mano de April, le mire el dedo mientras escuchaba a Keith como lo contaba y luego le deje un beso allí.- Esta un poco rojo, pero se curara enseguida, no llores- le dije acariciándole la mejilla y abrazándola para consolarla- Venga, ya esta, no pasa nada.- le susurre acariciando su pelo

- Pues cuando tu te entallas también lloras- le dije a James para meterme con él riéndome un poco. Miré a April, que se abrazó a Is apoyando la cabeza en su hombro y sorbió los mocos, después de un momento parecía más calmada, aunque hipaba un poco.
- Yo no lloro- se quejó James mirándome mal.
- Ya, ya...- le respondí yo riéndome. April me miró desde donde estaba.
- No seas malo papi- se pasó la mano por los ojos para limpiárselos y miró a Is-. Tengo sed...

-Venga, vamos a bajo todos y nos tomamos un batido- les dije sonriendo, iba a venir Addy a quedarse con ellos y no tardaría en llegar. Bajamos a la cocina, sentamos a los niños y yo prepare los batidos, luego nos sentamos a merendarnoslo con ellos y después los pusimos a pintar y colorear, así podíamos arreglarnos bien, aunque la que necesitaba mas tiempo era yo. En cuanto termine baje por las escaleras, buscando el movil y las llaves para ir metiendolo todo en el clutch que llevaba de mano.

Spoiler:

Merendamos con los niños y yo me quedé un rato con ellos entreteniéndolos mientras Is se vestía, ella iba a tardar más que yo. Al cabo del rato los dejé a ellos solos y fui a vestirme yo. Salí de mi habitación intentando ponerme la corbata, normalmente los nudos me los hacía Is, no se me daba muy bien hacerlos.
- ¿Puedes?- pregunté acercándome a ella y señalándole la corbata, mirándola. Estaba guapísima, me daban ganas de estrecharla y besarla, lo echaba bastante de menos...

- A ver, trae- comente cogiendo la corbata y empezando a hacerle el nudo para ponersela bien, desde aqui le olia, bueno, le habia olido desde que estaba arriba, me encantaba cuando se ponia asi de guapo, tenia... tenia tantas ganas de abrazarle ahora mismo, pero en cambio, estaba seria e intentaba concentrarme en la corbata- Ya esta- le dije cuando termine, soltandosela y poniendosela bien por dentro de la chaqueta.

- Gracias- comenté mirándome la corbata cuando terminó de hacerme el nudo. Me coloqué bien los puños por debajo de la chaqueta y me acerqué al espejo para colocarme bien el cuello, mirando a Is en el reflejo. Me aparté y fui a ver a los niños, nos teníamos que ir ya casi. Los niños miraron a Is cuando apareció por la puerta.
- Que guapa mamá- le dijo Keith mirándola y sonriendo. Los demás asintieron sonriendo y Kim se bajó corriendo de la silla para ir a mirarle los zapatos a su madre.
- ¿No le dices que está guapa papi?- me preguntó a mi April.
- Claro que sí...- sonreí y miré a Is- está preciosa.

-Gracias- les dije a todos sonriendo un poco, mire a Chad cuando le respondio a su hija que yo estaba preciosa y suspire disimuladamente.- Tu tambien estas genial- le dije sonriendo- Bueno... portaos bien niños, os lo digo enserio, si no lo haceis... Addy nos lo contaa y estareis castigados- les avise, luego me acerque a despedirme de ellos y camine hacia el coche, ahora venia lo peor.- Chad y yo en un coche sin saber que decir ninguno de los dos....

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Después de pasarme un rato por la fiesta y saludar a Alexa me fui directo a casa de los tíos de Addy para ayudarla a cuidar de sus primos. Paré la moto en la calle de enfrente y fui a llamar a la puerta, enseguida escuché al perro ladrar, el husckie que me había ladrado las veces que me había colado en su habitación.
- He traído alguna chuchería- comenté mirándola cuando me abrió la puerta, sonriendole un poco.

Chad e Is tenían que ir a la inauguración del hotel que habían montado con Gema y Nathan, y como hacía tiempo que no pasaba tiempo con los niños les había pedido cuidarles yo. Llevábamos un rato jugando a las cartas, o intentándolo, porque se inventaban las reglas todo el rato, cuando escuché la moto de Matt acercarse.
- Hola - le saludé sonriendo al abrir - vale, entonces te dejo pasar - dije riendo un poco, haciéndome a un lado para que pasara dentro, cerré y fui con él hacia el salón.